𝖀𝖓 𝖉𝖎𝖆 𝖎𝖓𝖙𝖗𝖆𝖓𝖖𝖚𝖎𝖑𝖔

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Narrador

-¿China? ¡Que sorpresa! ¿Q-Que haces aquí? Pensé que estabas con Vene por... Ya sabes del proyecto de la ONU- Habló el mexicano nervioso, no por la presencia de China si no por que para el era incómodo que alguien más viera de sus fachas con alguien que no es de su competa confianza.

-Tengo un tema muy importante que tengo que charlar contigo... ¿Me permite pasar?- China hablo seriedad la mujer no le importa en lo absoluto la vestimenta tan desinformal y tan horrible a la vista el objetivo de ella era advertir al Mexicano de no separar a su dulce amor de ella.

-¡Claro! Que bueno que no me agarraste haciendo mi que hacer, por que si no ya hubieras visto un completo demasdre por aquí - México dejó a aquella China pasar por se iba quitar sus tacones hasta que... - Oye no te preocupes, si quieres puedes pasar con tus tacones puestos, total voy a volver a limpiar por el gran aburrimiento que tengo

-¿Esta seguro de eso? ¿No le molestara? - China miró aquel mexicano con una sonrisa hipócrita ella trataba de ser amable mientras que el mexicano le dedicaría una sonrisa dulce.

-Pará nada, no me molesta en lo absoluto, siéntete como en casa, te esperare en la sala iré por unas botanas por si se da el caso que nuestra platica dure más de lo normal, no tardó vuelvo en unos minutos- Hablo el mexicano, se incomodo un poco que alguien fuera de sus hermanos, padre o "hijos" viniera tan dé repente sin embargo a el no le molesta en lo absoluto.

La mujer solo asintió tenia su sonrisa supuestamente amable, se dirigió a la sala de México por el momento había un gran silencio, solamente estaban ella y Paco aquel perro se durmió en uno de los sillones, la china lo observó con desagrado, especialmente no quería estar con este pais tercermundista bueno para nada, ella deseaba estar alado del Ruso, para que este ultimo nombrado la mime y le de ese cariño que necesita, por mucho tiempo esta enamorada del chico y no dejara que nadie se lo quite ya que no hay alguien mas de su mismo nivel.

El mexicano agarro dos platos uno con muchos dulces típicos y otro eran unas papitas saladas por supuesto para que su invitada se sintiera cómoda preparo un te chino por suerte aun estaban en buen estado las hojas de camellia, así sin perder el tiempo lo hizo un tiempo después, ya estaba listo y puesto en una charola, así se dispuso ir a su sala se encontró con la mujer con los brazos cruzados y con la misma mirada seria "Chale ya se emputo la vieja" pensó el mas bajo.

-Una disculpa por la tardanza China, es que te hice un te de camellia, además puse algunos dulces sientas cómoda- Hablo el mexicano, dejando la charola en la mesa, se sentó en su sillón individual- Y bien...¿Para que soy bueno?

-....-China tomaría la taza para darle el sorbo- Bien seré iré al grano ya que detesto desperdiciar mi tiempo ¿Planeas quitarme a Rusia y quedártelo para ti solo?

𝓐𝓶𝓸𝓻𝓮𝓼 𝓷𝓸 𝓬𝓸𝓻𝓻𝓮𝓼𝓹𝓸𝓷𝓭𝓲𝓭𝓸𝓼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora