Coma (Terminada)

Capítulo 5

Itachi después de despertar sentía todo extraño, se sentía excluido de la vida de sus amigos y Familiares.

El podía ver los celos de su hermano cuando la pelirosa era atenta con el, sabía el dilema en el que se encontraba el menor, sabía que Sakura se sentía culpable por haber perdido la esperanza.

Sus amigos habían seguido su vida, Kisame se había casado años atrás, Pain y Konan estaban a la espera de su segundo bebé, sus padres se habían divorciado, todo fue un shock para el, Sakura decidió ser modelo, dejo crecer su cabello y lo cambio de color ¿Dónde estaba la joven que el conoció?

Soltó un suspiro, llevaba un mes ahí internado mientras le hacían estudios para detectar algún problema que tuviera debido al accidente o el coma, poco a poco recuperaba la movilidad de sus manos, aunque sentía un poco de la cintura para abajo, sus pies no podían sostenerlo aún.

Pero algo faltaba, el sentía que faltaba alguien a quien no había visto, no sabía quién era pero sentía el anexo de verlo.

—Itachi — llamo la rosada que cortaba una manzana —¿Estás bien?— pregunto

El Uchiha la miro para sonreírle — Si solo estoy pensando

Sakura dejo la fruta picada en la mesita aun lado de la cama —¿En que piensas?— pregunto

Itachi dejó caer su cabeza en la almohada, miro el techo —Siento que falta alguien, pero no logro recordar quién es.— respondió con sinceridad

Sakura lo medito un momento —Puede ser que tú subconciente si escuchará — murmuró para si, apenas audible para Itachi

—¿Que quieres decir?— cuestiono asustando a la joven que salió de sus pensamientos

—Bueno, cuando estabas en coma, venía un joven a leerte un poco— dijo jugando con su cabello —Posiblemente entrañas que te lean— termino decir

Ino quien iba entrando escucho la conversación —Dudo que sea el— dijo con desprecio —Muchas veces lo escuché hablar de su día, es una mentira que venía a leerle a Uchiha san— dijo para dejar una charola de alimento

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Deidara jugaba con su comida, mientras leía una revista de chismes.

—Dei, enserio creí que sería bueno que dejaras de ver a Itachi— dijo en un suspiro captando la atención del mayor —Pero no puedes seguir así, no has tocado tu comida, estás más delgado, ¿!Siquiera comes¡?— regaño Naruto a su hermano

—Estoy bien, Naru, no necesitas preocuparte por mi— sonrió Deidara

Naruto tomo la revista —Has estado comprando estás revistas solo para saber algo de el, ni siquiera has terminado tus esculturas — grito molesto rompiendo la revista —Por favor Del, estoy preocupado, no quiero perderte tambien— susurró lo último

Deidara solto un suspiro levantándose de la silla para caminar hasta Naruto, lo envolvió en sus brazos —Lo siento— murmuró —No quería preocuparte, lo extraño sabes— rio un poco, solo un idiota como el se enamora de un hombre que no conoce.

—Debes ir a verlo, para saber cómo está, pero te tienes que alejar Dei, no es sano— murmuró Naruto — No puedes seguir así.

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Deidara se encontraba fuera de la habitación de Itachi, según la enfermera había Sido cambiado de cuarto, estaba nervioso, una cosa era hablar con el estando inconsciente.

Estaba tomando valor para entrar cuando la enfermera de cabellos castaños se acercó —Uzumaki San — saludo la chica —¿Cómo se encuentra su hermano?— pregunto

—Bien, ya está mejor— sonrió nervioso jugando con el libro en sus manos

La mujer lo vio y sonrió —Viene a leerle a Uchiha san— volvió a preguntar haciendo sonrojar al rubio

—Ahora está dormido, no sé si quieras esperar a que despierte— dijo la enfermera

Deidara se sintió un poco más tranquilo —¿Cómo ha estado?— pregunto, la enfermera miro a ambos lados antes de dar una respuesta —No debería decirle esto, pero el ha mejorado mucho, posiblemente salga en unos días o eso escuché decir al doctor — rio la mujer — Deberías entrar antes de que te vea Ino, ya sabes que no le agradas.

La enfermera marchó, dejando solo en la puerta a Deidara quien un poco más tranquilo entro a la habitación.

Itachi se veía diferente, el color había llegado a su rostro, aunque aún seguía siendo pálido, su cabello estaba peinado en una colega, su pecho subía y bajaba.

—Hola— saludo bajito, sin obtener respuesta, soltó un suspiro —¿Me alegro que estes mejor?— dijo —La enfermera dice que pronto vas a ir a casa, que bueno que decidí venir hoy, o ya no te abría visto— sollozo un poco

Itachi quien había despertado minutos antes escuchaba atento la voz de esa persona, escucharlo sollozar le hizo sentir algo en su pecho, quería consolarlo.

—Naruto manda saludos— rio Deidara —Me dijo que tenía que dejarte ir, no puedo seguir asi— suspiro —Y tiene razón, nosotros no nos conocemos, tu siquiera  me conoces, así que este es el adiós definitivo.

—Asi que ahora me vas a dejar— dijo Itachi haciendo saltar al rubio, los colores se fueron de su rostro para regar con la misma intensidad

—Tu, tu, tu— Deidara no podía hilar palabras, estás se atoraron en su garganta, la mirada de Itachi lo hizo temblar de exitacion por primera vez esos ojos que siempre estuvieron cerrados lo miraban a el

Itachi observó a la persona frente a el, era lindo no lo podía negar, su cabello rubio recogido en una coleta, esos hermosos ojos azules que le recordaban el cielo.