Luz del mañana (Caitlyn X Vi)

Capitulo 1: Nada es lo que parece

Habían pasado meses y aún no había rastro alguno de Powder, o jinx como ella eligió ser. Después del cohete que ella lanzó hacia el consejo, se esfumó... como si nunca hubiera existido, pero... ¿Cómo podía Vi engañar a su corazón? Ella existía, era su hermana Powder, no podía hacer como si nada nunca pasó y olvidarla.

Pensaba en Powder todos los días, esperando que no pasara hambre, frío, y por supuesto que estuviera viva. Soñaba con un futuro juntas disfrutando de las tartas de Caitlyn que tan buenas le quedaban, imaginó la escena con nostalgia. Powder todavía estaba dentro de Jinx y ella no había podido aún sacarla de ese demonio que la poseyó. Alejó esos pensamientos de su cabeza para poner atención a la estricta y bella chica frente a ella.

Caitlyn la miraba con los ojos achinados, notaba como sus gemas azules le analizaban cada movimiento, estaba triste. Por mucho que ella intentara mantener la calma, todo la delataba. Sus pies cruzados, pero temblando, su rostro era seriedad, pero sus labios apretados...

- ¿Todo bien, cupcake?... – Preguntó la de cabellos rosados, y no pudo evitar mandarle media sonrisa para derretir un poco el hielo.

Pero ahora parecía más molesta que triste, cerro sus ojos fuertes para encontrar paz.

- ¿Estas bromeando? Tu sabes que es lo que está pasando, he sido gentil y paciente solo por ti, Vi...- Caitlyn colocó sus manos tapando su rostro, estaba demasiado vulnerable.

- No entiendo...- Contestó, con miedo a lo que fuera a decir. Buscó sus manos, pero la mirada gélida le caló los huesos, y solo alcanzó a ver el desprecio con el que miraba.

-No te hagas como si no supieras...- Dio una pausa para mirar sus zapatos bien pulidos - Solo quiero que te quede claro una cosa Vi. Mientras tú buscas algo que no quiere ser encontrado, estas lastimando a gente inocente, gente que daría todo por ti... - Apretó sus labios y todo cambió; decepción.

La chica de Piltover se puso de pie dando la espalda, abrazándose a sí misma como si hasta a ella le hubiera calado los huesos con sus propias palabras. Vi solo era expectante, no entendía lo que Caitlyn quería decir. Todo iba bien hasta el momento. No entendía estas emociones tan repentinas en ella.

-Recuerdo... cuando me dijiste que éramos como agua y aceite...- ¿Acaso... Acaso ella pensaba en ese día? ¿Ese era el problema?

Imposible, ya sabía ella que Caitlyn era bastante minuciosa y detallista con todo, pero, ¿Por qué recordaría eso ahora? ¿Qué había pasado estos días que se había ido?

- ¿Estás molesta por eso? – Se levantó también con tristeza.

Pero ella se quedó muda. Al notar que ella no diría nada, la pelirosa estiró su brazo para llamar su atención

-Sé que es normal... - Dijo ella dándose la vuelta, una frente a la otra y ya no había enojo ni decepción- Ella es tu hermana, yo tampoco podría hacerle algo a un hermano... - Observó el ventanal enorme a un lado. – Pero esto ha llegado muy lejos... ella no es tu hermana, ella ya no es Powder, no es la dulce niña a la que necesitabas proteger. Ahora, solo quiere hacerte daño y a todo lo que te importe... - Bajó la mirada, y se concentró en la mano magullada de Vi. Las tenía llena de cicatrices, Pero aun así se sentían tan cálidas...

- Yo sé que Powder todavía está ahí... solo que Silco... Él llenó de mierda su cabeza, no es su culpa. Eso no se cura de un día para otro, lo sabes muy bien. -

- ¡Ya déjala ir, Powder murió! – Caitlyn ya no soportaba que dijera otra vez ese nombre, recordaba perfectamente como era esa chica, no era para nada dulce ni nada parecido a lo que Vi muchas veces le contó - Silco la mató cuando se la llevó, esa que está allá – Apuntó con rabia por el gran ventanal, su dirección llevaba al puente y a su extremo el inicio de las calles de Zaun. – Es Jinx, no Powder. Y jinx, no te ama, si lo hiciera... - Caitlyn tomó las manos maltratadas de su chica para abrazarlas – Ella estaría aquí, contigo. Yo hubiera hecho todo lo posible por tenerlas a las dos aquí, y si no hubiera sido posible, hubiera sido capaz de escapar con ustedes...- No entendía a lo que ella quería llegar. De un momento a otro le hablaba de Powder, cuando eso ya estaba aclarado.