ᴛʜᴇ ᴅᴏɴᴏʀ | ꜱɪʟʟɪᴇ [ɢ!ᴘ]

3

Millie y Casey se mantuvieron abrazadas durante unos buenos cinco minutos, al separarse, Millie le besó la cabeza. Lágrimas cayeron de mi rostro y el de ella al ver cómo crecía la sonrisa de Casey ante la ternura de su otra madre.

- Eres tan hermosa, Casey.

- Tienes los mismos ojos que yo, mami. Y tienes estos - apunta el puente de su nariz -, igual que yo.

Se aleja de su nueva madre, va hacia Jacey, y le toma la mano.

- Jacey, ella es mi nueva mamo. Su nombre es... - su ceño se frunce, incapaz de indetificarla - ¿Cómo te llamas, mami? - le susurra en su oreja, aunque todas logramos escucharla.

- Millie - responde en el mismo tono.

- Jacey, ella es mi nueva mami, Millie - anuncia con orgullo - Ella es Jacey - le dice a su madre, apuntando a la pequeña niña -, y es mi mejor amiga-

Millie sonríe. Sólo sonríe. Sus ojos no han dejado de mirar a Jacey. La mira con demasiada ternura y amor. La mira como la miro yo. Como una madre lo haría.

- Ma, ¿puedo tener dos mamás? - escucho que le habla jacey a Sophia, causando que todas estallemos en risas, interrumpiendo mis pensamientos.

- No, cariño, ¿porque adivina qué? Tú tienes un papá. Y ese es justo el hombre que iremos a ver. Nos vamos a ir a divertir con tu papi y dejaremos a Casey aquí con la tía Sadie y con Millie - le explica Sophia.

- ¿Millie se va a quedar aquí? - pregunta Jacey con un gruñido.

- ¡Sí. mi mami se quedará aquí conmigo!

Millie me mira por primera vez desde que Ella y ella se vieron. Con cariño y amor evidentes en su rostro una vez más. Saber que las hice felices a ella y a Casey con esta reunión, se siente increíble. La felicidad de Millie y de nuestra hija es todo lo que importa.

Son casi las cinco en punto cuando Sophia finalmente saca a Jacey de la casa; protestando porque quería quedarse con Millie, diciendo: "¡Sí, y ahora podemos ver a Millie todos los días, también!". Después de ver a Jacey con su padre muchas veces, Ella estaba siendo muy persistente para que todas se fueran y ella pudiera pasar tiempo con Millie.

- ¿Ella tiene que ir a la escuela mañana? - me pregunta Millie mientras nuestra hija corre a su habitación, probablemente para traer todo lo que tiene, esperando que Millie juegue a algo con ella. Pero la verdad es que Millie haría cualquier cosa que Casey quiera; jugar con cualquier juguete que le alcanzara haría a ambas igualmente felices.

- Sí. Normalmente yo estaría feliz con eso porque podría ir a trabajar tranquilamente, pero ella va a pelear si eso significa que no puede estar contigo.

Millie me ofrece esa risa aniñada otra vez y yo no puedo evitar sentirme orgullosa al saber que yo se la provoqué.

Ella realmente se ve hermosa cuando se ríe.

- Ah, qué pena. Y la tarde ya se nos fue. ¿Estaría mejor entonces quedarnos aquí que salir y hacer algo?

- Sí, probablemente. Pero solo tiene que ir a la escuela una semana más y luego tendrá dos semanas de vacaciones. Si querías hacer planes, entonces las vacaciones son el momento perfecto - resolví - Esta noche puedo hacer la cena y luego tú y Casey pueden pasar tiempo juntas.

- Me gustaría pasar tiempo contigo también - un sonrojo aparece en mis mejillas -, pero eso estaría bien. Me ofrecería a cocinarles la cena, pero no quiero envenenar a mi hija el primer día de conocerla.

Casey llegó cargando una caja llena con sus juguetes favoritos, equipo para pintar y juegos de mesa, intensificando la risa entre Millie y yo luego de su último comentario. Nuestra hija arrastró la caja hasta donde Millie estaba sentada, todavía en el piso. No creo que ella hubiera notado que aún no se había levantado.