PRELUDIO

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Con el celular en mano corrio hacia la puerta de su cuarto sin pensarlo, en cuanto estuvo por salir la puerta se cerró de golpe escuchándose los susurros mucho más fuertes. Agarró la manilla desesperada tratando difícilmente de abrir esté y al no lograrlo golpeó la puerta con la respiración agitada colocando su frente sobre la puerta.

En eso se dió la vuelta al no escuchar nada, los susurros se habían detenido. Con sus manos temblorosas trato de encender el celular para llamar a alguien, más no pudo al darse cuenta que su celular ya no prendía.

-No no no no... No justo ahora.
Susurró.

Pasos lentos y precisos comenzaron a escucharse afuera, así como al mismo tiempo se escuchaba como si alguien estuviera arrastrando algo en el suelo. Giró en dirección a la puerta dando unos cuantos pasos hacia atrás. En cuanto las pisadas se detuvieron, la manilla de la puerta comenzó a bajar poco a poco haciendo que Leila abriera los ojos mucho más, retrocediendo con rapidez para luego detenerse al sentir la fría pared y así deslizándose hasta estar en el suelo.

El escaso sudor dejo caer por su rostro varias gotas de miedo. La puerta se terminó de abrir observando primero unos pies descalzos manchados con sangre haciendo que deje de respirar. Poco a poco comenzó a levantar la mirada viéndolo por completo. Trago saliva mientras que su cuerpo tembló y su respiración comenzó hacer demasiado pesada. Oh Dios.

Todo su cuerpo estaba manchado de sangre, su cabello negro desordenado parecía estar mojado de este mismo. Tenía una camiseta negra algo descosida con pantalones sueltos del mismo color y de igual manera rotas. Sus ojos negros con un pequeño brillo rojo y aquella sonrisa que tenía era escalofriante haciendo que su cuerpo tiemble mucho más al solo verlo. Sin embargo eso no era lo que más le causaba terror sino aquellas alas grandes y negras que se sostenían atrás de su espalda.

Avanzó unos pasos hacia ella mientras que Leila comenzaba a respirar difícilmente viendo como aquellas alas eran arrastradas y el suelo estaba siendo manchado de sangre por las gotas que caían. Los susurros comenzaron hacerse presenté de nuevo mucho más fuertes haciendo eco en la habitación logrando que Leila cerrara los ojos y se abrazara a si misma con fuerza. Ah los pocos segundos sintió como era jalada por los pies siendo arrastrada por el suelo para después caer inconsciente.

 Ah los pocos segundos sintió como era jalada por los pies siendo arrastrada por el suelo para después caer inconsciente

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Bienvenidos al mundo de "Abalám", espero sea de su agrado.

Primero que nada buenas días, buenas tardes o buenas noches.

Esta es la primera historia que escribo así que seguramente no me salga de maravilla, solo espero que puedan darle una oportunidad. Espero que disfruten.

Muchísimas gracias por su atención.

-CMilixG🥀

Abalám [Príncipe Del Infierno]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora