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J I S O O

Mi reunión terminó y regresé de prisa a la oficina. Solo podía pensar en quitarme los pantalones.

Ver que las ventanas seguían cerradas, y la puerta estaba un poco abierta fue extraño.

Dentro de la oscura oficina no habia nadie, y sobre el escritorio, las bragas de Rosé ya no estaban.

La impaciencia por follar puede esperar, solo mi bebé puede ayudarme en esta ocasión, y no está.

Tome mi celular y salí en busca de mi Rosie, no debe estar lejos de aquí o eso espero. En el pasillo, le pregunté a mi secretaria y dice haberla visto en la cafetería asi que hacía ahi me dirijo.

No me sorprendo de verla en una de las mesas comiendo un trozo de pastel de cumpleaños, solo me incomoda un poco ver que ella no esta sola, hay alguien mas.

La veo reirse fingidamente y comer mientras otro idiota le habla y bebe café.

Quienes la conocen, saben que a mi Rosie no le gusta hablar mientras esta comiendo, se vuelve malhumorada si la interrumpen.

Camino hacia ellos cuando veo al estúpido hombre querer tocar su mano.

-Rosé!

Ella me ve asustada mientras limpia sus mejillas.

-Jisoo? Ya estaba por regresar a la oficina.

-Sabes que no me gusta que salgas de ahí. Vamos.

Extiendo mi mano para que ella la tome, pero antes sujeta el plato donde aún queda pastel.

No se que cara haya puesto el idiota cuando besé a mi Rosie antes de salir de la cafetería, pero tampoco me importa.

La vuelvo a tomar de la mano y de nuevo caminamos hacia la oficina, ambas nos acomodamos en el sillón. Su plato ya está casi vacío.

La miro y me relajo en la comodidad del sofá.
Ella es perfecta. Sus mejillas rellenas de comida la hacen ver adorable.

-Por qué no entienden que eres mía?

-Mmg?

-Te compraré un anillo mas grande.

-Eso no es necesario, mommy.

-Si lo es. Y por cierto, de donde sacaste ese pastel?

-Mgh...es el cumpleaños de alguien llamado Steve.

-Es delicioso el pastel?

Ella me mira y sonríe. Pasa un dedo por la crema de color celeste que hay en el plato y pensé que me daría de probar a mi, pero en realidad ella chupa su dedo.

-Mmm~ mommy, es muy delicioso.

Sus gemidos de placer mientras come son excitantes.
Creo que tendré sexo de oficina despues de todo.

Mi Rosie toma dos de mis dedos y los pasa por el plato para juntar mas betún, lo que sigue es lo mas sexy que alguna vez la vi hacer.

Se arrodilla frentea mi y chupa mis dos dedos mientras me mira.

Su lengua juega entre mis dedos, y su boca chupa como si estuviera dandome una mamada.

Cuando ella me suelta, yo la tomo de las mejillas para acercarla

-Mommy~

-Rosie...Sabes que no me gusta que salgas sin mí.

-Pero..tenía hambre, mommy.

-Tienes un mini refri aquí.

-Tenía antojo de pastel y aqui no había.

-Antojo?

-Sip, es cuando tienes muchas ganas de comer algo-

-Se lo que es, solo...no importa. No salgas sin mí, está bien?

-Y si me da otro antojo?

-Me avisas, y yo buscaré tu comida.

-Esta bien...no me castigará, o si?

-No, hoy no. No vale la pena.

Mi Rosie dice, a veces, cosas sin pensar. O tal vez soy yo, que me persigo mucho y nunca tengo la mente tranquila.

Quería sexo de oficina, por supuesto. Pero en mi mente ahora también hay celos y no me gusta hacerlo asi con ella. Ella no se merece mi mal humor.

-mommy...

-Junta tus cosas, vamos a casa, Rosie.

-Mommy!

-...Que sucede?

-Podemos pasar por mas pastel.

-Compraré uno de camino a casa.

Mi bebé se pone feliz, pero yo sigo igual.

Soy demasiado territorial, lo mío es mio. Mis amigos, mi familia y mi bebé, especialmente.

Cuando llegamos a casa, la dejo en la cocina con su pastel. Yo me encontraba exhausta y pensé en darme un baño, pero no me dejaba irme.

-Mommy, quedate conmigo. Luego nos damos un baño, si?

Me mira con cara de cachorro y no puedo negarme.

Me relajo en el sillón con los ojos cerrados y la oigo caminar al rededor mio.

-Que haces, baby?

-Ensucie mi camiseta, y ahora no puedo quitarme la, mommy.

La escucho lloriquear, asi que abro los ojos y la veo ahí, luchando por quitarse la camiseta sin mancharse el cuerpo con betún del pastel.

-Déjate la, por qué la quieres quitar? Ya esta sucia.

-Es...es que no es mía, es tu camiseta, mommy.

-Otra vez estas usando una de las mías , bebé ? Ven, te ayudo.

Ella levanta sus brazos y yo quito la camiseta. Su rostro se ensucia, era inevitable.

-Bebita sucia. Hoy no te escapas de la bañera.

-Que?! Mommy! Solo ensucie mi rostro, no se vale.

Quito su brassier mientras ella habla.

-Mañana tengo que ir a la Universidad. Usted me llevará?

-Por supuesto que lo haré, y pasaré a buscarte. No quiero que te quedes a dormir ahí.

-Por que, mommy?

El ambiente frio hace que sus pequeños pezones se vuelvan duros y no puedo resistirme a tocarlos.

-Quiero llevarte todos los dias, y preparte tu desayuno. Te necesito conmigo en las noches.

-Solo eso, mommy

-Quieres que te diga lo celosa que me pone que compartas habitación con otras mujeres? O que te bañes en el mismo lugar que tus compañeras?

Ella sonríe y se acuesta sobre el sillon, sus piernas se estiran sobre las mias asi que las acaricio un poco.

-Solo soy suya. No quiero a nadie mas.

 
-Solo mía, bebita.

-La bebé de Mommy.

La veo morder sus labios y apoyarse sobre sus codos.

Entiendo lo que quiere, y lo cumpliré. 

⚠️la segunda parte viene con cochinadas

ᴘʟᴀᴄᴇʀ ᴄᴜʟᴘᴀʙʟᴇ [ɢ!ᴘ₊₁₈]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora