Una vez que terminó su última clase y todos los pasillos estaban prácticamente vacíos, Baekhyun salió raudamente en dirección a su "castigo".
Yuna le ofreció quedarse a esperar por él, incluso hacerle compañia si el profesor lo autorizaba, pero él la despidió diciéndole que no quería hacerla perder tiempo en algo que en realidad era su culpa. Aparentemente era bueno mintiendo, porque ella asintió y se fue inmediatamente. Sus últimas palabras antes que se separaran fueron "buena suerte", Baekhyun le sonrió asegurandole que estaría bien, en realidad mejor que bien.
Se tomó su tiempo caminando hacia el salón de Chanyeol mientras tenía una pequeña conversación con su conciencia sobre como sus últimas gotas de inocencia pronto desaparecerían.
Park podría tocarlo o Baekhyun a él rompiendo otra barrera y ya no habría vuelta atrás una vez que cruzaran esta línea. Igualmente él estaba decidido. Porque él quería cruzarla, ese era verdaderamente el punto en cuestión.
Cuando llegó al salón del profesor, las persianas y la puerta estaban cerradas, intentó abrir la puerta pero fue inútil su sonrisa desapareció…
“maldito” susurró, y cuando estaba a punto de golpear la puerta por pura frustación fueron sus rodillas las que se lo impidieron obligándolo a caer al suelo mientras un gemido rompió su pecho, el vibrador había vuelto a la vida y en el nivel más alto, siendo demasiado para que la aún sensible próstata de Baekhyun soportara.
Deslizándose por el piso, Baek inhalo una gran bocanada de aire, tratando de aferrarse al último poco de cordura que le quedaba mientras en su nublada mente escuchaba el sonido de una cerradura.
La puerta se abrió y cuando Baekhyun levantó la vista, vió a Chanyeol observándolo con fascinación, el disfraz de docente había desaparecido de su rostro.
“Mira lo que me encuentro en mi puerta” dijo mientras sonreía y se agachaba lentamente para luego ofrecerle una mano. Baekhyun la tomó y dejó que Chanyeol lo levantara y llevara dentro del salón.
La puerta se cerró tras ellos, y Baekhyun sintió como era presionado contra ella y encerrado entre los brazos de Chanyeol. El profesor puso llave nuevamente y permaneció parado frente a Baek ocupando su mismo espacio, con sus labios a punto de tocarse. El más joven puso sus manos torpemente a su costado mientras el vibrador continuaba embistiendo su próstata.
“Está bien”, dijo Chanyeol a la vez que quitaba un cabello del rostro del estudiante, “aquí no hay nadie, puedes dejarte llevar ahora, déjame escurcharte Byun”.
Baekhyun dejó entonces de intentar suprimir todos los sonidos que quería soltar, dejó de controlar su respiración y al mismo tiempo llevó sus manos a la camisa de Chanyeol agarrándola con fuerza. La desesperación que sentía se filtraba por sus poros, dando pequeños gemidos entretanto movía sus caderas tratando de capturar algo que era inalcanzable.
Chanyeol sonrió mirándolo embobado, “ debo decir que estoy impresionado, lo estas tomando tan bien, casi creería que has hecho esto antes”.
Una mano se movió por la espalda de Baekhyun, deteniéndose en la curva de su trasero, y finalmente la tortura del juguete terminó. Chanyeol apagó el vibrador y lo arrastró hacia su escritorio.
“ No te imaginas cuán orgulloso estoy, y los chicos buenos merecen una recompensa”
Los ojos de Baekhyun se posaron en la toalla que estaba sobre el escritorio, justo al lado de sus documentos, y pensó que el juguete no estaría mucho más tiempo dentro de él.
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Enseñame
Fanfiction*Advertencia ... Historia con contenido +18* Chanyeol el profesor que roba corazones en la universidad, joven, inteligente y muy guapo, es adorado por muchos. Pero nadie sabe que su corazón fue conquistado por el hermoso estudiante de cabellos rosa...