24 horas.

Extra.

Caminaba por las calles del nublado día, dejándose guiar por melodía de las gotas golpeando el alrededor y su paraguas.

Riin~ Riin~

El vibrar de su celular lo hizo detenerse para tomar la llamada.

—¿Qué quieres?—. Pregunto antes de volver a retomar su andar.

—Eeeh~ ¿Así tratas a un amigo?—.

—Habla rápido o colgare—. Advirtió.

—¡No no no! Ya hablo...—.

—¿Y bien? ¿Qué quieres?—.

—¿Estas cercas?—.

—No—.

—¿Vendrías?—.

—No. Sea lo que sea, pideselo a alguien más, me dirijo a casa, adiós—.

—¡No no no! ¡Espera A-!—.

Finalizó la llamada abruptamente, guardo su celular nuevamente y siguió su camino.

Después de una corta y relajante caminata, llegó a su departamento, donde fue recibido por su mascota.

—Estoy de regreso Pelusa—. Acarició su cabeza y Pelusa en respuesta solo ronroneo.

Después de despojarse de lo innecesario, ingreso por completo a su departamento, siendo recibido por un abrumador silencio.

Miaaauuu~

El maullido de pelusa lo hizo voltear a prestarle atención, viendo como empezaba a jugar con la cinta del moño de la caja de regalo en su sillón.

—No hagas eso Pelusa—. Tomo al gato entre sus brazos para detenerle.

Lo soltó en el suelo antes de ver la caja, como una vieja costumbre, la abrió viendo su interior como varias veces lo hacía hecho antes.

Rrr~ Rrr~ Rrr~

El ronroneo de su gato restregándose en su pierna lo hizo salir de sus pensamientos.

—¿Tú también lo extrañas?—. Preguntó con una leve sonrisa.

El gato solo empezó a acicalarse.

—Sera mejor que me ponga hacer la cena—. Se dijo a si mismo.

Cerro la caja y fue al refrigerador de su cocina en busca de ingredientes para la cena.

[....]

Caminaba tranquilamente, escuchando los autos cruzar los charcos de agua mientras el aire húmedo golpeaba su cara, siguió caminando hasta que llego a su destino, una vez ahí, entró con la llave.

—Estoy en casa~—. Anunció sin mucho ánimo.

—Bienvenido, hijo—. El primero en recibirlo fue su padre.

—¡Katsuki! ¡Hasta que llegas mocoso!—. Fue lo que dijo su madre desde la cocina.

—¿Como has estado, Katsuki?—.