Marginal

4 0 0
                                    

MARGINAL

En periferias, zonas y condiciones marginales, he vivido infinidad de veces a lo largo de mi vida. Y es verdad que se tiene un aprendizaje distinto en las mismas, que el pragmatismo de los marginados goza de un intensidad que aquellos al otro lado de la marginalidad pueden apenas concebir.

Quizá es por eso, que aunque logres salir del barrio, de la cuartería, o de vivir junto a, o en, "el punto"; hay cierto aire de marginalidad, una cierta tensión en los hombros al levantarte y al caminar, un hábito de mirar levemente hacia atrás y por encimita del hombro en cada esquina, una cierta predisposición a respaldar lo que dices con las acciones físicas necesarias (que si bien pueden llegar a los puños, rodillas, codos, o lo que haga falta; también pueden empezar por esa simple mirada que dice "no es sólo que no tenga nada que perder, es que a menudo me lo han quitado todo y me caga y ya no estoy dispuesto").

Ahora; hay muchos casos cómo el mío en los que más allá de tu salida y reingreso a estos lugares, otras cosas te marginan. En mi caso particular, mi adicción a las drogas me marginó totalmente aún (y quizá particularmente) en los momentos en los que estuve viviendo en los lugares quizá más dignos que a lo largo de la vida me he podido proveer.. antes y durante esa periodo, ya me apartaba de los demás este hábito que tuve siempre de externar mis sentimientos y mis emociones (especialmente cómo varón y ante la doble moral de la sociedad machista, pero de matriarcados en la que crecí.. a la fecha, me alarma y me ofende la cantidad de señas con las manos de ¡cállate! Que llego a recibir cuando comparto por ejemplo que fui abusado de niño) y yo que me enamoré del uso del lenguaje desde niño y que entre otras cosas que suelo hacer con él, está la costumbre de desnudar mi alma y ponerla en el balcón de la experiencia compartida que creo que es la vida de cada persona, al final llamada a ser uno con todos y cada uno de los seres humanos que tocan muestran vidas, nuestro viaje cósmico.. costumbre que me convirtió casi siempre en el hermano y el amigo incomodo.

Y hoy que he vuelto.. casi de lleno a la marginalidad, no sólo porque por vivienda sólo me haya podido proveer un cuartito bastante modesto (después de 8 meses de vivir en la oficina en la que trabajo), no sólo porque mi pregunta de esta mañana y de casi todos los días recientemente para mí, sea ¿Cuáles van a ser mis protocolos a seguir para lograr una o ya rayado dos comidas en el día?, no sólo porque la mayoría de mi ropa y calzado y esté dando sus últimas batallas y no vea en el panorama un tiempo ni adecuado ni prudente (ni posible) para suplirlos, no sólo porque no me guste mi actual condición de vida y mientras lucho por cambiarla añore otras condiciones que en su momento tuve la fortuna de conocer. No es solamente por ninguna o todas las anteriores, es también porque desde hace tiempo he sido igual de transparente a cuanto a los males que aquejan mi salud mental, en cuanto a mis trastornos psicológicos.. los tabúes al respecto están tan presentes.. frases tan infames como "estás loco" o "hay que echarle ganas" no se hacen esperar, es enorme la ignorancia y por ende el miedo a estos temas; quiero abstenerme de juzgar pero la voz de la experiencia me grita a menudo que de entre las personas que suelen decirme frases como esas, es altísimo el porcentaje de los que necesitan tanta ayuda como yo, quizá más, y honestamente; siento compasión por ellos... son cómo las empresas hoteleras en Cancún que creen que arrojando la mierda a las profundidades de la laguna o el mar, entonces la mierda nunca va a salir a flote...que pena me dan, si supieran que no sólo está el hecho de que en el mar de nuestras emociones la mierda que arrastramos siempre sale a flote sino que también apesta mucho antes de hacerlo, ay de aquel que se crea libre de contaminación en su andar por la vida y en su vanagloria de querer repartir su mensaje de "echaleganismo" entre sus hermanos.


Y no estoy diciendo con esto que no se valgan los mensajes positivos o invalidando los mismos, estoy diciendo más bien lo que solía decir Jeshua ben Joseph (conocido entre los que creen y los que solíamos creer, cómo Jesucristo) "¿Cómo dices a tu hermano quita la paja de tu ojo antes de quitar la viga del tuyo? ¡Hipócrita!".


Después de todo, "poetas de la esperanza" somos todos, todos aquellos que hemos tenido en algún momento el valor de compartir lo que sentimos sabiendo que el sentimiento muy probablemente se replique aquí o allá (porque nadie es una isla) hemos buscado en nuestras catarsis tocar el corazón de otros que cómo nosotros han vivido o viven en la penumbra y cuando tú psique es tocada por alguien más (así sea meramente por su testimonio) entonces, mis hermanos, entonces hay luz (por tenue que sea) pero hay luz.


Firma con cariño;Franco, el marginal.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 08, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

MarginalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora