*9 años después*
La luz entraba de la ventana hacia mis ojos, me molestaba la calidad luz que se colaba por la ventana, abrí mis ojos, con dificultad, un rayo deslumbrante entro a mi ojo, me desperté.
Las pequeñas motas de polvo volaban en el aire dejándose ver por el rayo de luz.
Salí de mi cama, las sábanas blancas y cálidas de decían no te vallas, quédate a dormir un rato más.
Tenía que salir, era un lunes y temprano.
Me aliste para ir a mi cuarto semestre en el colegio.
Tarde menos de lo que esperaba, si, tengo tiempo para llegar temprano.
El semestre empieza hoy así que no puedo darme el lujo de llegar tarde.
Mi madre me detiene saliendo de mi cuarto.
-Jaden, buenos días.
-Buenos días mami- le respondo.
-Veo que ya estás listo- mi madre suspira y continua- Ten un buen día cariño y cuídate mucho.
-Lo haré.🍂🍃
Hace unos años mi madre y mi padre se separaron, mi padre viene a vernos cada mes, pero siempre salen peleando, los gritos hacia mi madre regresaban, y también se dirijia a mi con sus comentarios, mi madre me defendía, mi padre era por así decir Machista y en parte Homofóbico.
Mi madre por si parte era todo lo contrario, respetaba y me cuidaba de todo.
Casi no pasaba tiempo con mi padre pero el poco tiempo que me quedaba con el era muy incomodo, todos sus comentarios y frases así como su mirada era sofocante.
Su separación fue muy dura, aunque mi madre dice que fue un gran alivio hacerse liberado de el, no lo fue para mí.
Tener que pasar al menos una semana entera con el cada 2 meses era una pesadilla.
Cada minuto con el era desesperante.
Vivía momentos muy malos, cada vez que estaba con ese hombre habían lágrimas.
"no llores, los hombres no lloran"
"Debes ser alguien fuerte como lo que eres, un roble"
"Tendrás cientos de mujeres"
"Los hombres podemos hacer lo que queramos"
"Se cómo yo y estaré orgulloso de ti"
Agh😖, que babosada, no tengo esos pensamientos para nada, ideas que uno se mete en la cabeza, querer ser un rey o algo así o que todos se peleen por ti no es algo que valla conmigo.
Talvez no sea, un "Macho" pero prefiero ser como soy, a tener que ser alguien como mi padre.
Los momentos tristes que no le conté a mi madre nunca que pase con mi papá, por querer evitar más problemas.
Pero mi mayor problema es que me hago silencio demaciado.A mis 16 años, creo que he decidido muchas cosas.
Cosas de las que claramente mi padre no estaría orgulloso, de echo estaría furioso, pero eso es lo de menos....o no?
Mi madre me ha apoyado pero, aún así, me cuesta mantener una sonrisa verdadera.
Mis pensamientos, recuerdos y sobretodo, mis delirios aveces, mi ansiedad y mis inseguridad, se hacen presentes y solo hay silencio. Un silencio que es peligroso o venenoso.Tengo heridas en el alma y en en corazón, que aún no sanan.
🍃🍂
Llegue a la escuela como era de esperarse 20 minutos antes, tampoco era uno de los primeros pero tampoco uno de los que siempre llegaban tarde.
Respiro hondo antes de dar un paso adelante hacia el colegio. Mis piernas tiemblan un poco, pero logro entrar.
—Buenos dias— saludo al guardia que se encuentra sentado en una silla revisando que todos esten presentables para la escuela, solo recibo un ligero movimiento de manos.
Entro al colegio y camino hacia mi salón de clases.
Derepente siento a alguien detrás de mi, volteo a ver y veo a Rachel.
Con su cabello suelto dejando que su fleco le cubra mitad de su rostro, su mochila con brillos tonos azules y rosados, ojos azules de tono verdoso protegidos por unos lentes.
Se convirtió en mi mejor amiga cuando entré a la secundaria.
Ella ha estado a mi lado durante todos estos años, nuestras similitudes hacen que seamos amigos inseparables, siempre nos hemos apoyado mutuamente.Me saluda con una gran sonrisa en su rostro.
—Jaden, me da muchísimo gusto que andes por aqui, pense que estaría sola—hace una mueca de tristeza fingida.
—No te dejaría sola nunca—Le sonrio y caminamos mientras seguimos hablando.
—Y cuénteme ¿en que salón te quedaste?
Rachel suspira.
—En el salón 4ab
—Yo en el 4aa, supongo que seremos vecinos de salones jaja.— me rio un poco por la Situation.
—Jajaja— Rachel rie en respuesta— supongo que es asi, pero nos veremos siempre en el descanso.
—Obvio.
Suena la campana que indica que debemos entrar a los salones, rayos estábamos tan entretenidos que nos olvidamos de buscar donde se encontraban nuestros salones.
—Sabes donde esta tu salón?
Le pregunto a Rachel con un poco de desesperación, no puedo llegar tarde a mi primera clase.
—Ni idea— encoje los hombros.
Tratamos de encontrar a alguien que nos diga dónde debíamos ir pero era difícil.
—Oye, ven aquí— la voz de Rachel llama mi atención.— Por aquí es.
Al escuchar eso sentí un alivio.
Corrí hacia donde se encontraba deprisa.
—Te veo luego— dice Rachel mientras entra a su salón.
Muevo la mano y veo el cartel con el grupo escrito en el.
«4Aa»
Lo pienso un poco, miro dentro, aún no hay muchas personas, puedo elejir mi lugar tranquilamente.....ok, todo está bien, entra al salón, no mires a nadie a los ojos y siéntate en un buen lugar, eso es sencillo, siempre pienso muchas veces las cosas antes de realizarlas, aveces eso me trae problemas pero analizo bien.
—¿Vas a entrar?
Una voz suena detrás de mi, es algo ronca y gruesa.
Miró detrás mío rápidamente.
Un hombre alto, con lentes, camisa de cuadros y unos 40 años, ese debe ser el maestro.
—Ah, yo, si jeje ahora entro.
Me deslizo rápidamente por el salón y me siento casi en medio de la clase, fantástico, ahora voy a ser un centro de atención.
Alumnos siguen entrando al aula.
El maestro saluda a cada uno.
Todo marcha bien, todo sigue en orden.
La segunda campana sonó, eso indicaba que ya las clases debían dar inicio.
—Buenos días, jóvenes estudiantes, déjenme presentarme. Soy el maestro Marco Yaz Chang y seré su tutor— el maestro se mueve con firmeza por todo el salón, hay tensión, es intenso, tiene experiencia— No nos conocemos, así que..¿Que les parece si hacemos una pequeña dinámica?.
Silencio.
—Nos vamos a presentar uno por uno, diremos nuestros pasatiempo, nuestro nombre, como nos gusta que nos llamen, su edad y no se....algo que crean que es importante para ustedes.— el maestro levanta la mano — empiezo yo: Ya conocen mi nombre, tengo 40 años, mi pasatiempo favorito es leer, jugar videojuegos y enseñar a mis alumnos, siento que algo importante en mi vida ha sido que me convertí en maestro de está escuela, y es algo que me gusta a pesar de que antes no tenía pensado estar aqui.
Es algo curioso, el maestro de 40 años juega videojuegos, no es algo común pero está bien, y es una clara muestra de que muchas cosas pueden suceder sin que sepamos cómo.El maestro señalaba aleatoriamente, no dejaba de mover mis piernas, cielos estaba muy nervioso.
Fui el último al que señaló, lo mire un momento.
—Adelante— dijó.
Vamos Jaden, puedes hacerlo.
—Hola— moví el brazo saludando, eso fue muy vergonzoso, que había echo?— Mi nombre es Jaden Britt Kya, llámenme Jaden, solo así, mi pasatiempo favorito es leer libros, pintar, no tengo hermanos así que pasó mucho tiempo solo, tengo que buscar con que distraterme, ahora tengo 16 años y medio y.....—Guardo silencio al tratar de recordar algo importante que me halla pasado, pero, han sido tantas escenas tristes que no quiero compartirlas— ¿algo importante?
Lo pensé un poco más.
—Mis padres están separados, así que mientras me quedo con mi madre pero aveces me voy una semana con mi padre, me considero alegre a pesar de eso, he sabido cómo salir adelante aunque las cosas sean difíciles, mi madre dice que debemos ser fuertes siempre, casi no tengo amigos pero estoy conforme con las pocas amistades que tengo...y creo que es todo.
Ya se, talvez hablé de más, no debí mencionar el problema entre mi madre y mi padre, pero entre en pánico y no supe que más decir.
Todos se mostraban atentos ante mis palabras, muchos rostros me miraron con sentimiento y muchos otros con desagrado, pero estaba bien.
El maestro se acomodo los lentes en su cara y empezó a hablar.
—Bien, esto fue muy bueno para que nos empecemos a conocer, seamos buenos todos ¿ok?.
15 minutos después sonó la puerta del aula.
Levanté la mirada, una silla de ruedas.
Recuerdos volaron en mi cabeza.
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Esa sonrisa tuya
RomanceRecuerdos. Tratar de olvidar algo es muy difícil, esos recuerdos que ruedan una y otra vez en tu cabeza, no los puedes dejar ir. Talvez se han vuelto parte de ti. Las inseguridades, vivir con el miedo de no ser aceptado entre la gente, pero eso no d...