No estas sola - Old Magcon

capítulo 4

Narra Aroa

Dios mio... no puedo creer que Lana esté huérfana y encima en coma. Me siento como una mierda, ver a mi amiga asi es como darme una buena patada en el culo, lo peor es que me siento mal por no decirle lo mucho que la quiero y que estoy aquí y siempre voy a estar. Tengo... bueno, tenemos miedo a que Lana no despierte. Tanto yo cómo las demás estamos destrozadas por esta noticia, la sala está llena de familiares y nosotras llevamos aquí todo el tiempo sin saber si las podemos ver y yo ya me estoy empezando a desesperar. Lo único que me queda es recordar buenos momentos con ell ella. Pero mi cabeza va a explotar en cualquier momento y sólo puedo imaginar a Lana en el accidente.

¿En que piensas? - me preguntó Marta, dios estaba tan horrible como yo, ojos lagrimosos, nariz roja y unas enormes ojeras. El accidente fue ayer domingo, hoy es lunes y ni yo ni las demás fuimos a clases, realmente no podemos dejarla a

ahora sola. Sabemos lo de sus padres y hermanos porque murieron al momento y lo dijo el doctor, ella fue la única  que salió viva... aunque esté en coma, presiento que ella va a sobrevivir o eso me dice una parte y es con la que me quiero quedar porque en la otra... ya saben que es lo que pienso supongo.

- Pues en Lana, en todo. - dije con media sonrisa pero más bien me salió una mueca.

-¿Tu crees que despierte? -pregunto en un hilo de voz Marta con los ojos llorosos mirandome con tristeza.

-Pues claro que va a despertar Marta, ella tiene que estar bien si o si ¿es que tu no crees que vaya a despertar?. - contesté molesta. Me creció un nudo en la garganta y mis ojos empezaban a picar. Joder, iba a llorar otra vez, tengo que aguantar.

-Claro que sí Aroa, pero tengo miedo a perd...- La interrumpí.

-No la vamos a perder ¿y sabes porque?.- No le di tiempo a que contestará.- Porque Lana es una niña fuerte, que puede con esto más y a partir de ahora vamos a estar más unidas que nunca, porque nunca se sabe lo que tiene hasta que lo pierde  o casi se pierde. Y no quiero que pienses ni hables más así ¿entendido? - le dije firme y demasiado brusca. Pero es que realmente no quiero que ni ella ni las demás piensen así, simplemente no quiero que piensen algo que pueda llegar a pasar.

-Tienes razón Aroa, lo siento...- contestó en un susurro. Y sin más palabras, nos dimos un fuerte abrazo empiezando a llorar como magdalenas.

Narra Merci

Esto es lo peor que me ha pasado en la vida. No quiero que Lana muera, ya perdí una vez a alguien muy importante así, no quiero perder a otra también. Estoy llorando como una estúpida, yo no he llorado nunca en público, ni para la dichosa película de lo imposible ni en ninguna otra. Es la primera vez que lloro delante de mis amigas, ellas también están destrozada, jamás vi a ninguna llorar delante de nadie, sólo con las películas y no lloraban tanto... Pero ¡joder! Esto es muy difícil, no puedo parar de llorar siento una presión en el pecho. Cristina se acerca y me abraza también llora y yo no le tardo en corresponderle el abrazo.

- Familiares y amigos de Lana Mendoza. - Llegó el doctor. Todos nos levantamos del asiento. - Bien, la paciente sigue en coma, necesito que ustedes los familiares y amigos le hablen, le recuerden cosas bonitas que haigan pasado con ella, que les den buenas noticias. Esperemos que despierte sino temo decirles que la tendremos que desconctar. - Pauso y se escucharon sollozos. - Buena suerte. - Nos deseo. - Les voy a pedir que sólo se queden familiares y amigos muy cercanos a la señorita Mendoza, pues están ocupando la sala de espera. - Dijo y se marchó con la misma.

Entre lágrimas entraron los abuelos, tíos y primos que se quedaron, ahora ibamos a entrar Aroa, Marta y yo, por último Cristina y Paola. Yo sólo espero que despierte.