30 segundos.

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La sensación de hundimiento en la base del estómago, su garganta seca, el palpitar en su coronilla y el temblor de anticipación en sus manos.
Una combinación que le produjo un escalofrío de pies a cabeza y que hizo sudar en frío al elegido apenas su mirada se fijo en Draco y en la hoja de pergamino que llevaba en manos.

Sabe lo que es. Y sabe lo que eso significa. 

Estaba por suceder, y no podía hacer nada para evitarlo.

No podía hacer nada. No ahí. Nada de peleas, hechizos o tratos peligrosos que le aseguraran que mantendría la boca cerrada.

El gran comedor se encuentra en un repentino y extraño silencio que hace que sus manos comiencen a sudar.

"Ellos nunca están tan callados" Harry se dice mientras traga pesadamente. Siente que puede vomitar en cualquier momento.

"Ellos también saben que algo está por suceder" Su subconsciente grita que salte y evite que suceda pero ¿que hará entonces? Draco terminaría hablando tarde o temprano, en público o en privado.

Pueden no creerle, pero lo harán. Había estado anunciando que tenía algo en su contra, ¿cómo nunca se imagino a qué se refería?

—Harry respira —la voz es lejana y ni siquiera es consciente de quién proviene. No puede concentrarse—. Harry, respira —tan lejos y tan cerca. No lo suficiente—. ¡Harry respira! —el oxígeno vuelve a sus pulmones apenas la demanda entra en su cabeza, Hermione luce preocupada y las miradas de sus amigos están sobre el.

Harry está por contestar, negar o simplemente notificar lo que estaba por suceder, pero entonces Draco abre la boca y las palabras comienzan a salir.

—Porque Hermione dijo que hablar sobre mis sentimientos me ayudaría, pero no soy bueno hablando así que prefiero escribirlos —lee, mirando directamente hacia el. La burla en su mirada y la sonrisa maliciosa en su boca.

Está disfrutándolo, finalmente ha encontrado algo que pueda afectarle. Quiere humillarlo frente a todos.

Harry cuenta mentalmente los segundos para que todo se vaya a la mierda.

1...

Todos prestaron aún más atención apenas entendieron lo que sucedía, no era una simple discusión o mentiras sin sustento, no. Draco realmente tenía algo para golpear al Gryffindor esta vez. Sus propios sentimientos, algo con lo cual el chico siempre había sido reservado, eso que era un tema recurrente entre los estudiantes.

3...

—Ron y Neville tienen ideas contradictorias sobre lo que es el amor, para mi se siente como vértigo y terror —suelta una burlesca risa ante las palabras escritas y Goyle a su lado le acompaña igual o más divertido.

Algunas otras risas alcanzan a escucharse. Sin embargo la mayoría se encuentra en un estado hipnótico en la espera de que continúe.

6...

—Hubiera preferido enamorarme de cualquier otra persona en lugar de alguien que probablemente siempre estará en mi contra. Tal vez por eso siento tanto terror cada que le veo, el rechazo nunca fue algo que pudiera manejar —las miradas ahora están dirigidas a la mesa de Slytherin. Porque por supuesto debía ser alguien de allí para que el niño que vivió se refiriera de esa manera.

Tantas opciones, tantos estudiantes que se llevaban mal con él o sus ideales.

10...

—Pero no solo cuenta con un físico atractivo si no que parece tener una personalidad igual o mejor. Es casi físicamente doloroso no poder controlar lo que siento —la voz de Draco es cantarina, sumamente feliz y chillona en una burlona representación de cómo Harry debió retratar sus palabras.

16...

—Nunca está demasiado cerca o presente, pero de alguna manera siempre estamos cerca —Harry muerde su labio con fuerza porque sabe, sabe que está por llegar al final y que todo está por explotar. Y Draco, Draco está disfrutando destruirlo.

18...

—Estar enamorado me desequilibra y me avergüenza hacia cierto punto. No te enamoras de alguien que no conoces verdaderamente, sin embargo... —Hermione a su lado busca la manera de hacerle callar o que alguien le detenga.

22...

—No es igual de desagradable que sus amigos, aunque tampoco le vuelve verdaderamente agradable. Es extraño ya que no me considero masoquista o algo por el estilo —ahora más que nunca las miradas están plantadas en diferentes puntos, van de un lado a otro y parecen ser profundas y en espera.

26...

—Tampoco relataré mis sentimientos como si al menos yo pudiera entenderlos —el tono de voz es aún más meloso que en un principio y le genera unas extremas ganas de vomitar.

27...

Todos estaban perfectamente atentos, no dispuestos a perderse ninguna palabra de lo que sea que estuviera escrito allí. Y los más cercanos a Draco parecían disfrutar la atención, el poder destruir al niño que vivió con sus propias palabras y sentimientos.

Destruirlo desde adentro.

28...

—Y ni siquiera me gustaría intentarlo, aunque los motivos son aún más complicados —la sonrisa de Draco crece conforme se acerca al final y Harry puede sentir el sabor metálico que produce morderse el labio de forma tan ruda.

30...

—Porque estar enamorado de Theodore Nott no es algo de lo que me sienta orgulloso —concluye, con una sonrisa engreída y orgullosa mientras los jadeos hacen eco a sus palabras.

Todo es silencio entonces. Un horrendo silencio mientras las miradas se cruzan y las mentes trabajan para comprenderlo.

Ni siquiera los amigos del rubio parecen haber esperado tal desenlace y eso hace que la acidez sea más notoria conforme los murmullos comienzan.

Harry quiere acercarse y decir algo, discutir, gritar o simplemente lanzarse a golpear al rubio. Pero su cabeza da vueltas, su estómago se contrae dolorosamente y su garganta se cierra mientras sus ojos comienzan a arder. Sin embargo no está dispuesto a mostrarlo. No llorará ni tampoco lucirá débil frente a él. No frente a él de todas las personas.

Nadie dice nada cuando se levanta, tampoco dicen nada cuando camina con paso firme y sin mirar atrás, y mucho menos dicen palabra cuando abandona el gran comedor y los cristales explotan ante su magia descontrolada por sus sentimientos inestables.

Tampoco nadie dice nada cuando Theo le arrebata el pergamino a Draco, leyendo lo dicho momentos atrás para posteriormente abandonar de igual forma el gran comedor.

Y nadie dice nada cuando Ron se lanza a golpear al Slytherin y todo se vuelve un caos.