|121

1K 106 93
                                    

JIMIN

—Es un placer conocerte finalmente, hijo.

El silencio me produce un escalofrío en el cuerpo, mi sangre siendo hielo atravesando dolorosamente mis venas y arterias. Intento hablar, pero mi voz está algo corta, no pudiendo procesar la voz masculina detrás del teléfono.

—¿Q-qué...? —Murmuro en un quejido apenas audible.

—Park Jimin. —La voz ronca sigue resonando roncamente del otro lado. —Hablas con Min Suga.

Si mi sangre era hielo, en estos precisos momentos no sabría ni cómo definirlo. Mi cuerpo comienza a temblar, la voz retumbando en mi cabeza. ¿M-Min Suga? ¿Q-qué? ¿Por qué mierda se dirigía a mí cómo su hijo? ¿Qué sucedía?

—Esto debe ser repentino para ti, Park. Me ha costado mucho localizarte, no tienes una idea, aunque ha sido una fortuna que tenga contactos allá en Florida. ¿No crees?

Paso saliva grueso y empiezo a preguntarme seriamente en si colgar o no. Esto podría ser cualquier farsa o una persona haciéndose pasar por el terrible asesino y mafioso.

—No te voy a entretener más. —Me dice del otro lado. —Me gustaría hablar contigo personalmente, Park Jimin. En un lugar donde nadie sepa que estaremos y sobre todo, que siquiera Yoongi sepa. Prometo no hacer nada muy grave, mocoso... si sigues exactamente todas mis órdenes.

—¿C-cómo podría confiar en alguien como usted? Me han querido asesinar poco más de cuarenta veces por su jodida culpa. —Susurro temblando de miedo, aterrorizado de pies a cabeza. —Nunca traicionaría a Yoongi.

—Intenta marcarme si cambias de opinión antes de la noche... estúpido mocoso.

—¿Estúpido mo ...-? —Cuelga.

No había pasado mucho antes de que entrara al chat de Yoongi para avisarle. Intento rápidamente enviarle un mensaje, pero en su lugar hay un archivo ligeramente borroso y unos audios que me dejan en silencio y con una ceja arqueada. Lentamente descargo todos los archivos, sintiendo algo malo aproximarse.

No...

Mis ojos se mantienen fijos en completo silencio en la pantalla de mi celular. Me tenso de pies a cabeza, el silencio siendo crudo y solamente sintiendo mi corazón arder y despedazarse en mil y asquerosos pedazos. Las lágrimas escurren sin control, una tras otra, donde siquiera puedo finalizar de ver el archivo antes de gritar fuerte.

Estrello el celular contra el suelo, gritando tan fuerte como puedo y hundiendo mi rostro profundo en mis manos. Mi llanto desgarrador siendo acompañado de un abrumador ardor en mi pecho, en mi corazón donde puedo sentir puñaladas, esas palpitaciones dolorosas que me hacen llorar, quebrar a llorar de una forma que no había hecho jamás. Golpeo las paredes duramente, estrellando mis puños con fuerza y lanzándome a por el cuchillo que empiezo a enterrar en la colcha, quince veces, treinta veces, sesenta veces, ochenta veces...

Cuando mi brazo arde y la cama está destrozada, con mi respiración siendo dolorosa y mis lágrimas demasiado constante, me detengo. Casi doscientas puñaladas a la nada, antes de dejar caer el cuchillo y volver a abrazarme fuerte a mis rodillas, escuchando mi llanto que deja de ser de rabia y se transforma rápidamente de dolor.

Veo el celular a lo lejos, mi mente nublándose antes de agarrarlo fuerte y desbloquearlo saliendo del chat de Yoongi que elimino con rabia, viendo las lágrimas que caen en pantalla. Mis ojos siguen fijos en la última llamada entrante.

Ojo por ojo, diente por diente.

No iba a mostrarme débil. Nunca más iba a mostrarme de esa manera... se había acabado. Por fin se había acabado. Suelto un largo suspiro tembloroso y empiezo a marcar lentamente al número otra vez, secando mis lágrimas con cierta brusquedad dejando la zona irritada pero definitivamente esto no iba a quedarse así más. De ninguna forma esto iba a quedarse así y ahora estaba más que seguro de ello. Me había asesinado, había destrozado cualquier rastro noble de mi alma. Me había quebrado de pies a cabeza y en ningún momento... en ningún momento lo hizo de forma accidental.

INNOCENT~ YOONMIN || 《3 ʟɪʙʀᴏ》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora