Feliz cumpleaños: 4 estaciones.

Verano.

"Que calor..." Te quejaste sentada en el sofá de Law, intentando quitarte la alta temperatura de encima con un abanico, pero no había remedio. Te pareció ver a Bepo -que estaba tirado en el suelo- asentir, pero seguramente sería una alucinación causada por el calor. Tu indumentaria ayudaba: una camisa de tirantes finos (color) y unos vaqueros cortos, pero no era suficiente.

"Sabes, (tu nombre)... siempre puedes quitarte la camisa" Escuchaste a Law decir desde la puerta de su habitación. Giraste la cabeza para verle y abriste los ojos sorprendida. Law estaba apoyado en la puerta, únicamente vestido con un bañador negro que le llegaba a los muslos. Su cara estaba empapada en sudor, así como su pecho, y tenía esa atractiva mueca de siempre. Casi pensabas que habías empezado a babear. De todos modos, si sufrías un derrame nasal siempre podrías culpar a la alta temperatura. Entonces pensaste de verdad en su oferta y tu cara se coloreó más de lo que ya estaba.

"No, la verdad es que prefiero asarme" Law se rió y se sentó a tu lado en el sofá.

"Menuda muerte, y además el día de tu cumpleaños. ¿Seguro que no quieres salir a algún sitio a celebrarlo?" Negaste con la cabeza, una sonrisa en tu rostro.

"No, estoy acostumbrada a no celebrar mucho mis cumpleaños. En mi casa normalmente comíamos tarta helada, que acababa siendo un sorbete, y luego los regalos" Te encogiste de hombros y, justo entonces, sonó el teléfono de Law. Él bajó la mirada a sus pantalones cortos y sacó el móvil del bolsillo.

"Law, ya estás convenciendo a (tu nombre) de que se ponga un bañador y venir a la piscina. Ni se te ocurra revelarle que es por su cumpleaños. Es una sorpresa" Escuchaste a Law suspirar mientras cerraba el móvil.

"Me las va a pagar..." Murmuró este algo molesto y le miraste preocupada. Pusiste una mano en su hombro y te miró.

"Law, ¿va todo bien?" Law sonrió por tu inocente y preocupada expresión. Levantó una mano a tu cabeza y acarició tu pelo suavemente.

"Por supuesto, gatita. Oye, sé que no quieres ir a ningún lado, pero el calor es insoportable... ¿Qué te parece si vamos a la piscina?" Tus ojos se volvieron estrellas casi inmediatamente. Era verdad que era una oferta tentadora, una que no podías negar.

"Bueno, vale. Voy a ponerme el bañador" Entraste en su habitación, de modo que no viste cuando Law suspiró de alivio. Esperó pacientemente a que saleses de su habtación para poder entrar y preparar las cosas.

Saliste del coche corriendo, y comenzaste a pegar saltos, incitando a Law a que se diese más prisa. Parecía que no tenías calor para moverte tanto, y Law se rió. Entrasteis por la puerta de la piscina y mirasteis a vuestros alrededores, intentando localizar un buen sitio para asentaros. Law vio que los otros estaban en una buena zona, a la sombra de una gran sombrilla y saludándoos abiertamente. Sonrió y te cogió de la cintura para llevarte allí. Cuando por fin localizaste a los otros te quedaste boquiabierta.

"¡Feliz cumpleaños, (tu nombre)!" Te abrazaron todos a la vez y sonreiste.

"Vale. Chicos, hace calor, que corra el aire por favor" Dijiste intentando respirar. Se separaron y pudiste colocar tu toalla sobre el suelo cubierto con hierba artificial. Law colocó su toalla al lado de la tuya y se sentó. Notó, sin embargo, la presencia de alguien sobre él y abrió un ojo perezoso para encontrarse con un par de ojos (color), en los cuales había un brillo de travesura.

"(Tu nombre), ¿qué quieres?" Preguntó este con una sonrisa. Le cogiste del brazo y le levantaste de la toalla, aunque lo que tardaste en soltarle se desplomó de nuevo. Inflaste los mofletes y te alejaste. Justo cuando Law pensaba que no ibas a volver, cerró los ojos e intentó quedarse dormido, aunque el calor se lo impedía. Entonces sintió algo extremadamente frío en el pecho y abrió los ojos de golpe. Lo primero que vio fue tu figura, con una sonrisa diabólica en el rostro, sujetando un cubo ahora vacío.