Pasaron los años, dos para ser exactos.
Tenía 12, tú 13.
Te escribía, casi siempre, era un tipo de acosadora, quizás en su momento no lo veía así, pero ahora si, y ¡Dios! Que vergüenza.
Casi siempre me dejabas en visto o solo me contestabas con monosílabas.
Era una niña, lo veía "normal"
ESTÁS LEYENDO
Todo aquello que nunca fuimos
Short StoryNunca fue de él. Solo mía. Siempre quise que fuera nuestra, pero para eso se necesita a dos, y lastimosamente solo estaba yo.