-¡Confiesa! - gritó Phie desde mi cama mientras me lanzaba palomitas a la cara.
Mi prima, Samantha y David habían invadido mi habitación celebrando una especie de pijamada por la llegada de Phie. Había de todo, nutella, palomitas, gomitas y más nutella, me encontraba en el puto paraíso.
- Oh, vamos señorita, hable ahora o calle para siempre
- Mejor callo para siempre - sonreí de forma inocente.
Todos me miraron molestos y de repente una estampida de palomitas me llego al cuerpo. Tome una almohada y usándola como bate de béisbol, di golpes al aire consiente de que así no podía regresarles el ataque.
-¡ALTO! - el grito de Sam nos hizo parar a todos. Mi hermana pocas veces gritaba y si lo hacía era porque realmente estaba irritada. Y si, temí por mi vida.
Se acercó a mí con paso lento y al llegar a mi lado murmuro con tono amenazador.
-Confiesa
Ahora es cuando les cuento que esta pasando. Todos se habían dado cuenta de mi extraño comportamiento durante la tarde a causa del idiota y querían saber el porqué. Especialmente Phie, que como buena vieja mitotera que es, quiere escuchar todo el chisme.
-Nop
Sam frustrada, soltó un gruñido.
-Eres imposible.
Phie se levantó del sillón en el que estaba pudriéndose muy femeninamente, siéntase el sarcasmo, y se colocó a un lado de mi hermana. Sonrió maliciosamente y de nuevo temí por mi vida.
Pero sin previo aviso, Phie tenía tomado mi pie y me estaba arrastrando por toda la casa. Wow. ¿Así se sentían las hormigas?
Se ve genial desde aquí abajo, todo se ve tan gigante. ¡Ahora quiero ser una hormiga! Uh, parezco retrasada hasta en mis propios pensamientos. ¿Alguien tiene el número de un buen psicólogo?
Abruptamente mi trasero había sido golpeado contra el piso sacándome de mis pensamientos sobre ser algún día una hormiga, aunque pensándolo mejor no quiero que me aplasten, seria feo. Soy muy joven para ser puré de hormiga.
-¡Tía! - Phie se tiro a los brazos de mi madre y ella le devolvió el abrazo. Empezaron a hablar por susurros hasta que se dieron cuenta de nuestra existencia.
-Kaitlyn, querida - dijo mi mama con un tono meloso - cuéntame el chisme
Mi madre me guiño el ojo y espero con ansias a saber lo que tenía para contar. ¿Es mucho pedir una familia normal?
Ya saben, sin una prima que parece que toma popo de unicornio cada cinco minutos. Una hermana que no trate de intimarte solo porque quiere también escuchar el chisme. Una madre que no se crea adolescente y lea las revistas seveenten esperando que algún día su amado Harry Styles venga por ella y le enseñe completo el Kamasutra. ¿Es mucho pedir?
Nah, mentira. Amo a mi familia. Después de todo, son los únicos que pueden soportarme cuando llega el puto de Andrés.
-Bien - suspire resignada - Drew está aquí.
Un silencio se extendió por la sala y al fin pude sentir pa...
-¿Quién es Drew? - pregunto mi prima.
Todos se dieron un golpe contra la frente ante la falta de memoria de Phie.
-Todavía me pregunto cómo es que lograste pasar el año en esa escuela de honores con la memoria que te cargas - exclamo David dirigiéndole una mirada burlona.
Phie lo ignoro.
-¿Qué harás?
-Te estoy hablando - gruño David
-Supongo, que deberé de pasar desapercibida ante sus ojos.
-Phie - David le picaba el hombro a mi prima tratando de llamar su atención.
-¿QUÉ? - exploto Phie
Se encogió de hombros - solo quería decirte que es de mala educación dejar a alguien con la palabra en la boca.
-Yo quisiera dejarte con otra cosa en la boca.
-Lo siento querida, no estoy disponible.
-¡CABRON de...
Y ahí estuvimos escuchando su pelea durante media hora hasta que David por fin se rindió.
-Ya terminaron o necesitan más tiempo - les dije enarcando una ceja.
Me fulminaron con la mirada y luego voltearon a verse para fulminarse el uno al otro también.
Rodé los ojos.
Iban a terminar casándose y teniendo cinco hijos, a los que seguramente Phie les pondría nombres como Jacinta para poder cabrear a David.
-Podemos centrarnos en problema de Kaitlyn
-Muy bien, la cosa es pasar desapercibida.
-Eso es muy fácil - observo Phie - solo vuélvete una más del montón.
David largo una carcajada y me señalo con un dedo acusatorio -Tu no podrías durar ni un día sin ser el centro de atención.
Mire mal a David y con plena confianza respondí - puedo hacer eso y más.
-Entonces serás una nerd - voltee a ver a Sam que me sonreía burlonamente.
Trague saliva.
-Puedo hacerlo
-No podrías - siguió diciendo David
-¿Apostamos? - levante mi brazo y estire mi mano hacia él.
David negó con la cabeza soltando una risita y luego tomo mi mano sellando el trato.
-No saben cuánto me divertiré con esto.
Phie abrió los brazos y nos abrazó a Sam y a mí. Y con voz fuerte claramente emocionada grito.
-¡BIENVENIDOS AL PROYECTO NERD! Aguarden su asiento y tomen sus palomitas, que esto apenas está comenzando.
#Nota de autora
Espero les haya gustado el capítulo n.n
He tenido tan poco tiempo para ponerlo que espero me disculpen el cáncer de ojos que les pueda ocasionar.
Otra pregunta para ustedes mis bellas y hermosas lectoras
¿Cómo se imaginan a Kaitlyn? e.e
Por ultimo...
No olvide dejarme su voto si te gusto el capítulo, recuerda que es gratis y lo gratis no se niega *-*
Que se la pasen bonito.
~MissAnonimous.
PD: he decidido dedicarles los capítulos al primer comentario, es que a mi me encanta que comenten y saber su opinión.
ESTÁS LEYENDO
El Proyecto Nerd
Ficção Adolescente¿Qué pasa cuando la chica más popular se convierte en la más nerd por una estúpida apuesta? ¿Por qué no pasas y lo averiguas?