The Brightness Academy || Aidan Gallagher

5

Aidan Gallagher acababa de rechazarme. Jamás me había sentido así de humillada, tenía la leve esperanza de que me aceptara, si lo había rechazado antes era por mis miedos a enamorarme de él. Pero el eso no lo sabía.

Me senté en una de las barras improvisadas del lugar, pedi un tequila mientras observaba como Hannah se le encimaba a Aidan.

Tenía que quitarme a Aidan de la cabeza, hace unos días me la pasaba pensando en Xander y ahora el único que parece que me importa es Gallagher.

- Hola!.

Aún con la musica logre escuchar como me llamaban. Me gire para encontrarme con Noah Schnapp.

-¿Qué quieres?- pregunte desinteresada. La verdad no tenía ánimos para discutir.

-¿No te puedo saludar?. Creí que éramos amigos.

-Dejamos de ser siquiera conocidos desde que me dejaste por Millie.- recordé molesta.

- Eso no fue lo que pasó.

-¿Ah no?, Pues todas las revistas me tacharon de cuernuda cuando salió la foto donde los dos se estaban besando en un jacuzzi.

-Y fue un error, lo siento si te lastime. Pero tu no parecías tan triste en los brazos de Aidan.

Gire los ojos. Se supone que justo ahora viene a tocarme este vals. No me jodan.

- Yo no soy como tú.- afirme.- En esta historia para mi desgracia la única cuernuda fui yo. Jamás te engañe con Aidan.

-¿Crees que no se como te mira?.

- Pues con los ojos! Con que más.

Era una repuesta muy estúpida de mi parte, ¿Pero que parte de no hablar de Aidan entienden?.

- No estoy bromeando Freya, se que le gustas.- aseguró celoso. - ¿Recuerdas la obra de Romeo y Julieta?

Mire disimuladamente hacia la mesa de mis amigos, Hannah seguía junto a Aidan, sólo que está vez este último tenía su mirada en mi y Noah.

Como olvidar esa maldita obra escolar, ese fue el parteaguas de todo lo que estamos viviendo ahora.

Flahsback

Me acerqué a la multitud de chicos que había formados en el salón de teatro. Tuve que dar y recibir un par de empujones pero valió la pena.

-Hey, aquí!.

Tomaron una de mis manos atrayendonme. Sonreí cuando me di cuenta que era Jace.

-¿Estas ansiosa?- pregunto el rubio.

-Mas que ansiosa estoy nerviosa, no se si realmente valga la pena haber venido.

Mire a mí alrededor.

-¿Y esa baja autoestima?.- pregunto confundido

-Es sólo que audicióno casi toda la escuela.- mencioné obvia.- No creo que tengamos mucha posibilidad.

-Solo confia diosa.

-Ahg!.- me queje.- No me digas Diosa.- le pedí.- Se me hace muy egocéntrista.

-Es tu apodo en la preparatoria.- se encogió de hombros.- Todos te conocen así.

-Todos menos mis amigos como tú.- le recordé