──── ・ 。゚☆: *.☽ .* :☆゚. ────
En una mañana blanca de invierno, donde miles de adorados recuerdos invadían mi ser, escuché de ti. De cómo te iba, de cómo te encontrabas, de lo que harías, y tan simple como lo es caer, suspiré adolorido al sentir mi corazón palpitar con frenesí.
Allí estaba mi yo de dieciocho años otra vez, con una sonrisa pintada en el rostro y manos inquietas, como si en cualquier momento aparecieras en mi cuarto y me besaras con tus dulces labios de cereza. Por un momento, de verdad, anhelé como nunca antes lo había hecho, verte aquí, conmigo otra vez, para así no soltarte nunca más cuando te fundieras en la calidez de mis brazos.
Sin embargo, mi realidad se dibujó ni bien abrí la puerta, pues tú no estabas aquí y tampoco tendrías por qué estarlo, después de todo, no nos vemos desde hace cinco años, y eso estaba bien. Debíamos seguir con nuestras vidas, debíamos seguir creciendo en todos los ámbitos, a pesar de que mis sentimientos por ti siempre se mantuvieron intactos.
Es sencillo y, a la vez, triste de entender, pues eres la mujer que más he amado románticamente en mi vida, y la que me ha marcado de la forma más hermosa posible, tanto en la rosa alegría como en la azul tristeza.
Por eso hoy, cuando escuché que encontraste a un chico y que tus sueños se hicieron realidad (y que te vas a casar), no pude evitar llorar por ti, por mí, y por lo que fuimos. Lloraba porque me sentía feliz, de verdad que sí, supongo él te dio las cosas que yo no pude darte, y por eso quieres unir tu vida a la suya. Si es amor lo que encontraste, entonces puedo llorar de felicidad, aunque también de tristeza, pues siempre creí que esto que se formó entre ambos nunca acabaría.
Que, en algún punto de nuestras vidas, tú y yo nos volveríamos a ver, que nuestros ojos brillarían y nuestras bocas, sedientas de amor, se juntarían, pues tú recordarías que, para mí, esto no se había acabado.
No aún. No para siempre.
Pensando en aquello, te esperé en el parque que solíamos frecuentar cuando estábamos juntos, con mis mejillas frías y el baho escapando de mis pálidos labios. Recuerdo que tú siempre eras puntual en nuestras citas, también eras la que siempre organizaba todo, y yo, feliz de verte sonreír, aceptaba cada una de tus ideas. Desde maquillarme como princesa hasta teñirme el cabello de rojo, para que así combináramos atuendos. Yo, por otro lado, era el más detallista de la relación, desde una pequeña carta para subirte los ánimos, hasta flores violetas de sorpresa cada que acababas tus clases de la universidad y te quejabas de tus incompetentes compañeros.
Por eso, ahora que has llegado, puntual como siempre, a esta pequeña cita que he organizado yo, no puedo evitar preguntarme, mi vieja amiga: ¿Por qué estás tan tímida? No es propio de ti el tener tu mirada miel fija al suelo, con tus mejillas prendidas en carmín y labios apenas curvados.
No quiero que te retengas ni te escondas de la luz que siempre ha sido tuya, porque entonces causarás que en cualquier momento las lágrimas que me fuerzo a no derramar, caigan con facilidad.
—Hola, Tae.— hablaste primero, acariciando mi alma con tu suave y profunda voz.
—JiSoo, hola.— te respondo, abriendo mis brazos y envolviéndote en ellos, sintiendo tu cabeza acurrucarse en mi pecho, mientras yo, con los ojos fuertemente cerrados, pienso en que esta será la última vez en la que te abrazo y no eres de nadie.
Creo que tú sientes aquello, sientes el temblar de mi alma y por eso te alejas, para no romperme a destiempo, tomando mi rostro frío en tus cálidas manos.
—Supongo que ya lo sabes.
—La ciudad es pequeña, y tu tía es mi vecina.— menciono divertido, causando que tú rías y niegues delicadamente, mientras veo los copos de nieve cayendo y decorando tus hebras ocuras.

ESTÁS LEYENDO
Someone like you [TaeSoo]
Fiksi Penggemar«Porque a veces el amor perdura, pero otras, en cambio, duele» ➛One-shot Vsoo/TaeSoo. ➛Leve mención del JinSoo. ➛Inspirada en la canción Someone like you de Adele, pero especialmente en el cover de TaeHyung. ➛Contenido heterosexual. ➛Drama/romance. ...