Despierta a la realidad.

Palabras mudas

Bueno, pues comienza a hablar sobre ti.
¿Lo dices en serio?
¿ porque estaría bromeando?
No lo se, tal vez, ¿porque te gusta molestar?
Tu eres el que te lastimas solo, tu sombra no te deja en paz, a mi no me heches la culpa
Gracias no ayudas mucho, genial, otra exitosa pelea con mi conciencia

Era creo un sábado por la noche, Scott me invitó a una fiesta
**
-¿hola?-
-Wey, amigo, hoy fiesta, paso por ti a las 8, no me falles , cabrón-
-estaré listo para entonces-
-suenas peor que una chica-
-¿gracias?- gruñi - a proposito, ¿sabes si ira ella?-
-dale, lobo galan- colgó.

Me puse un traje negro, y abajo una camisa, me perfume ya las 8 en punto llegó Scott, llegamos a la calle de dicha fiesta y nos estacionamos, al entrar a la mansión más grande de la zona, un joven creo se llama Nathan, es de último año, nos ofreció un líquido azul, tuvimos que tomarlo, al entrar a la pista de baile, solo distingui colores fosforescentes junto con la oscuridad moviéndose, en el techo colgaba una gran esfera de baile, la música estaba a todo volumen, me dolió la cabeza, pero ignore el dolor, busque algo de tomar, y me senté en una banca en el último piso, donde  seguía oyendo el escándalo que traían abajo, me senté en la barandilla de el borde y comencé a imaginarme un mundo perfecto, de repente todo se torno negro y borroso, por la puerta vi entrar a la hermosa Ashley, iba con las manos en la cara y todo el maquillaje chorreado, ya no traía su collar de corazón, mucho dicen que ella es una persona rara, suicida, emo, que ha cambiado al ingresar a preparatoria, de ser la chica linda amable, dulce, que solía ser en la secundaria, su madre murió en un choque  automovilístico, desde entonces algo en ella cambió, según rumores de la escuela, pero yo siempre recordaré la chica que en realidad es, la verdadera Ashley Winstone, la chica actualmente popular, que un día fue ni mejor amiga, la chica con la que crecí, tratando de eliminar mis sentimientos hacia ella...
Se subió a la barda y ser iba a aventar, estaba claro que no la iba a detener, solo quería saber porque lo hacía.
-Wow la famosa Ashley Winstone frágil y peligrosa, que honor-
-¿ehhhh?- Dijo tratando de que si voz sonara normal.- ah, solo eres tu, sangster-
-solo yo, el chico que cambiaste por una bola de...- me interrumpió
-idiotas- dijo.
-iba a decir simios, pero tu deducción es mejor- dije guiñándole un ojo
-el grandioso Dylan y sus pláticas motivacionáles- dijo acercándose a la orilla
-¿que crees que haces?-
-¿conoces algo llamado suicidio?-
-si-
-pues eso- contestó  tranquilamente
-ok-
-¿ehhhh?  Se supone que aquí me detienes-
-no lo haré- dije con un aire frío.-porque somos nosotros los que elegimos nuestro destino, ya no estoy con mis padres desde hace un buen tiempo, desde entonces he tenido que madurar, veo las cosas con más claridad, soy más estúpido, ¿comprendes?-
Se quedó estupefacta.
-El día que te dije que ya no te quería cerca fue un 6 de noviembre, ese día te fuiste temprano, ese día...-
-ese día murieron mis padres.-
Se sentó y comenzó a llorar aún más, me acerque a ella, me sente junto a ella, ella puso su cabeza en mi pecho y me abrazó al igual que yo a ella.
-lo lamento tanto, ignore todo lo que tenía, me valió lo que podía perder, solo pense en mi, fui tan egoísta, pensé en ti hasta que me dije a mi misma que ya había dejado cosas atrás, lo lamento tanto, fui tan....-la interrumpi.
-tranquila esta bien, no hay mejor maestro que nuestro último error, somos humanos y cometemos errores, rompernos promesas, nos lastimamos más de lo que los demás nos lastiman, cierra los ojos y cuando los abras, todo mejorara, lo que te hace diferente te hace especial, aveces te hace peligroso, pero todos son importantes, al final buscamos un gran quizá en este mundo frágil, al final....-
Nuestros labios se fundieron en un tierno beso, no se quien lo comenzó pero si duro unos minutos,  luego comenzó a llover, los dos nos quedamos sentados en una pared junto a la puerta, creó que sería el comienzo de un nuevo destino....