Cap#6-El demonio murciélago y la Diosa ángel

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Perdón por la demora, pero tenia bloqueo de escritor y no sabia como seguirla. espero que lo que viene puedan entender un poco mas, y si me disculpan voy a actualizar "los dioses leyendo" 

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() Pensamientos

-Acciones

¡¡!! Personaje gritando

ah~Gemidos

// Ubicación o lugar

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[Con Hefesto] Con un personaje

Hola-susurro

^ Hace unas horas ^ 

Muere-Voz fría

D I S F R U T E N

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Hefesto volaba a máxima velocidad por el cielo con sus nuevos poderes, él no sabe porque...pero siente que Atenea lo necesita y de alguna manera su cuerpo reacciona solo, ya que ni él sabe a dónde se dirige solo sigue una pequeña corazonada

Hefesto: (Espero que estés bien)-pensó preocupado, Atenea era alguien importante para el y nunca podría perdonarse si algo le pasaba

Aunque algo que si lo estaba fastidiando un poco era que en su cabeza llegaban algunas imágenes que sin duda le daba un dolor de cabeza horrible, obviamente las imágenes no eran claras, pero por lo que podía distinguir era una mujer de cabello blanco, fuera de eso nada más. Estaba intrigado, pero también un poco nervioso ya que no conocía estas personas que aparecían de repente

«Recuerda quien eres»

Paro en seco al escuchar esa voz, era un breve susurro pero se sentía tan cerca, casi como si estuviera al lado suya. No sabe porque, pero sintió un poco de nostalgia al escuchar esa voz

«Recuerda...mi amor»

Era la voz de una mujer eso era obvio...¿pero de quién? No sabía que estaba pasando ya que su cabeza le estaba doliendo y era insoportable

«Recuérdame...mi murciélago demonio»

Esa oración...¿porque? se sujetó la cabeza con ambas manos mientras gritaba de dolor múltiples imágenes pasaron a su cabeza

Hefesto: ¡YA BASTAAAAAA!-sin darse cuenta una especie de luz rosada se dirigía a el

La pequeña luz era tan pequeña que Hefesto no se dio cuenta, cuando la luz le dio en el cuello fue que pudo reaccionar pero un poco tarde, lo último que vio Hefesto fue como una pequeña luz estaba en su cuello para después caer dormido

La pequeña luz era tan pequeña que Hefesto no se dio cuenta, cuando la luz le dio en el cuello fue que pudo reaccionar pero un poco tarde, lo último que vio Hefesto fue como una pequeña luz estaba en su cuello para después caer dormido

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/Algo asi/

Antes de que el hombre callera inconsciente dijo unas palabras

Hefesto: A-te-ne-a

Hefesto El Forjador de Felicidad y OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora