Momentos One shots - Pablizza

Un Día en San Valentín

Odiaba ser arrastrado por su amigo, le había llevado a un lugar de citas por San Valentín, le había explicado el concepto: debía sentarse y tenía cinco minutos para conocer alguien que se sentara al frente, al cabo de ese tiempo se levanta la persona que se sentó en su mesa y pasa a la siguiente mesa conociendo a su nueva cita salió de sus pensamientos cuando escucho al animador de ese lugar.

"Bienvenidos a la noche de San Valentín, dónde encontraran a su otra mitad ya saben las reglas tienen una lista de preguntas para hacer, al lado tienen un papel donde anotaran el nombre de la persona que les ha cautivado esta noche y si ambos se han elegido tendrán el premio de un crucero del amor por dos días y una noche suerte a todos."

Gaeul: Hola.- Le saludo su primera candidata era alta y cabello negro muy linda.

Pablo: Hola, Gaeul.- Le respondió viendo el nombre en su pecho.

Gaeul: Estoy nerviosa esto del tiempo va muy rápido pero es grandioso conocer lindos chicos.

Pablo: ¿No, es la primera vez que vienes? .- Preguntó al ver como miraba al chico de atrás que se llamaba Yi Jeon.

Gaeul: Bueno, eso no viene en la lista de preguntas.- Dijo algo contrariada.- Pero, No... no es la primera vez que vengo.

Pablo: Para mí, es la primera vez.

Gaeul: Es fácil, pregúntame algo.

Pablo: Ehh, bien ¿Si tuvieras el día libre mañana, qué harías?.- Aquello seguro que era una buena pregunta.

Gaeul: Me iría a pasear por el parque con mi perro, me relaja mucho y nunca protesta por pasar todo su tiempo conmigo ¿Y tú?.- Dijo, aquello había un trasfondo de queja hacia la persona que le había dejado recientemente.

Pablo: Probablemente salir con mi moto por alguna carretera solitaria.

Gaeul: Ah, eres de esos que le gustan las cosas extremas, a mi ex le gustaba las motos, les prefería más que a mí.

Definitivamente ella no iría en una de sus opciones para él, el silencio fue algo tenso pero sonó el timbre y Gaeul se fue a otra mesa.

Esta vez se sentó una mujer que parecía de su edad, muy bella se sentó al frente de Pablo.

Paula: Hola, Pablo, ¿Cuál es tu palabra favorita?.- Le preguntó.

Pablo: Eh... Familia, creo.- Dijo al cabo de un rato, la verdad es que no tenía idea de que contestar.

Paula: La mía es sexo, mucho sexo.- Le dijo con una sonrisa divertida, no es que Pablo fuera a rechazar una propuesta como esa pero se estaba empezando a sentir incómodo con aquella mirada delante de todo el mundo.

De nuevo el timbre sonó y se sintió del todo liberado, le quedaba al menos cinco citas más, aquella noche iba a ser dura, solo ya quería ir a casa y olvidar el día de San Valentín.

Todos giraron para seguir la ronda, Pablo estaba pensando si no podría atragantarse con su bebida y así poder salir rápido de ahí de ese ángulo, no veía a Manuel pero podría despistarlo en el baño

Marizza: ¡Rayos!.- Escuchó delante de él y cuando descubrió quién era no pudo evitar copiar la expresión de la que tenía al frente.

Pablo: ¿Marizza? Que haces aquí..- Hacia tiempo que no la veía, sabía que trabajaba en las empresas Colucci, pero verle ahora le sorprendió.

Marizza: ¡Me imagino que igual que tú!.- Miraba para todos lados.- ¿Esto debe ser una broma de Mía?

Pablo: Si fuera una broma, créeme no sería dirigida a tu persona.