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-Deja de mirarme así- le digo ya irritada a Blake. Me ignora completamente y se limita a seguir observandome- ¡Dios! Por favor, me estás poniendo los pelos de punta ¡¿puedes hablar de una vez?!

El suspira como si le pidiera algo difícil, negando con la cabeza - Lo siento Meyer, es que .... no te entiendo, Dios - Se levanta de la silla frente a mi con preocupación pintada en sus facciones. Una de sus manos revolotea por su cabello rubio con puntas rojas en gesto de pura frustración para luego llevar ambas manos en sus caderas. Todavía observándome - Se supone que eres la inteligente de nosotros, no entiendo como puedes pensar en algo tan estúpido y peor aun, creer por un segundo que es....aceptable.

-Si bueno, pues así es como están las cosas. Ahora, al menos- Le respondo refunfuñando. El siempre espera mucho de mi y hace rato debió dejar de hacerlo. Aparto mi mirada de la suya- La gente cambia Blake, vive con ello.

-Lo se, pero en tu caso mas que un cambio esperaba una evolución - Niega con la cabeza otra vez. Si sigue así se va a convertir en un cabezón para el tablero de autos. El camina hacia mi, rodeando el escritorio y pone sus manos en los reposa brazos de mi silla para hacerme subir la mirada otra vez- Cariño, por favor dime la verdad. Tus padres te lo pidieron ¿cierto? ¿Es por eso que no te vas a negar?

Quisiera decirle que tiene razón pero no puedo, el no lo entenderá. Su vida y la mía son muy diferentes y siempre lo serán.

Me levanto de la silla apartando su cuerpo y tomando distancia- Mira, ahora no necesito esto, ya tome una decisión y ten la certeza de que se en que me estoy metiendo. Se que me beneficia y que no, ya analicé la ecuación Blake, solo te lo estoy contando para que no te tome por sorpresa así que por favor, deja de juzgarme.

-Meyer, yo n- trata de hablar pero lo corto.

-No lo trates de negar- escucho como el volumen de mi voz aumenta así que me detengo antes de hacer y decir algo de lo que me arrepentiré después. El no tiene la culpa de todo lo que está sucediendo.  Tomo una profunda respiración para dejar salir el aire antes de seguir- No soy una niña Blake. No necesito que aceptes mis decisiones sino que las respetes.

El se mantiene en silencio unos segundos, se que esta molesto, pero no puedo cambiar ahora, necesito mantenerme firme con esto- Dios Meyer, ¿Cómo puedes planear abandonar tu vida así? Dársela a un completo extraño... Eres mas que eso, eres mejor que eso, piensa bien las cosas por el amor de Dios, no seas irresponsable contigo misma.

-Pff, primero para abandonar algo debería tenerlo para empezar y segundo una persona que se casa no pierde su vida, simplemente cambia. - Le contesto con rabia irradiando mi tono, ya había llegado a mi limite y el no lo veía. Una cosa es tratar de aconsejarme y otra muy distinta tratarme de irresponsable y tonta, cuando es precisamente eso es lo contrario de lo que estoy haciendo, de lo que estoy huyendo. El pudo haberme visto pasar por muchas cosas pero no las vivió, no las sintió y yo sí. De nuevo el no lo entiende porque no tiene que vivirlo- ¿es que no lo ves? ¡YO NO TENGO UNA VIDA BLAKE! yo solo....me limito a hacer todo lo que me piden cuando me lo piden. Trabajo en la revista, regreso a casa, veo alguna serie o película para al día siguiente regresar a hacer lo mismo hasta que llegue el fin de semana para ir a casa de mis padres a dar reportes, y si tengo suerte tal vez salir contigo o Viv a tomar una copa y olvidar por una vez mi rutina y el estrés de mi día a día. Lo que yo hago no es vivir, es sobrevivir. Y cuando por primera vez tomo una decisión por mi misma, que me satisface y que me hace sentir segura, como siempre me lo pides, vienes y me juzgas, dices que no me entiendes, me tratas como si fuera una tonta y al contrario, termino siendo yo soy la que no te entiende.

-Existen personas que viven peor y no saltan a los lobos como tu estas haciendo- me responde entre dientes- pero tienes razón Meyer, no te entiendo y es muy probable que no lo vaya a hacer. Ya tomaste una decisión y al parecer lo que te diga será echado a saco roto, solo espero que tu primera decisión no sea la peor de todas.... si me necesitas ya sabes donde estaré.

Liberando nuestras almasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora