Capítulo 15. Mañana

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TinCan
Can

Mirando al chico que maneja y de vez en cuando desvía la mirada, me siento mal. Muy mal. No me gusta ver a Wish llorar, me duele mucho verlo así.
Ese tonto de Two se está convirtiendo en alguien que esta comenzando a caerme de la mierda. ¿Qué le pasa?. Ya no es ese lindo chico que conocí hace once años, ahora es un idiota que trata mal a mi amigo, él no es él Two con quién una vez jugué video juegos, no es él Two que se emocionó cuando se enteró que iba a ser papá. Ni muchos menos el que gritó porque se iba a casar.

Ahora es alguien que desconozco...

-- Ya no llores..

Le digo a Wish mientras sostiene el volante con una mano y con la otra limpia su cara.

-- ¿Quién llora? -- niega -- Solo cállate.

Suspiro.
¿En dónde está ese chico que Tin decia que era una caja de felicitaciones y buenos deseos?.

-- ¿A dónde vamos Wish?

-- No podemos ir a casa ¿No? - niego, me voltea a ver cuándo detiene el auto frente al semaforo y le veo -- Con Plan.

-- ¿Para qué?

-- ¿Quieres que te regrese al departamento?

Emprende camino cuando el color cambia a verde y no me deja siquiera contestar, me sostengo del tablero, ya que da una vuelta en el retorno a toda prisa.

-- ¡Wish! -- le gritó -- ¡Para! ¡No me iré!

-- Ah.. -- vuelve a dar vuelta -- pensé que querías estár con ellos.

Niego.
Aunque por ahora todo está bien con Tin, no voy a dejar a mi mejor amigo solo en todo esto. Porque eso es lo que Wish es para mí, no importa que solo convivi con el más de una semana hace unos años. Ha sido alguien muy importante para mí. Esa conexión con él ha sido única, no puedo explicarlo.

-- Creo que Two está siendo raro. -- me acomodo en el asiento

Veo al frente, y solo autos nos arrevasan.

-- Da igual. -- niega

-- ¿Tú... Tú de verdad ya no quieres estár con él?

Acelera un poco más, no me responde y cruzo mis brazos.

-- Yo solo quiero volver a ver a mis niños. Él puede irse a la mierda.

-- Wish.. -- suspiro -- yo también quiero volver con mis hijos, pero.. quiero volver y que estemos todos bien.

-- Pides mucho Can...

No digo más.
Solo me pierdo en el camino y en los sollozos de Wish. Ese tonto de Two más vale que se cuide porque no me gusta que se metan con mis amigos.

Un rato después. Llegamos a la casa de Plan, las luces ya estaban apagadas y Wish dejó el auto un par de casas adelante de la suya. Bajó del auto, yo le sigui, le puso la alarma de seguridad y corrimos por la cera, brincando yo ágilmente la cerca cuando llegamos, pero Wish lo dudó. Le miré extraño.

-- ¿Qué? -- le dije del otro lado.

-- Yo... Me duele mi pierna izquierda... Creo que cuando bajamos las escaleras a toda prisa me la lastimé.

Entrecerré los ojos.

>> No hay ningún bebé Can, deja de verme así.

-- Ya lo veremos. -- negué.

Me subí en la cera de hierro, le ayudé a subir y en verdad él no podía brincar esta pequeña cerca. Lo hacía tan cuidadosamente que me preocupé. Tomé sus manos, cuando llegamos al suelo brincamos y él se quejó.

Mundos Cruzados🦁🐻 [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora