Prólogo

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Levante mi celular la mañana de un jueves cualquiera a otro en casa y en la escuela, en el que tengo que prepararme para el incio de mis días en lo que llevo cursando el periodo de mi carrera universitaria.

Desde niña normalmente los cuentos de amor me parecían algo raros y antiguos, y al ver a personas besarse en las calles yo volteaba a ver a otra parte pero, creo que es algo normal cuando eres niño.

Antiguos en el sentido de decir que

Siempre pensé que el amor llegaría de manera aleatoria, consciente de todas las nuevas cosas que llegaron para mí, volando por las nubes, sentir como el estómago se revuelve de emoción al ver a esa persona, como en las películas románticas.

Constantemente pensaba en como sería el mío, romántico y pasional, o amistoso y leal, o pragmático sería de los que más deseo y busco, como toda una niña soñadora.

En algún momento comencé a sentir la necesidad de amar y ser amada, y ahí fue cuando por primera vez todo mi mundo comenzó a experimentar nuevas sensaciones de dolor, nuevas amarguras que me quemaban la garganta, sintiendo mis párpados pesados, mis ojos hinchados, mi cuerpo reforzado y mi mente en una oscuridad obsoleta donde no encontraba salida

En ese momento decidí seguir más mi orgullo que a mi corazón para que nadie lograra herirme, caminando por esa oscuridad donde con mis demonios aprendería a ver sin miedo

Y estaba en un gran error, al guardar tanto, llegue al punto de decir lo que mi corazón pensaba, sin darme cuenta lo dejaría si lo que expresó fueran cosas buenas, a lo largo del tiempo en relatividad comencé a sacar todo lo que ya no soportaba cargar

Fue entonces cuando por primera vez sentía satisfacción al decir lo que pensaba fue como lo incorrecto en lo correcto, como si todo estuviera mal, pero en el fondo yo sabia que no estaba mal, se sentía como un mal necesario, hasta que ya no fuera necesario

Como unas palabras que escuche y son algo tipo " no te guardes dentro las palabras, dime que me echas de menos cuando me echas de menos, dime que me quieres cuando me quieras, cuéntame a qué miedos tienes más miedo, dime qué te gusta y cómo te gusta pero, no te guardes dentro las palabras" y tiene toda la razón porque lo he visto y la principal causa de muerte del amor, es el silencio.

Two MoondsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora