ℍ𝕖𝕣𝕖𝕕𝕖𝕣𝕒 𝕕𝕖𝕝 𝕀𝕟𝕗𝕚𝕖𝕣𝕟𝕠 (𝕫𝕒𝕥𝕫𝕩𝕥𝕦)

Capitulo 16

Dos meses pasaron rapidamente desde que Perséfone y Ares llegaron a Teca.

La diosa habia dado a luz ya, una pequeña niña albina habia nacido de ella.

—Pueden quedarse un mes más si es que lo desean— Dijo la reina Teca mientras que Perséfone tenia a la niña en sus brazos.

—Solo un mes, mi reina— Dijo Perséfone sin dejar de ver a su hija.

La reina Teca pasaba horas en el dormitorio de Perséfone, pero ahora habia salido de ahí muy rapido, dejando solos a Perséfone y Ares.

—Zatz estaria maravillado, Persé— Dijo Ares mientras veia a la niña.

—Lo sé— Contesto la castaña.

—¿Elegiste un nombre para ella?

—Ya lo hize— Empezo a decir la diosa— Ella es Aruma.

—¿Crees que tu padre la acepte?

—No lo sé...

*Un Mes Despues*

—Hija mia— Empezo a decir Mictlán cuando Perséfone entro junto a Ares, quien llevaba a la bebé en brazos.

—Padre, tanto tiempo sin verte— Contesto Perséfone mientras se quitaba la capucha.

Zatz no estaba por ningun lado, algo que preocupo a Perséfone.

Pero al ver al General Camazotz, la diosa se tranquilizo un poco.

—¿Cuál fue la causa de tu ausencia en mi corte?

Después de un suspiro Perséfone habló.

—Hace tres meses decidi darme un tiempo de la corte, para descansar un poco y... para dar a luz.

Murmuros se escucharon en la sala.

—¡SILENCIO!— Grito Mictlán— Termina de hablar, hija mia.

Perséfone tomo a la bebé en brazos y se acerco a su padre.

—Ella es Aruma... tu nieta.

—No debo preguntarte quien es el padre— Dijo Mictlán al notar la albina cabellera de la niña— Estoy decepcionado de ti Perséfone.

—Lo sé, padre— Dijo la diosa bajando la mirada.

—No la sacrificaré, no te hare ese mal— Dijo Mictlán tomando a la bebé— Pero si tratas de hacer alguna estupidez, Perséfone...— Mictlán pasó un dedo por debajo de la carita de la bebé.

—Esta bien, padre.

Todos salieron de ahi, incluso Micté y Mictlán, solo quedaron en la sala Ares, Perséfone y Camazotz.

—¿Puedo verla?— Pregunto Camazotz.

—No puedo decirle que no, General— Peséfone le dio la bebé a Camazotz.

El dios de los murcielagos, sonrio al cargar a su nieta, la niña rapidamente se acurruco en el.

Al ver esto Perséfone notó que una lagrima calló por su mejilla pero la limpio rapidamente.

—¿Donde esta él?— Pregunto Perséfone cuando el padre de Zatz le regreso a la bebé.

—No lo se, no lo he visto desde hace tres ó cuatro semanas.

Camazotz salio de ahí.

—Lleva a la bebé con mi madre, Ares— Dijo la castaña lentamente— Ocupo estar sola.

Ares salio de ahí y Perséfone se quedo ahí sola por dos ó tres horas.

Perséfone estaba por salir de ahí cuando alguien puso una mano en su boca y la arrastro hasta una habitación.

En el momento en el que la silueta la solto y se encendieron las velas, Perséfone empezo a sentir un enorme terror al ver esos ojos azules que no habia visto desde hace meses.

—¿Me extrañaste, Querida?— Dijo la silueta al salir de las sombras.

—Hades...