Capitulo 1 "Matones y una maldición"

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Entre los callejones de Konoha se podía ver a una ojiluna correr, se le veía desesperada mientras huía,  la pequeña de siete años corria mientras en sus brazos llevaba un pequeño gato herido, por mas que intentaba poder escapar de sus atacantes le era imposible, empezaba a lamentar el salir sin permiso de la mansión Hyuga, pero era algo que tenía que hacer, ella quería ir a ver a su hermana, quien en la pasada segunda prueba de los exámenes chunin salió herida, pero antes se topo con un pequeño gato herido, su pata estaba lastimada y le costaba respirar, pero al intentar ayudarlo alguien la ataco, eran siete adolescentes de entre unos trece a catorce años, al principio la iban a dejar ir hasta que se fijaron en sus ojos, en ese entonces fue cuando todo se volvió un desastre, ella peleo, pero ellos tenían la ventaja, aun así ella logro poner a dos de ellos en el suelo.

Mientras corria una fuerte patada en la espalda la logro tumbar, esta como pudo intento proteger al pequeño gato,mientras intentaba ponerse de pie, otra patada la mando a volar,

- Sabes niña, normalmente no somos tan malos pero al verte solo puedo verlo a el, a ese maldito Hyuga, por esa razón te haremos daño, si quieres culpar a alguien culpa a tu primo Neji, gracias a que el nos ataco perdimos el pergamino junto con la oportunidad de ser chunin, sabes lo mucho que entrenamos para ello, pero no solo eso, si no que se atrevió a hacernos pasar por esa humillación frente al Hokage, ahora lo siento pero alguien debe pagar,- hablo el tipo mas alto y fuerte, claramente el era el líder de esa pequeña pandilla, empuño lo que parecían ser unos nudillos de acero, para tirar un puñetazo contra la pequeña quien solo atinó a cubrir al pequeño gato. Antes de que el golpe conectara el atacante salio volando contra una pared, y una voz fría se escucho,

- Que tan patético debes ser para descargar tu frustración en una niña pequeña y un gato mal herido, pero creo que se los debo agradecer estaba buscando una escusa perfecta para pelear,- la castaña levanto la mirada para ver a su salvador, se topo con un chico de cabellos negros, vestido con ropas negras, en su espalda se mostraba con esplendor lo que ella pensó sería el símbolo de su clan, un abanico rojo con blanco.

~~~

Dos días habían pasado desde los incidentes en el bosque de la muerte, tres días desde que fue mordido por ese tal Orochimaru, tres días desde que por alguna razón se encontraba aun mas cabreado, en su cabeza escuchaba susurros, susurros que le rogaban que destruyera todo a su paso, pero tambien que en las noches sonaban igual a gritos, los gritos de su clan rogando por venganza, odiaba eso de la marca maldita, pero había algo que simplemente le gustaba, eso era la sensación de poder que le daba, era como si la oscuridad lo abrazara y lo protegiera cada vez que peleaba.

Un movimiento lo saco de su ensoñación, vio como era rodeado, eran cinco tipos que ya había visto en los exámenes chunin, reconoció a dos, como los idiotas que ese día tenían el patético genjutsu para evitar que otros entraran, junto a otros dos que no reconoció, pero no le importaba, ahora eran su presa, el tipo al que mando a volar hablo,

- Esto no te incumbe Uchiha, pero ahora que estás aquí no podemos dejarte ir a decirles a un adulto, estas jodido,- todos fueron a atacarlo, pero antes de que hicieran algo, el activo su sharingan, moviendo se mas rapido que ellos empezo la pelea, Sasuke debía admitir que eran fuertes pero no eran rivales para el, de movimientos rápidos logro dejar a tres de ellos en el suelo, al líder de la pequeña pandilla le tomo de la cabeza para después estrellarla contra una pared, tomando un kunai apuñalo la mano de este haciendo lo gritar de dolor, para después con todas sus fuerzas patear su cabeza contra el muro de ladrillo, este calló inerte tal cual un saco de arena, el golpe sordo que su cuerpo hizo cuando golpeo el suelo fue suficiente para asustar a los demas, dos de ellos corrieron y tomaron a su líder para después llevárselo, Sasuke no dijo nada estaba listo para seguir la pelea, algo dentro de el aclamaba sangré, algo le decía que los destruyera mientras podía pero una pequeña parte de cordura envuelta en una voz tierna lo detenía, haciendo lo recordar que el no era así, que el nunca fue así de cruel, también que a sus espaldas había alguien que lo necesitaba, así que los dejo correr mientras lo maldecian, el volteo para ver mejor a la niña quien lo veía con miedo al igual que con gratitud, el no dijo nada solo se acerco a ella para después ver al gato, era un gato pequeño no mas de unos meses de nacido, al parecer tenía una pata lastimada al igual que sus costillas, si tuviera que adivinar esos bastardos fueron quienes lo dejaron así, pobre animal, iba a vivir pero solo si lo ayudaban en ese instante, la pequeña lo veía con curiosidad y el hablo,

- Puedes caminar?,- pregunto tosco,

- Eso creo- ella respondió para intentar ponerse de pie, pero al intentarlo sus costillas se lo impidieron, ella aguanto un grito de dolor pero el se dio cuenta, sin mas la tomo entre sus brazos y empezo a caminar con ella cargada de princesa, la pequeña estaba roja de la vergüenza pero a él parecía no importa le, camino hasta el veterinario mas cercano, al entrar a la clínica una joven de cabellos castaños junto con marcas rojas en sus mejillas los atendió el hablo lo necesario ya que la molesta voz en su cabeza se hacia mas fuerte, también pidió si podían revisar a la niña de la cual aun no sabia el nombre hasta que ella hablo,

- Gracias, me llamo Hanabi, y perdón por haberte hecho pelear por mí,- dijo cabizbaja la oji perla,

- No lo hice por ti, ellos me debían algo y solo aproveche para hacerlos pagar,- sin decir mas el se alejo un poco mientras una de sus manos iba directo a su cabeza, la voz dentro se volvía aun mas molesta a la vez que dolorosa, el maldijo en voz baja para después caminar hasta una silla y sentarse.

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