LXIII "Odio"

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Vale POV

--¿Esas son nubes de tormenta?-- interrogó Joaquín, observando el cielo a lo lejos.

--Ya me parecía que era raro el calor.

--Supongo que es cuestión de tiempo hasta que-.-- Una repentina luz se hizo presente en las nubes.-- pase eso.-- terminó Lidia.

--No quiero irme...-- mencionó Carlota con tristeza.

--Debemos lavar el carro.-- contestó la morena.

--Vaaale.-- terminó la rubia con desanimo.

Minutos después, todos acomodamos las cosas en el coche y viajamos al auto lavado.

--Nos vamos a una feria de aca cerca, ¿quieren ir con nosotras chicas?-- preguntó Lucía, luego de mostrarnos a mi y a Joaquín la ubicación de el lugar.

--Lo siento Lucy, ambas estamos cansadas y nos iremos directo a la cama, si quereis que os lleve al lugar, no hay problema.-- contestó Lidia.

--No pasa nada, vamos en taxi, nos vemos mañana en la empresa.-- sonrió Lucía, despidiéndose de ambas.

Llegamos al lugar, no estaba tan concurrido por la hora y el día, pero podiamos estar un buen rato paseando por los puestos y también comiendo de todo, al igual que como en La Rambla.

Comenzamos a caminar, observando todo tipo de manualidades.

--¿Nos compramos pulseritas de la amistad?-- consultó Joaquín emocionado.

--¿Es posta?

--Si tarada, ¿por qué no? esta buenísima mi idea.

--Dejala Jo, es una cría amargada. Vamos a comprar esas cosas.-- le hablé al chico.

--¿Ves?, mi cuñada es diez veces mejor que vos.

--Si si, vayan y compren sus boludeces, yo voy a buscar algo de comer para los tres.

--Vale, ve y comportate como un adulto aburrido, mientras nosotros ¡a por los brazaletes!

Ambos corrimos como unos niños, dos segundos después, Joaquín pareció percatarse de algo y volvió detrás de Lucía.

--¿Me prestas dos Euros?

La rubia le observó entrecerrando sus ojos y le tendió las monedas negando suavemente.

--Quiero esas.-- habló él.

--¿Las rojas con negro?

--Sep, esas están buenísimas.

--Vale.

Cuando ambos tuvimos nuestros brazaletes colocados, Lucía regresó con unas hamburguesas y comenzamos a comer mientras le mostrábamos nuestras muñecas.

--Mifha dhje lhfo qhfe thfe phferdifhte.-- habló Joaquín alzando su muñeca. (Mira de lo que te perdiste)

--Tragá antes de hablar pavote.

--Refhentida.
(Resentida)

Reí por su tierna pelea.

--¿Te acordas cuando mi viejo nos llevó a esquiar?

--Si... un pez saltó y me metió una cachetada en la cara cuando estaba en la tabla, me caí y tragué agua, fue traumático.-- contestó Joaquín, haciendonos reír.

--Estabas tan asustado que no tocaste el agua en todo lo que quedó de las vacaciones.

--Fue el peor verano de mi vida.

--Y el mejor de la mía.

--¿Como eraís de críos?-- pregunté tomando unas papas.

--Lucía era un renacuajo.

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