Prólogo

240 20 4
                                    

"Lo siento cariño" me hervía la sangre al escuchar la voz de aquella mujer que había considerado mi compañera de vida. Nin Siriporn.

Hoy, cumplimos exactamente 2 años de noviazgo, había llegado preparado con un esmoquin elegante y un ramo de rosas con una sorpresa dentro. Porque si, pensaba pedirle matrimonio.

La sorpresa que tuve cuando llegue a su casa, fue escuchar las voces jadeantes de mi novia y su amante, que no era otro que la persona que habia considerado un hermano para mi.

Estaban en la cama desnudos, ambos se besaban tan profundamente, mientras Mike le acariciaba y apretaba los pechos.

Ella gemia bajo su toque, mientras que con la otra mano se adentraba con su parte baja.

No sabia que ella podía ser así, había intentado hacerlo con ella varias veces pero en todas me rechazo, siempre decía que se entregaría solo en su luna de miel a la persona que seria su marido. Eso me había conmovido tanto, había estado esperando ansiosamente.

"Eres tan bueno, me encanta tenerte dentro de mi, sigue así. Más profundo"  Nin gemía tan fuerte que no pude soportarlo más, y abri la puerta tan abruptamente que ambos se sorprendieron.

Mike estaba tan sorprendido como Nin, por su puesto que lo estaban, habia dicho que iría a un viaje de negocios, y regresaría hasta la próxima semana, por supuesto termine antes y volvi para darle una sorpresa a mi novia, aunque el sorprendido fui yo. Que idiota.

Esperaba que me dijera que todo era un malentendido, que Mike la había obligado, sin embargo solo salio veneno de su boca.

"Ahora que lo sabes, no debo fingir más, me repugna estar cerca de ti. Mike es el hombre a quién amo"

Nin habló, mire a Mike con mi rostro molesto, quería golpearlo hasta satisfacer toda la ira que se estaba acumulando en mi interior.

Pero, no podía hacerlo, el alfa de la manda, no pude actuar de esa manera.

Y sin decir más sali de aquella casa, que alguna vez sentí como mi hogar.

"Ngam, te extraño mi pequeño" dije como un susurro solo para mi.

"Siempre estaremos juntos sin importar lo que pase, nunca voy a soltar tu mano y tú nunca vas a soltar la mía, ¿Verdad?"

Aquellas palabras llenas de promesas resonaban en mi cabeza mientras me alejaba de aquel lugar. 

No estaba triste, solo enojado, por haber depositado mi confianza en la persona equivocada. Que estúpido fui.

Fue entonces cuando recordé las palabras de aquella anciana.

"Cuando decidas seguir tu camino" me miró la mujer con cariño en sus ojos. " lo encontrarás" dijo con una sonrisa, no dijo más, pero que mierda, que demonios significaba.

Habló sobre mi y mi futuro como alfa de la manda, pensé habe encontrado a esa persona en Nin, pero esta equivocado.

"Lo encontrarás"

Aquellas palabras siguieron resonando en mis oídos. La mujer no pudo haberse equivocado. Nunca lo hacía.

"Tu otra mitad, te esta esperando, aquella que te conoce mejor que a ti mismo, y debes encontrarlo"

Definitivamente te encontraré y prometo que no te dejare ir nunca.

Porque yo soy Forth Jamornhum.

Y con aquella promesa sali de mi hogar, dejando a mi familia y a mi manada, rumbo a una nueva vida, y tal vez un nuevo amor.

Reclamando su amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora