𝐭𝐥𝐚𝐰𝐥 ⎯⎯ 𝛐𝐯𝐚𝐬

𝐚𝐫𝐧𝐢 𝐚𝐧𝐝 𝐞𝐫𝐰𝐢𝐧

𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐦𝐞𝐣𝛐𝐫 𝐞𝐱𝐩𝐞𝐫𝐢𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚, 𝐬𝐞 𝐫𝐞𝐜𝛐𝐦𝐢𝐞𝐧𝐝𝐚 𝐞𝐬𝐜𝐮𝐜𝐡𝐚𝐫 𝐥𝐚 𝐜𝐚𝐧𝐜𝐢ó𝐧; 𝐦𝐫 𝐥𝛐𝐯𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧, 𝐫𝐢𝐜𝐤𝐲 𝐦𝛐𝐧𝐭𝐠𝛐𝐦𝐞𝐫𝐲.

D𝐞𝐝𝐢𝐜𝐚𝐝𝛐 𝐚 Lory506 , 𝐠𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚𝐬 𝐩𝛐𝐫 𝐥𝐚 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚<3

𝛐𝐯𝐚 𝐮𝐧𝛐

—𝐞𝐥 𝐞𝐧𝐜𝐚𝐧𝐭𝛐 𝐝𝐞 𝐭𝐮𝐬 𝛐𝐣𝛐𝐬—

Cerré mi ojo para intentar conciliar el sueño nuevamente, sentía el frio en la punta respingada de mi nariz mientras un viento recio chocaba el cristal de la ventana, indicando que este día; será un día normal de invierno.

A veces desearía ser adolescente de nuevo para dormir hasta la hora que se me dé la gana.

Giré mi cuerpo hacia el otro lado se la cama, encontrándome con una espalda tonificada y desnuda frente a mí, la conocía tan bien que no necesitaba tocarla para sabérmela de memoria.

Me acerque lo suficientemente como para recostar mi rostro en su nuca que transmitía el calor que tanto necesitaba mi rostro congelado, su cuerpo siempre le daba calor al mío.

Y me quede ahí, no sé cuándo tiempo la verdad, solo me perdí en mis pensamientos mientras organizaba el día laboral que me esperaba en unas horas. Sin embargo, reaccione de aquel trance en el momento en que su cuerpo comenzó a moverse lentamente para terminar girando; quedando nuestros rostros enfrentados.

No reaccione, solo me quede allí observando aquellos zafiros azules que se hacían llamar ojos, eran hermosos desde el primer día que los vi. Fue hace tanto tiempo que me sorprendía a mí mismo recordar ese momento con tantos detalles que podría dibujar aquella secuencia.

— ¡Preséntese maldito bueno para nada!

— ¡Arni Pixis señor! ¡Del distrito Trost!

— ¿Pixis? — el hombre se acercó tanto a mí que por defensa me aleje un paso a atrás. — Ya te conozco basura, espero seas igual de eficiente que el ebrio de tu padre ¡vete con los nuevos!

Tomó mis hombros y expulsó mi cuerpo hasta un grupo de personas, si no fuera por el alcohol en mi sangre probablemente me hubiera sostenido de pie, pero este no era el caso.

Mi cara fue directo a la tierra frente a los pies de una persona, mi uniforme al igual que mi rostro se llenaron de polvo.

— No era menos esperarse del hijo mayor de Pixis.

Ignoré aquel comentario y me recompuse en el suelo quedando sentado en el mismo, sentí una mano frente a mi rostro y al levantar la cabeza lo vi.

Unos orbes azulados tan brillantes «los más brillantes que había visto alguna vez» como un cielo despejado que emitían curiosidad, bondad y delicadeza. Un gran contraste con el resto de su rostro que sostenía unas fracciones más espesas y marcadas. Con un cabello rubio que estaba ridículamente peinado.

Este tipo parecía un abuelo atrapado en un cuerpo adolescente.

Luego de algunos segundos embobado con el chico, me digne en tomar su mano no sin darme cuenta que él también había examinado mi rostro por un largo tiempo.

— El comandante Shadis suele ser muy exigente. — habló girando su rostro a mí, limpié mis ropas. — soy Erwin Smith y creo que seremos compañeros de escuadrón.