𝐎𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬 - 𝐌𝐮𝐥𝐭𝐢𝐟𝐚𝐧𝐝𝐨𝐦

I do not know what else to do • Klaus Mikaelson

—Nota: Esto pertenece al universo de diario de vampiros y contiene muy probables spoilers para aquellos que recién vean la serie.

—Este capítulo contiene MUCHO drama y escenas de celos que pueden considerarse insanas, no busco normalizar esto, así que si no te gusta este contenido puedes saltártelo.

—Este capítulo contiene más de 4500 palabras por lo que es algo largo, si eres de las personas que no les gusta leer cosas tan largas puedes saltar al próximo shot 💗

𑁍

Ser una humana y estar rodeada de vampiros es bastante difícil y peligroso, aunque tengo la facilidad de ser una de las protegidas de los hermanos Salvatore. Nada romántico, en realidad me hice amiga de Damon luego de arrojarle un vaso de tequila por la cabeza, creo que le agradó que fuese igual de impulsiva que él.

Pero hablando de romance, si tengo mi vista fija en alguien; Klaus Mikaelson.

Rubio, alto, con actitud burlona, un ego impresionante y complejo de superioridad. Resumiendo cuentas un narcisista en potencia. Siendo sincera me da miedo lo mucho que me atrae, es fuego puro con un destello destructivo y una energía tan caótica como la mía.

Pero sus labios y esos ojos me llaman, me muero por que me bese, aunque a la vez lo odio un poco ¿Saben? Muy guapo y todo pero intentó matar a mis amigos, aunque no sé si debería tomármelo del todo personal, Klaus quiere matar a todo mundo.

En fin, resumiendo cuentas, me encuentro en un estúpido baile de los tantos que hace el consejo de Mystic Falls.

Un vestido rojo me pareció para nada sutil y es por eso que lo uso, detesto que todos finjan que todo es tranquilo, como si no tuviésemos en el baile a toda la familia de originales vigilándonos. Me acerqué a Tyler para preguntarle algo pero pude escuchar algo que me hizo...enfurecer y doler a partes iguales, él discutía con Hayley.

—¿Te acostaste con Klaus? ¡En qué demonios...!

Si, huí antes de seguir escuchando algo que no quería escuchar. Por suerte, no descubrieron que yo descubrí su pequeño gran secreto. Joder, sentí un peso en el estómago y una rabia horrible, quería patear a todo mundo, quien se me atravesara se llevaría una copa de vino entre las cejas.

Damon se me acercó y pareció adivinar mi irritable estado de humor con solo mirar mi cara.

—Ah, estuve a nada de hacer comentarios burlones pero no quiero poner a prueba tu habilidad para lanzar bebidas alcohólicas.

—Me da gusto que te reserves, Damon.

Me tomó por el brazo, arrastrándome a la pista de baile y yo solté una risa, a pesar de ser un idiota tenía talento para alegrarme la vida aveces.

—Así que ¿Ahora bailamos, Damon?

—Por favor, como si no hubiésemos hecho algo más grave.

Fruncí el ceño siguiéndole el paso en la lista, un mesero pasó y el pelinegro sutilmente lo empujó ocasionando un estruendoso ruido mientras susurraba rápido en mi odio.

—Sígueme la corriente, Lana.

Lo miré a los ojos y sonreí ¿A donde quería ir con esto?

—Que directo Salvatore.

—Se me da bien hablar de lo que me gusta.

Me mordí el labio intentando aguantar la risa, jamás habíamos coqueteado en un plan que parezca realmente serio.

—¿Y qué tal se te da hacer lo que te gusta?

—Si nos vamos ahora, lo sabrás.

Se acercó lentamente a mi, dejando un beso en mi mejilla, no mentiré, no le negaría un beso a Damon sabiendo que no afectaría en nada nuestra amistad, pero mi corazón está muy centrado en el idiota de Klaus, aunque, recordando lo que escuché sobre él y Hayley, no sería impedimento mi...atracción por él, podría distraerme un poco de sus estúpidos labios y preciosos ojos con alguien tan atractivo como es Damon, o eso quiero creer.