── Dónde Shoto Todoroki es tu novio
y mantenéis una relación a
distancia por su trabajo
── Los quirks no existen en este universo
── One shot
── Los personajes le pertenecen a Horikoshi
── Se aceptan adaptaciones (dar créditos)
──...
── Los personajes (excepto la protagonista) pertenecen al universo de BNHA y a su creador Horikoshi.
── En este universo no existen los quirks ni los héroes
── Todoroki trabaja en la empresa de su padre
── Se recomienda leer con el fondo negro para una mejor experiencia
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-beep, beep, beep.-
Era el despertador. Con los ojos cerrados, comencé a buscarte entre las sábanas, para pedirte que lo apagaras, pues el sonido era molesto y quería que lo pararas. Al no encontrarte en la cama me enfadé y te llamé.
-Amor... ¿Puedes apagarlo? -
No recibí ninguna respuesta por tu parte.
-¿Shoto...? -
Finalmente abrí los ojos y vi que no estabas en la cama. Lo había olvidado por completo. Tú ya no vivías conmigo. Quise llorar de nuevo, pero te prometí que no lo haría, porque estaba feliz de que hubieras encontrado un trabajo que te gustara.
Tomé el teléfono, apagué la alarma y desactivé el modo avión para ver si me había llegado algún mensaje tuyo. En efecto. Me llegó tu mensaje de buenos días, como de costumbre.
Me levanté de la cama para vestirme, pese a no tener ganas de ello. El mundo no podía detenerse porque no te tuviera a mi lado. No te habías muerto demonios, ni habíamos terminado. Solo estabas lejos.
Pero, sinceramente, no quería que continuara. Quería quedarme en mi cama todo el día con el teléfono para distraerme. No quería ver ni hablar con nadie. Solo quería estar sola... bueno, en realidad no. Solo quería estar contigo. Pero era un poco imposible.
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-Ya estoy en casa...- Dije abriendo la puerta.- Aunque a nadie le importe...-
No era porque la gente que viviera conmigo no me amara, sino porque sencillamente, no había nadie. Era difícil acostumbrarme a no tenerte por el piso, que me dieras la bienvenida con un cucharón en la mano, cocinando cualquier cosa que al final tendría que terminar yo, pues nunca supiste cocinar.
