Se quedaron a unos centímetros de distancia, sus expresiones eran aparentemente neutrales, Fabian miraba a los labios de Daila y luego regresaba la vista a sus ojos. Aunque ella sabía controlarse, ambos se estaban dejando llevar emocionalmente, y sus pensamientos iban aumentando gradualmente como se iban acercando, Daila pensó que ya iba a besar a Fabian, pero el sonido de la detección de movimiento de las cámaras, se escuchó, en una de las pantallas que Daila manejaba.
Rápidamente se separaron y Daila volteó a ver la pantalla, era la cámara de la oficina. Vió una silueta que le resultaba conocida de alguna parte, eran las 2 a.m, la persona estaba ojeando entre los papeles de su majestad, cuando se aclaró la silueta por la luz de la luna, pudo ver que era el mayordomo, Adier.
"Será normal que el mayordomo esté a estas horas buscando papeles? —pensó ella—. Obviamente no me dejaré llevar, con la primera impresión, hay que investigar bien. Será que el rey le pidió que fuera?"
Fabian que también vió la escena y pensó algo parecido a lo que ella, se quedó callado, sin saber que decir para no sugestionar mal.
—J-jefa, que hacemos? —hablaba con un poco de nervios por lo de hace rato.
—Sigamos viendo.Ambos se quedaron observando un tiempo más y vieron que Adier volteó una sola vez hacia al frente del escritorio y salió de allí.
"Mmh" —pensaron ambos.
Después de que se fue de allí, esperaron otros 20 minutos y ya no apareció nada, de todos modos si hubiera algo, las cámaras les avisarían. Daila se volteó hacia Fab y le tocó el hombro.
—Es mejor que te vayas —le dijo sonriendo con los ojos cerrados.
Fabian abrió demás los ojos.
—A-ah si, jefa, claro —dijo él—. Buenas noches —salió de allí.
Daila se reincorporó y luego de ese momento, se fue a dormir.
Noche 3.
Daila estaba en las caballerizas, eran las 8 a.m, estaba junto al caballo blanco preferido del rey, lo acariciaba un poco por debajo del cuello, mientras lo veía, en eso, un hombre delgado, con traje azul, entró, era Connor Byrne.
—Vaya, es temprano, este día es acogedor, no? —dijo el jefe de la guardia real.
Daila volteó a verlo sin mover los pies, pensando que estaba de acuerdo con lo que decía, le recordaba al campamento.
—Veo que ya conociste al caballo favorito de su majestad —dijo Connor.
—Eso parece.
—Sabes porque es su favorito?Daila lo miró extrañada.
—Porque será para su futura esposa —continuó el jefe—. Te quedarás a la boda? —se acercó a ella.
—Quién es ella?
—Oh, aún no se sabe —rio un poco y cerró los ojos—. Aún están buscando, pero cuando eso pase, quiero una acompañante —le acarició al lado del mentón.Daila tomó su mano, con su mano izquierda.
—Y que ofreces?
—Cómo? —La miró seductoramente
—Si, digo, de todos los hombres que hay en Croamía, para que iría contigo?"Qué?" pensó Connor, sacándose de onda.
—Hay muchos que abusan de su puesto, Sir Connor.
—Puedo enseñarte a conducir un caballo —empezó a abrazarla por detrás, estirando sus brazos por encima de los suyos.Daila se separó del abrazo y volteó viéndolo de frente.
—Eso ya lo sé. Soy una mujer que sabe muchas cosas por su cuenta, sabes? Para que un hombre me impresione, debe tener algo que me agrade y eso Connor, es algo en lo que tendrás que esforzarte.
Daila empezó a irse de allí, mientras Connor estaba de espaldas.
—Sabes, para ser una visitante extranjera eres obsti.. —se volteó pero Daila ya no estaba.
Daila había desaparecido secretamente como solía hacer y ahora se encontraba en los pasillos que daban hacia el jardín, tenían columnas blancas y decoradas, se veían ligeramente desgastadas por el paso de los años. Estaba más allá de la mitad del pasillo y sólo tenía que doblar la esquina a la derecha, ya que había una entrada para el castillo, cuando el rey salió por esa entrada, iba con algo de prisa y estuvieron a punto de chocar. El rey apenas se había dado cuenta de esto, cuando se detuvieron de golpe
—Hey! —volteó y miró a Daila—. Daila! Que placer verte —se reincorporó y dijo alegre.
—Su majestad! También lo digo.
—Cómo estás? Se que tal vez haya sido difícil acoplarse al castillo.
—De hecho tengo algo que decirle, su majestad, digo, Kalian.
—Yo también, de hecho —dijo el rey—, te gustaría ir al bai..
—Perfecto! VamosDaila no escucho esto último y tomo de la mano izquierda al rey, llevándoselo hacia dentro, pero después de dar unos pasos se dió cuenta de esto.
—Ah! Lo siento rey Kalian, Kalian, digo.. —cerró ambas manos, preocupándose y las puso a la altura de su boca.
—Jajaja, no te preocupes Daila —rio aliviado y le gustó eso que hizo.Luego entraron a su oficina.
Fabian que estaba buscándola se asomó rápidamente y al verla, se sorprendió y entró a la oficina.—Puedo entrar?
—Si —dijo el rey, amablemente—. Ojalá mi mayordomo fuera tan fiel como tu asistente.
—Gra-gracias rey Kalian —dijo Daila y recordó un poco lo de anoche—. Creo que ya se quien es el culpable —dijo ella con algo de seriedad.El rey la miró queriendo saber la respuesta.
—Podría llamar a sus empleados principales? —dijo Daila.
El rey mandó a un sirviente a traer al mayordomo y al jefe de la guardia real.
—Enserio Daila? —le dijo Fabian discretamente—. Cóm.. —iba a preguntar.
Daila que estaba a su izquierda, lo agarró del hombro derecho.
—Verás, mi asistente, cuando tu dormías, yo me desperté a las 4:00 a.m a espiar —se adelantó unos pasos hasta quedar cerca del rey que estaba atrás de su escritorio—. Es el mayordomo. Kalian.. —sacó de su delgado abrigo beige, la pantalla enseñándole donde estaba la foto de Adier de anoche en su oficina.
El rey se quedó viendo la pantalla con un poco de asombro.
Daila se tomó ambas manos, por detrás y empezó a caminar alrededor de la habitación.
—No podía dormir, tenía que encontrar pistas, supe que era el mayordomo, cuando aparte de ver la grabación que le enseñe de anoche, vi las otras cámaras y supe que usted se había ido a dormir a las 9 p.m su majestad, no vi que mandara por algo en ningún momento al mayordomo, además me infiltré en el castillo anoche investigando en todos los cuartos disponibles y pude ver en la biblioteca un libro inusual de color fiusha, que no iba oficialmente en los estantes, como si alguien lo hubiera escondido ahí, no tenía firma y descubrí que era un anuario. Había fotos de usted de niño, acompañado de otros dos niños, con la inscripción abajo de sus nombres "Harriet, Kalian, Connor".
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Ninespía y asistente [Especial navideño]
Adventure¿Qué pasó después de los acontecimientos de ninespía y asistente? Descubre quien es el culpable en esta misión especial de navidad que tendrá que resolver Daila con ayuda de su asistente. Historia e ilustración totalmente de mi propiedad, se prohíbe...