Brooklyn
Despierto en el sofá, escuchando de fondo la televisión encendida, prácticamente ya terminado el programa que estaban transmitiendo cuando la encendí, ya son las una de la madrugada. Ni siquiera me di cuenta cuando me quedé dormida, solo recuerdo que estaba con el periódico y un marcador en mano, buscando trabajo.
Hace un mes que me fui de la casa de mis padres en búsqueda de independizarme de una vez por todas, ahora vivo con mi mejor amiga Alexa que entre las dos pagamos el alquiler de este departamento, la comida, el agua, la luz entre más cosas por pagar. Las dos tenemos veintidós años, pero yo soy solo por dos meses más grande que ella.
Ella estudió diseño de moda, y yo administración de empresas, estos han sido nuestros sueños desde pequeñas y lo hemos cumplido, ahora ella consiguió un trabajo donde hace diseños para una empresa de modelaje reconocida, ella es muy buena haciendo diseños. Y bueno, yo... Yo no he conseguido un trabajo por el momento, solo tengo mis ahorros guardados.
De mi familia no sé nada de ellos hace un mes cuando me fui de su casa, ellos pensaron que yo no sería capaz de independizarme, pero aquí estoy orgullosa de mí misma, cumpliendo lo que le dije; cumpliendo uno de mis sueños.
Termino de levantarme del sofá, y quito la cobija con la que creo que Alexa me ha arropado, seguro que ya está en su habitación durmiendo. Tomo el control remoto de la mesa y apago la televisión. Camino hasta llegar al pasillo donde están nuestras habitaciones. Llego a la puerta de la habitación de Alexa y la toco dos veces esperando a que me deje pasar.
—¡Pasa! —Grita dentro de su habitación. Entro en cuanto lo dice.
—¿Qué haces? —Frunzo el ceño viendo toda la cama desorganizada, con sus lápices de colores y bocetos esparcidos por todas partes de la cama.
Avanzo hasta hacer un espacio en la cama mirándola y viendo el nuevo diseño que está haciendo.
—Terminando de hacer un diseño para mañana —Sigue coloreando y tomando sus colores, cada dos por tres segundos haciendo mucho más precioso su diseño.
—Okey, que tengas buenas noches —Me paro encaminándome hacia la puerta para salir para ir a la mía, que se encuentra enfrente de esta.
—¡Buenas noches también! —Exclama levantando su rostro dándome una sonrisa. Concluyo cerrando por completo su puerta y doy pocos pasos hasta llegar a la mía.
Recorro un poco mi habitación hasta llegar a mi baño, para lavarme los dientes, una vez termino de lavarme los dientes busco mi pijama para irme a la cama una vez por todas. Me tiro en mi cama a la vez me tapo con mi colcha blanca con purpura, y sin más caigo en brazos de morfeo.
***
Escucho ruidos afuera de mi habitación, abro un ojo y miro mi despertador son las siete cuarenta y cinco de la mañana, me paro de mi cama y me estiro un momento. Avanzo de mi habitación, cruzo por el pasillo hasta llegar a la sala para ver cómo, Alexa entra en su bolso su computadora, su carpeta de dibujos, sus lápices y más cosas.
—Hola —Me restriego los ojos bostezando.
Camino hacia el sofá y me siento.
—Hola, ¿Qué haces despierta a esta hora? —Se para un momento lo que estaba haciendo para verme a mí.
—Escuché ruidos y me han despertado. —Le explico brevemente.
Sigue con lo que estaba haciendo y veo como camina hacia la cocina; trae una manzana en la mano y con su café en mano.
—¿A qué hora llegas? —Cierro los ojos de momento, todavía tengo sueño.
—¿Eh...? no sé, cómo a las cuatro treinta de la tarde.