Capítulo 1. Soñando despierto

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Ante el mundo, somos una familia perfecta. La mayor parte de nuestros vecinos nos envidian y critican, la otra parte son hipócritas, pero sinceramente, nosotros tenemos mejores cosas que hacer como para fijarnos en esas pequeñeces.

Mi padre, siendo físico matemático, impartía clases en universidad; mi madre siendo ingeniera química industrial, nunca se desenvolvió profesionalmente pero amaba su materia; mi hermano y yo, estudiábamos. Cuando estábamos en casa, solo hacíamos tareas y cuando no estábamos era porque estábamos en la escuela y mi madre con mis abuelos.

Mi vida era perfecta pero me sentía vacío, tenía todo pero me sentía sin nada.

Cuando entre a la preparatoria, viví un cambio radical en mi vida, puesto que todo era diferencia a lo de costumbre. El ambiente era más ameno y sin limites o reglas, mas o menos como el paraíso para los jóvenes que nos gusta experimentar el mundo.

En mi primer día de clases, era todo tenia que ser perfecto por que tu primera impresión sería la que marcaría el curso de mi vida en aquella escuela. Me levanté muy temprano, me bañé, me vestí y desayune junto con mi madre.

El turno de la tarde me fascinaba porque al ser vanidoso, me daría tiempo de arreglarme como me gusta. Así que al salir de mi casa con mi pantalón entubado color verde, mi playera blanca muy bien planchada y mis tenis verdes, era una perfecta combinación.

Me despedí de mi madre dándole un beso en la mejilla y partí a una nueva aventura, estaba tan emocionado que olvidé mis útiles y solo lleve una carpeta y un bolígrafo.

Me agradaba la idea de crecer y ser más independiente, al subirme al autobús todos ne veían, eso me ponía muy nervioso pero lo supere al escuchar invitaciones de desconocidos a centarme junto a ellos. Yo desprecié a todos y me senté en un lugar vacío hasta el fondo junto a la ventanilla.

Unas cuantas cuadras después, se subió el chico más hermoso que pude ver en mi vida, todo mundo, al igual que a mi lo invitaban a sentarse y desde el primer asiento me viste y avanzaste ignorando a la multitud, yo te ignore y fije mi mirada a la ventanilla.

Llegaste hasta donde yo estaba y me dijiste:
- ¿Me puedo sentar aquí?

Yo voltee a verte y te dije:
- Por supuesto, adelante.

Te sentaste y me dijiste:
- Hola, mi nombre es Alan

Volví a voltear y te respondí:
- Hi, I'm Danniel, nice to meet you!

Con tu sonrisa finjida me respondiste:
- Nice to meet you toó!

Sorprendido, Sonreí y dije:
- Do you know speak english? Where did you lern english?

Respondiste:
- Just in the school! Pero no sé hablar mucho.

Me gustaste, todo el camino te la pasaste hablándome de lo increíble que era la prepa, pero yo iba tan perdido observando tus labios y tus ojos que ni cuenta me di de que ya habíamos llegado a la escuela y que debíamos desbordar el autobús.

Bajaste del autobús y me estendiste la mano para bajar, eso fue bonito pero extraño; entramos juntos y todos nos veían como si fuesemos unos fenómenos, yo me despedí de ti, para que fueses con tus amigos y te dije:
- Pues mucho gusto, te dejo ir para que vallas con tus amigos.

Me di la vuelta dispuesto a irme, pero tomate mi mano y me dijiste:
- ¡Espera! ¡No te vallas! ¡Te presentaré a mis amigos!

Anonadado de lo que habías dicho, te sonreí moviendo mi cabeza señalando un sí.

Me presentaste a tus amigos y dijiste a ellos que me mostrarías el salón en donde me impartirían clases. Nos fuimos de ahí y me llevaste hasta mi salón despidiéndote de mi con un fuerte estrecho de manos y un abrazo deseándole buena suerte.

¡Mi historia entre mis sueños!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora