En el infierno una hermosa demonio se encontraba soñando despierta con la niña que en su momento le robo el corazón.
─ Hija mía, ¿que haces aquí?
Saludo aquel ser infernal, viendo como su primogénita se encontraba sentada viendo un punto fijo.
Jn: Acabo de regresar, fui con Nayeon a quitarle el alma a una persona que rompió un pacto -seria-
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─ ¿Que te pasa? Últimamente te veo sin ganas de nada
Jennie: No lo sé padre, últimamente me aburro muy fácil. Me siento vacía.
─ Vaya... En realidad no se que decirte en estos casos, la verdad yo no soy bueno con cosas como estas
Jennie: Lo sé -suspira- iré con Nayeon, quizás ella sepa que me puede ayudar
─ Esta bien
La chica fue en busca de su mejor amiga... Nayeon, la cual se encontraba en cierta cafetería de la tierra.
Nayeon: Jennie! ¿Que haces aquí -hablo cuando su amiga aparecio frente a ella-
Jennie: Nada, solo quería hablar contigo
Nayeon: ¿De qué?
Jennie: Crei qué quizás tu me puedas ayudar a saber qué me pasa, últimamente me siento sin ganas de nada
Nayeon: Sabes amiga mía lo que tú necesitas es una pareja, después de todo tu padre te buscará una cuando seas la reina
Jennie: Excelente idea, tu ingeniosa idea solo tiene un pequeño problema... ¿Quién?, no pienso estar con uno de los demonios del inframundo, son todos horribles -hace un gesto de asco-
Nayeon: ¿Que me dices de Kai? Según lo que me dijiste ya te has acostado con el
Jennie: En realidad sólo me acosté con el una vez, y fue cuando no había tenido sexo en siglos. Kai me invoco, yo estaba desesperada y pues pasó, no tengo intenciones de volverlo a ver
Nayeon: Mmm... ¿Que opinas de G-dragon?, estuvieron saliendo por un tiempo
Jennie: Nunca estuvimos saliendo, solo era sexo, no nos llevamos tan bien
