CAPITULO 3. MI NOVIO MIGUEL DE SERVANTES.

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NICOL.
Quien era este entrometido, es que acaso no sabía que si alguien está de malas y hablándose consigo misma (no es porque tengo esquizofrenia) quiere decir que no quiere ser molestada.
- Se supone que te conozco?? - le dije intentando parecer molesta y con un tono un poco frío.
- No lo creo - dijo él sin la más mínima expresión de haberse arrepentido de entrometerse - no suelo hablar mucho con personas poco conocidas.
Cómo se atrevía a decirme asi, pero quién se creía este, ¿acaso un personaje famoso de televisión o algo así?, el ego lo tenía como si fuera un actor cinematográfico. Pero esto no se iba a quedar así, cuando yo me enojo me enojo y si me molestan cuando hablo conmigo me pongo peor, ahora yo le demostraría que no cualquier persona se ríe de mí.
- Que bien, porque yo no lidio con personas a las que parece su ego fue lo único que resivierón en su creación.
- Que agradable, que bueno, así no llorare cuando tu y yo no nos volvamos a cruzar jamás, ay ya estaba soltando algunas lagrimas, deja me limpio- hizo un gesto de secarse los ojos y sorberse la nariz, debo decir que se veía interesante así . . . pero se a metido conmigo y mi bilis así que esto era una declaración de guerra — okey ya me limpie, ahora solo déjame decirte algo, si tu "Miguelito" no aparece aquí búscalo en la sección de clásicos.
Se había dado cuenta de que lo que yo estaba buscando, y de que lo estaba buscando en la sección equivocada!!!.
- Buscar, a quien supones tu qué busco???
- Un quijote no es así??
- Te equivocas, yo . . . Yo estoy esperando a mi novio!. - no es mi mejor excusa pero es lo único que se me ocurrió.
- No me digas, y como se llama??
- Pues si te digo, se llama . . . Miguel de Cervantes, si, el es mi novio. - jajajaja, tragame tierra por favor.
- Mmm, interesante, yo estoy esperando a Dulcinea
- Pues que bien -quien se supone que es ella, ¿la conozco?, no importa, si es su amiga o su novia o su hermana, debe de ser alguien muy engreída y egoísta que no quiero conocer- pero ve a esperarla por ahí, no crees y deja de fastidiar a las personas que no te han molestado!!!
Sonrío y me miro directamente, sentí que caería a el piso en cualquier momento, se veía muy,, muy, como lo digo, su rostro era digno de enmarcar o de admirar, dios, debo dejar de mirarlo. Desvíe mi mirada a un lado, (las particulas de la pared son interesantes). -Creo que no será la última vez que nos topemos . . . hasta luego polilla.

-Ey, tonto!!! -se lo grite, pero ya estaba lejos, valla este chico caminaba muy rápido, sus piernas eran largas así que daba unos pasos muy largos.

Bien, después de este encuentro con un tipo que el ego lo tiene del tamaño de un continente; me fui a los clásicos. No sé porque se tuvo que haber metido en un asunto que no era de su incumbencia, ¡¡ah, pero que metiche entrometido!!, todavía me rondan su palabras de:
- no creo que sea la última vez que nos topemos, polilla. . . . ¡¡¡Polilla, me ha llamado polilla!!!, Lo malo es que no entiendo porque :'|. . . Que chico más raro, en fin espero no volver a ver su rostro nunca más, es un odioso que se cree mucho. En fin, me fui a buscar el libro rápidamente, ya había perdido bastante tiempo con ese tipo. Llegue hasta donde estaba el libro, lo tome y me di cuenta de que mi castigo es más grande de lo que imagine, lo guarde en la mochila y me salí de la biblioteca.

Me fui hasta el comedor, tome una charola de comida y fui al lugar en donde habíamos quedado de vernos, ahí estaban las dos hablando, me acerque a ellas y me sente.

- Y lo encontraste? - dijo Ann levantando la mirada.

- Si, y de que hablaban?

- Ann que me hace preguntas que me dejan pensado, crisis existenciales.

- A ver dime una - le dije a Ann, y en ese momento me arrepentí de haberlo echo, porque puso una cara que me decía algo así como: vas a morir, le brillaron los ojos y su mirada se veía muy escalofriante.

- ¿Cuál es la otra mitad del medio oriente?

- . . . . . . . . . espera, reiniciando windows - no me esperaba algo así - ya antes había visto preguntas como esas, realmente lo hacia por diversión o cuando estaba muy aburrida - espera, el medio oriente tiene otra mitad?, Bueno tendría que tenerlo porque es el medio oriente, pero cual es la mitad?.

- Jajaja, me encanta ver a las personas sufriendo, perdón, olvidalo mejor, lo trajiste?

- Eso sonó como si se tratará de drogas o algo así, pero si, si lo traje, me vas a ayudar?

- No, yo solo pregunte, te doy apoyo moral pero que mejor que Jess te ayude, yo podía pero tengo mucha tarea por hacer y tapitas que juntar.

- No te preocupes yo puedo ayudarte, vienes a mi casa cuando puedas e intentamos avanzar.

- Bien, esp . . . - no pude terminar por alguien llego desde atrás y me interrumpió, era una voz masculina, una voz que extrañamente me parecía conocida.

- Jeca, hermanita!!!, necesito hablarte - se paro aun lado de donde Jess estaba sentada y se recargo, miro a Ann y luego a mi, sus ojos le brillaron de malicia y ¿diversión? - Pero miren nada mas, Jeca conoce a la polilla, aunque no me sorprendería saber que son amigas, ya les conto de su fantástico hermano mayor que . . .

- Menciono que tenia un fastidioso hermano mayor que por desgracia era su mellizo, un hermano engreído y egoísta que solo la molestaba, si eso menciono - le respondió Ann de manera desafiante - Hay! disculpa mi descortesía, me llamo Anabeth. - Terminó diciendo a modo de burla.

Se limito a seguirle el juego - Hola Anabeth que tiene muchas ansias de hablar y no poder callars . . .

- Cállate!- grito Jess quien parecía extremadamente molesta él la miro con superioridad, pero ella no se intimidó ante su mirada y solo solo siguió hablando — Cállate la puta boca y lárgate, ¿que es lo que quieres?

Él iba a contestarle cuando dos más aparecieron, uno era aquella persona por quién había estado embobada hace mucho, Ethan, también iba un chico que se veía muy animado y que parecía ser esa clase de persona que suele estar alegrando a todos, pero no lo conocía, se acercaron y nos miraron.

- Que haces Alex, te estamos esperando.

Así que se llamaba Alex, bien al menos ya sabía dos cosas sobre él.

- Ya voy, estoy aquí conociendo a las amigas de mi hermanita - dijo en un tono burlón.

- A si?- Ethan volvió a mirarnos y su vista se fijo en Ann, ¿se conocerán?- Espera un momento, pero si es la chica del basurero- camino hasta donde estaba ella- Conseguiste comida o aún quieres sacar algo del basurero?.

Ella abrió sus ojos y se notaba que quería romperle la cara.

DE TU MANO [EN PROCESO Y EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora