Reclamando su amor

Diez. "Linaje"

N/A: Desapareci la semana pasada, pero aquí está el capitulo. Lo siento por la tardanza...

Punto de vista de Beam

La puerta de metal se abrió frente a nosotros apenas nos acercamos a ella, Forth en ningún momento soltó mi mano a pesar de que sudaba demasiado. Me miró con una sonrisa en su rostro. Todo estará bien, recuerda que yo estoy contigo. Escuché su voz suave y sexy en mi cabeza.

El auto pasó por las grandes puertas, adentrándonos en un enorme bosque, los altos árboles y el intenso olor de los pinos hicieron sentirme emocionado y ¿feliz? era como si hubiera vuelto a mi hogar. Mis ojos en ningún momento dejaron la hermosa vista ante mi, y escuche un gruñido en mi cabeza. Mis ojos se abrieron, ¿Que había sido eso? posiblemente solo mi imaginación.

"Beam..."

"Beam" la voz suave de Forth me sacó de mis pensamientos, para darme cuenta de que el auto se había detenido en frente de una casa. "Beam, esta es mi casa, necesito que te quedes aquí con Thit, Arthit y Gun" Forth abrió la puerta y me ayudo a bajar, colocó a Thit en mis brazos, me dio una sonrisa y sus cálidos labios aterrizaron en mi frente y en los de Thit antes de subir nuevamente al auto pero esta vez en el lado del copiloto y marcharse.

"Ven, entremos" Arquee una ceja ante el tono casual de Arthit, sabia que ha sido amigo y guardaespaldas de Forth por mucho tiempo, pero él ha dicho que hace tiempo que no viene, Entonces, ¿Cómo podría conocer cada rincón de la casa. "Forth, me explicó con detalle cómo estaba esta casa" empezó a hablar mientras caminábamos, "La habitación de Thit esta arriba, si quieres, yo la llevo" Negué, Forth me la había confiado a mi. "Yo la llevaré" Arthit asintió con la cabeza. Me preguntaba si él también tiene poderes telepáticos. Subí las escaleras y caminé por el pasillo hasta la habitación de la pequeña, abrí la puerta y me sorprendí, era la habitación perfecta para una princesa, pintado de color rosa y blanco, tenia figuras en forma de coronas llenas de brillo y estaba llena de peluches y vestidos. Camine hasta la cama, la recosté, le quité los zapatos y la cubrí con una pequeña manta que estaba adornada con la figura de un oso blanco, mire su cara angelical mientras dormía una última vez antes de salir de la habitación.

"¿Q-Qué vamos a hacer si nos encuentran?" Escuché una voz desconocida proveniente del primer piso, "No será así, Forth no lo permitirá" Arthit habló. "Pero, todo esto está pasando por nosotros, tal vez, deberíamos regresar" Me quedé quieto al pie de la escalera, sabía que no debía estar escuchando, pero que demonios se traen estas personas.

"¡No! ¡Yo Jamás voy a regresar a ese maldito lugar!" El grito de Arthit me hizo soltar un gemido de miedo, inmediatamente llevé mis manos a mi boca, esperando no haber sido descubierto. "No pienso volver a pasar por eso" la voz quebrada de Arthit, provoco en mi pecho un sentimiento de tristeza, se notaba que estaba asustado y lleno de ira. Me hacía preguntar ¿que dolor tuvieron que pasar?

"Arthit..."

"Esta bien Gunnie" Arthit se levantó y caminó hasta la cocina. Dejando a su acompañante solo. "No deberías estar escuchando conversaciones ajenas" solté un pequeño grito de sorpresa cuando Gun se paró frente a mí con una mirada molesta. Me miró de manera acusatoria antes de soltar una carcajada.

"¡Lo siento, debiste ver tu cara!" Levanté una ceja, estaba confundido. "Mi nombre es Gun, soy tu guardaespaldas" habló en tono serio.

"Así que eres el chico que Forth mencionó". Gun sonrió en respuesta.

"No necesito un guardaespaldas, chico" Espete mientras me levantaba de las escaleras. "¡Ya dije que mi nombre es Gun!". El chico rodó los ojos, mientras soltaba una risita. Acaso tengo algo en el rostro, ¿por qué se ríe cada vez que me ve?. "No tienes nada, tranquilo" Sonrió nuevamente sin apartar la mirada de mí. "Por favor dime que me dejaras ir solo al baño" dije mientras caminaba hasta la sala.

"Bueno, tengo órdenes de estar contigo 24/7 a partir de hoy" resople con disgusto, aunque Forth me había hablado sobre la posibilidad de contratar a un guardaespaldas para mí, por supuesto me negué, porque querría a un extraño a mi alrededor todo el día. En cambio, dijo que me daría a uno de los suyos. Pensé que lo había olvidado.

"Sabes, te agradezco por hacerlo feliz" Hablo el chico y lo mire confundido. "¿Qué quieres decir?, un hombre rico siempre obtiene lo que quiere para ser feliz" Negó. "No, él ha pasado por mucho. Y estoy feliz de que haya encontrado a su compañero" Forth ya había mencionado eso de ser compañeros, en realidad no lo entendía. Tal vez este chico pueda decirme mucho más. "¿Tú también eres un hombre lobo?" Sus ojos se abrieron en sorpresa, asintió. "La mayoría de los que trabajamos para Forth somos de una manada diferente. Él nos encontró y nos acogió, se convirtió en nuestra familia" me sentí celoso de que esta persona supiera mucho más que yo de Forth. "No te preocupes, él no me quiere como a ti, después de todo tu eres su compañero" otra vez eso de compañeros. "Qué quieres decir" lo miré desafiante. "Quiero decir que están destinados a estar juntos, ¿Acaso tu no lo sientes?" ¿Sentir? A que se refiere este chico. ¿Será eso que escuche cuando llegamos aquí?

Me sonrió mientras cruzaba sus brazos sobre su pecho. "Ya lo sabes no" Trague saliva, sentí como mis manos comenzaban a temblar, pero esas emociones, no eran mías. "P-Pero, que..." sentí que el aire me faltaba, y mi corazón comenzó a latir demasiado rápido. "Oye, ¿estas bien?" Gun froto mi espalda y abanico su mano para darme un poco de aire, no sabia lo que pasaba, era un dolor que había llegó de pronto, pero como llego, se fue. Mire a Gun confundido al igual que yo.

"¿Que fue lo que paso?" Arthit llego corriendo desde la cocina, tenia un delantal en su cuerpo, en sus manos un sarten y una cuchara de madera. Nos miro confundidos a Gun a mi, antes de soltar una bocanada de aire. "Parece que todo está bien" dijo antes de girarse y regresar a la cocina.

"De verdad estás bien" asentí a modo de confirmación, su rostro reflejaba miedo, sabia que se había asustado al igual que yo. Y quién no, pensé que iba a morir.

Gun fue a la cocina y regreso con un vaso de agua, dijo que Arthit preparaba la cena para seis de nostros. Yo solo asentí.

Mire a Gun, quien había tomado una revista de moda y había comenzado a hojearla. "Si quieres saber, nuestra antigua manada trataba como esclavos a los omega, la madre de Arthit y la mía, fueron torturadas y abusadas muchas veces por los alfas y betas de alto rango" Gun comenzó "¡Maldita sea!" la voz de Gun comenzó a quebrarse. "¿Ellas siguen en la manada?" Él nego, "Ellas fueron asesinadas, cuando el alfa se dio cuenta de que no podrían embarazarse de nuevo, Arthit y yo eramos los únicos omega que habíamos nacido, y que querían que rempelazaramos a nuestras madres" abri mis ojos en shock, sentí como la ira se apoderaba de mi, "pero, gracias a una amiga de la mamá de Arthit, logramos escapar, Forth nos encontró vagando en el bosque, y nos llevó con el a la ciudad, dijo que allí nadie nos encontraría... pero entonces, esta sucediendo todo esto" Me acerqué a Gun y con mi pulgar limpie las lagrimas que brotaban de sus ojos.

"Estas diciendo, que ellos son los que han estado matando a esta manda" Gun asintió, "Ellos dicen que Forth nos robo, y nos quieren de vuelta" mi pecho comenzó a doler, toque su mano y la acaricie tratando de transmitirle tranquilidad, "Forth, no permitirá que nada les pase, ni a ustedes ni a la manda" Levanto su mirada y sonrio, "Si, eso suena como él" sonrei también.

Ambos giramos nuestros rostros cuando escuchamos la puerta abrirse, sabía que era Forth, cuando el aroma que conocía muy bien inundo mis fosas nasales. "Beam..." Me abalance sobre su cuerpo apenas apareció en mi campo de visión, su risa me hizo sentir relajado, sentí su cálida mano acariciar mis cabellos negros. "Estoy en casa" dijo antes de darme un beso en la frente. Estaba perdido en su mirada hasta que una tos falsa llamo mi atención.

Sus facciones eran idénticas a las mías, sus ojos eran negros, sus labios rosados, tenia cejas espesas, solo la nariz era ligeramente diferente. "¿Quien es?" Pregunte confundido. Forth nos levantó a ambos antes de acercarse al chico, lo tomo por los hombros y lo puso frente a mi.

"Beam, recuerdas que dije que había muchas cosas que contar, pero que no las escucharlas de mi" Asentí. "Bien. Él es Ngam. él..." me miró dudoso, lo mire para que siguiera.

"Es tu hermano"