Darkness~ OC x Tokyo Revengers.

3. 𝑴𝒖𝒓𝒅𝒆𝒓

𝑻𝒖 𝒏𝒐 𝒎𝒆𝒕𝒆𝒔 𝒄𝒂𝒃𝒓𝒂

０１／１１／２００５, Japón

Estuve toda la noche yendo a todos los lugares a los que iba con Baji, su casco azul se encontraba en la parte trasera de mi moto. La brisa de la playa era perfecta por lo que terminé durmiendo ahí.

en la mañana fuí a mi casa para comenzar mi plan contra Kisaki

--tsk, donde fue que la dejé-- hablé para mi misma mientras buscaba mi arma en uno de mis cajones --Bingo-- la tomé y me la escondí detrás del pantalón.

Díspara

apreté mis ojos fuertemente al ver a mi reflejo hablarme.

Me dirigí hacía la salida para ir con una amiga

--¿A donde crees que vas maldita perra?-- Suguru obstruyó mi camino de la puerta.

Mátalo Mátalo

--Pues, a la calle-- dije tratando de rodearlo.

Dísparale

--No saldrás hoy-- me tomó del cabello jalandome en dirección al salón

--Suéltame cabrón-- hice pataletas y me traté de soltar sin éxito alguno.

--Oh, así que andamos desobedientes el día de hoy-- me golpeó en el abdomen --a ver si así obedeces, tu amiguito tomó una muy mala decisión--

A Baji le gustaría esto

tosí ante el golpe, pero tomé el impulso y me levanté para golpearlo de vuelta.

--Sabía que harías esto algún día-- me dijo mientras se tapaba la nariz por la sangre que sobresalía de esta pero eso no lo detuvo, se abalanzó en mí y comenzó a ahorcarme.

MÁTALO

Sin dudar saqué el arma y le apunté en la cabeza.

--No lo harías, eres muy cobarde-- Levantó las manos alejándose de mi

Vamos, hazlo

--¿No lo crees? ¡Ja! después de todo el daño que me causaste y que por tu culpa mi madre me abandonó ¿crees que a pesar de todo el infierno que pasé junto a ti no sería capaz de jalar el gatillo?-- Lo miré desafiante.

MÁTALO MÁTALO

Él me observaba fijamente

--Aunque me mates, ambos sabemos que tú y yo somos parecidos-- me sonrió

MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO

--Lo que menos quiero en la vida es ser un cabrón mal agradecido como tú--

MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO MÁTALO

Sin pensarlo le disparé.

apenas lo hice las voces cesaron y hubo un silencio mental.

Antes de retirarme fui a mi habitación en busca de mi celular privado, dinero y una fotografía mía junto a todos los muchachos.