Too Slow Too Fast || KunYang MPREG

1.

- Te amo - Susurré sobre los labios de mi novio volviendo a besarlo, sintiendolo sonreír.

- También te amo Kun - Respondió, dejando un piquito en mi boca, sonriendo y enterrando su cabeza en mi cuello, suspirando.

Nos encontrábamos en una más de las noches en las que dormíamos juntos, mis padres trabajaban así que tuve la oportunidad de invitar a mi novio a pasar la noche conmigo.

Mis padres lo adoran, y cómo no si es un sol de persona, siempre se ofrecía para ayudar a mamá en lo que necesitara en la casa y compartía temas de interés con mi padre, YangYang tenía ese don de caerle bien a cuanta persona conociera. Así que no era un inconveniente que pasara las noches conmigo, mis papás estaban enterados de eso y confiaban en que eramos respetuosos con la casa.

Eso no era un problema, YangYang y yo no teníamos planes de hacer el amor y antes no hemos tocado el tema, así que nuestros padres podían estar tranquilos.

- ¿Ya quieres dormir? - Le pregunté acariciando su cabello, se supone que veíamos una película en mi laptop pero sabía que cuando YangYang tomaba una posición cómoda y se aferraba a mi sin intenciones de moverse es porque planeaba dormirse.

- Sí, me dio sueño - Asintió, bostezando y afianzando su agarre en mí, dejando un besito en mi cuello.

- Bien, durmamos entonces - Quité la película y apagué la computadora, dejándola bajo mi cama.

Me acomodé mejor y apresé a mi novio con mi cuerpo, rodeando su cabeza con mis brazos, pegándolo a mi pecho, dejando varios besitos en su frente, haciéndolo sonreír. Él envolvió una de sus piernas en mi cintura y me rodeó por el abdomen en un abrazo, dejando casi nada de espacio entre nosotros. Amaba tenerlo así de cerca.

- ¿Kun? - Susurró, yo solo hice un sonido de que lo estaba escuchando - En serio te amo.

Abrí los ojos y me alejé un poco para poder ver su rostro. Estaba serio pero podía notarse esa calidez tan característica de él. Sonreí enternecido y bajé una de mis manos para acariciar su mejilla.

- Yo también en serio te amo - Le respondí, acercándolo para darle un beso cálido.

Él lo respondió con notorio gusto y apretó su pierna en mi cintura, juntando nuestros abdómenes. Los labios de YangYang son la cosa más adictiva que he probado, tan esponjosos, tan rechonchos, tan suaves, tan dulces, tan besables y tan mordibles, y lo mejor, tan míos.

Me confesó que fui su primer beso, incluso, tardamos en darnos ese dichoso beso tres meses, yo por tímido y él por vergüenza a que no me fuera a gustar cómo besaba por su inexperiencia. De no haber sido por Jaemin que me comentó eso que le había dicho YangYang no sé cuanto tiempo más habría pasado hasta que nos besáramos.

Sin embargo, eso solo hizo que el beso fuera de lo más lindo, uno de los mejores recuerdos que teníamos.

Habíamos ido a comprar una nieve y la comíamos en un jardín, era de noche, tal vez las ocho y media, pero eran vacaciones así que no había problema con el horario. Pasó el tiempo tranquilamente hasta que se acabó la nieve y se cerró la conversación. Sentados en una banca, miré a mi novio siendo iluminado por la luz de la luna, la cual estaba enorme, preguntándome cómo es que podía existir alguien tan hermoso y cómo se había fijado en mí, ese pensamiento me recordó lo que me había comentado Jaemin.

"Le da vergüenza besarte porque no sabe si te va a gustar cómo lo haga, no esperes que él de ese paso, pero si tu tomas la iniciativa él te va a responder"

YangYang notó mi mirada y también se me quedó viendo, como si supiera lo que pensaba y me indicara que cualquier movimiento él lo aceptaría. Primero lo abracé, me acomodé en la banca para poder tenerlo de frente y rodeé su cintura con mis brazos, estrujandolo, él también rodeó mi cuerpo por mi cuello, suspirando a un lado de mi oído. Me separé un poco aun sin soltarlo y lo miré a los ojos, llevé una de mis manos a su mejilla y la acaricié, él cerró los ojos y se acurrucó en mi caricia, disfrutando el contacto, detuve el movimiento y dejé mi mano sosteniendo su cachete, acercándome con lentitud a su rostro. Cerré los ojos y junté nuestras narices primero, para que él sintiera el tacto y comprendiera a lo que iba, no vi una reacción negativa de su parte así que sin perder mucho tiempo uní mis labios a los suyos. En ese momento pude sentir mi corazón estallar y una lluvia de fuegos artificiales encenderse en mi interior, llenándome de emoción y alegría, los labios de mi novio eran tan preciosos como se veían. Pude escuchar e incluso sentir el pulso acelerado de él cuando subí mi otra mano para tomar ambas de sus mejillas, comenzando a mover mis labios. El contacto era torpe y delicado, pero era perfecto de esa manera, era dulce por el helado que recién habíamos comido y cálido por los nervios que sentíamos. Después de varios segundos de iniciado el beso me alejé, dejando tres piquitos antes de separarme totalmente.

YangYang abrió los ojos y pude notar su rostro sonrojado, supuse que el mío estaba igual. Sonrió tímido y volvió a abrazarme, escondiendo su rostro en mi pecho.

- Te quiero - Le susurré, acariciando su espalda.

- También te quiero - Me dijo y suspiró, haciendome sonreír.

Sí, había sido un primer beso lindo.

Ahora, la experiencia de dos años había sido mucha, por lo que los besos eran más seguros y sabíamos cómo nos gustaba que fueran.

Bajé mi mano a su cintura y la acaricié, sacándole un suspiro a mi novio. El aire se me comenzó a ir, así que me separé de él despacio, dejándole tres piquitos en los labios, besé sus mejillas, su nariz y su frente, sintiéndolo sonreír.

Volví a la posición inicial, rodeando su cabeza con mis brazos enterrando su rostro en mi pecho. Lo sentí bostezar y después suspirar, acomodándose mejor con mi cuerpo.

Comencé a acariciar su cabello con la intención de relajarlo, y tarareé una melodía que había estado en mi cabeza durante un tiempo, no era fan de cantar, sentía que no lo hacía bien, pero a YangYang le encantaba oírme cantar así que solía pedirme que lo hiciera.

- They know we got the chemistry - Canté, siguiendo el ritmo de la melodía que había creado.

- ¿Canción nueva? - Lo oí preguntar adormilado.

- No, acabo de inventarlo realmente, solo salió - Confesé, la situación en la que estábamos y lo que sentía se mezclaron y surgió ese verso en mi cabeza.

- Suena lindo, suena como a algo muy nuestro - Y sonrió.

Sonreí igual y asentí.

- Sí, muy nosotros - Continué con las caricias, aun tarareando con la boca cerrada, emitiendo el sonido con mi garganta.

No pasaron tantos minutos cuando sentí que YangYang se había dormido, así que pude estar tranquilo y dormir yo también. No me gustaba quedarme dormido sin que antes él lo hiciera.

Besé una ultima vez su frente y desconecté mi cerebro de la realidad.

We′ll take the highway to heaven And I can't wait to love you all alone.

Fue lo último que cruzó por mi mente antes de que quedara totalmente dormido, siendo parte de la melodía que había estado pensando.