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❛ la única razón por la que Sanzu odiaba verse todos los días al espejo y en cualquier reflejo, eran ver aquellos cortes sobre la comisura de sus labios. Una gran inseguridad en él, pero lo no sabe es que otra persona los...
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🦋 cicatrices ◍ santake fanfic 🦋
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En un Universo paralelo...
Las salpicaduras de sangre cayeron encima del traje elegante que llevaba la segunda mano derecha de Bonten; tomando su Katana para guardarla después de deshacerse otra de sus víctimas bajo las órdenes de Mikey.
Aquellos tipos los odiaba con toda su alma, traicionar a su rey jamás se los perdonaría al contrario, eso sólo era el comienzo del fin de la diversión para él; en eso que estaba guardando con cuidado su arma favorita escuchó varios gritos desgarradores, sonriendo para mover sus piernas en el lugar donde provenían los ruidos.
─¡p-piedad! ¡Por favor! ¡L-le prometo que le entregaré lo que es necesario! ¡Pero por favor...!─ sollozaba aquél bastardo que era el jefe de esa banda que tuvo varios contratos con la Organización criminal más buscada y peligrosa de meterse, estuviese engañándolo a sus espaldas vendiendo sus armas, drogas, estafas, lavado de dinero, prostitución, hoteles, etcétera.
Vio como una segunda figura oscura apareció en la habitación para sacar el arma y apuntar su nuca, disparándole en el proceso para dejar caer las balas gastadas, el humo a tabaco saliendo de sus labios y una sonrisa de satisfacción.
─¿De qué tanto te ríes, idiota? Ensuciaste mi traje favorito ahora por tu culpa debo de darme una ducha.─ lo miró de mala gana. Takemichi se guardó una risita pero no fue imposible ya que el pelirosado soltó una carcajada─. Bromeo cielo, ¿te divertiste con el pez gordo?
Sus manos pasaron por sus caderas, acariciando suavemente mientras pegaba sus labios en el rostro de su esposo para abrazarlo, el azabache no retrocedió y se quedó pegadizo en su cuerpo. Besándose con dulzura hasta ser interrumpidos al escuchar la voz de su líder acercarse a ellos con las manos empapadas de sangre al igual que su rostro.
─les dije que no quería que se pusieran tan románticos cuando les ordene un trabajo.─ arrugó sus facciones degustado por la escena, aún si fueran sus amigos y compañeros no le agradaba del todo la escena como se ponían empalagosos después del gran caos que hicieron.
─ay, relájese, mi rey. De todas formas ya terminamos por lo que ya podremos retirarnos, ¿no es así?─ Mikey soltó un suspiro.
─ya qué.─ respondió sin ánimos─. Sólo porque alguien los está esperando en casa. Muevan sus culos antes de yo patearlos.
Sanzu soltó una carcajada y obedeció otra de sus órdenes tomando la mano de su precioso hombre yendo al salón principal para poder quitarse la suciedad encima de la sangre. Tardaron una hora y media en limpiar también el lugar para evitarse problemas, al hacerlo fueron a la salida de emergencias sin ser vistos por en ángulo de las cámaras.
