UN PEQUEÑO CONFIADO

Capítulo 01

Takemichi Hanagaki era un niño afortunado y lo sabía, pues aún cuando sus padres se fueron de la ciudad sin decirle nada lo dejaron en manos de la amable y hermosa señora Tachibana.

Ya estaba viviendo con ella desde hace un tiempo, ella tiene una familia, pero estos viven fuera de la ciudad, siendo él su única compañía, además, no es como si su relación con su esposo fuera buena, sólo sigue con él por sus hijos y para que su prestigio como detective no se arruine.

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Takemichi despertó de una larga siesta y se tallo los ojos para poder observar mejor lo que había a su alrededor.

El sol esa mañana era leve pero daba su calor mañanero.

Takemichi se levantó y camino hacia la cocina, ahí se encontró con la amable señora Tachibana cocinando un delicioso desayuno.

Sra. Tachibana: Takemichi, buenos días, como amaneciste hoy bebé? - dijo la mujer amablemente mientras colocaba el desayuno del pequeño en la mesa.

Takemichi: Bien! - dijo alegre el pequeño con una sonrisa mientras se sentaba en la mesa.

Sra. Tachibana: Me alegro, ahora come para que empieces con tus clases - dijo dándole una sonrisa al niño, haciendo que este asienta.

Takemichi: Disculpe, Sra Tachibana, por qué no puedo ir a una escuela normal cómo todos los niños? - dijo algo tímido, haciendo que la Sra Tachibana hiciera una mueca de tristeza sin que el niño se diera cuenta.

Sra. Tachibana: Es que tus padres, como te quieren mucho, no quieren que te arriesgues a salir, que te suceda algo y que ellos no puedan estar aquí para ti - dijo mintiendole, pues en realidad las clases en línea no se necesitaba ir a juntas o estar presentes por si el niño hacía algo, en pocas palabras, con las clases en línea se quitaban un peso de encima, el cual era estar al pendiente de su propio hijo.

Takemichi: Ya veo, espero que cuando ellos regresen, yo pueda ir a una escuela normal! - dijo emocionado el niño bajando de la mesa pues ya había terminado de comer.

La Sra Tachibana le sonrió y cuando el niño ya no la veía, dio una mueca de tristeza, no quería mentirle a ese pobre niño, pero si era lo único que conservaría su hermosa sonrisa, ella lo haría, ya veria luego la manera de meterlo en una escuela normal, por ahora sólo le daría todo el amor que pudiese darle a esa hermosura de niño.

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La Sra Tachibana estaba tranquila limpiando la casa y con Takemichi en la sala haciendo su tarea, en eso alguien toca la puerta.

Como ella nunca tenía visitas se le hizo raro, por lo que le ordenó a Takemichi esconderse pues la última vez que tuvo visita fue un ladron.

La sra Tachibana abrió lentamente la puerta y ahí lo vio, era su esposo, Masato Tachibana con maletas y una cara de pocos amigos.

Sra. Tachibana: Masato?, qué haces aquí?, y los niños? -

Masato: Hola, cariño, también me da gusto verte sabes - dijo pasando como juan por su casa.

Sra. Tachibana: Te hice unas preguntas - dijo cerrando la puerta y yendo detrás de él.

Masato: Eres una molestia, lo sabes? - dijo sentándose en el mueble y quitándose la corbata, en eso se da cuenta de los libros y la computadora - comenzaste a dar clases? - dijo intentando tomar la libreta, pero su esposa no lo dejó.

Sra. Tachibana: S-si, le doy clases a niños pequeños, de hecho ahora mismo estoy muy ocupada, porque no te vas a dar vueltas por ahí o te vas a ver a tus amantes, como siempre haces - dijo enojada mientras quitaba rápidamente las cosas del pequeño de la mesa.