Capítulo 2

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La mañana llego con rapidez, Giyu decidió seguir las órdenes dadas por Tanjiro al pie de la letra, aprovechó a dejar a su hermana oculta en una cueva

Tras hacer esto, estaba caminando buscando algo que le sirviera para poder transportar a su hermana, eso fue hasta que vio a una mujer arando la tierra, con rapidez y amabilidad se acercó a ella

- disculpe, me podría dar esa cesta y un poco de bambú por favor, lo voy pagaré - la mujer lo miró con una sonrisa amable en la cara para luego verlo completamente, de pie a cabezas

- verás jovencito, esa cesta tiene un agujero bastante grande en la parte inferior, aun así la quieres?? - le preguntó la mujer con una amable sonrisa, el simplemente asintió de manera rápida con una sonrisa en su rostro

- comprendo, puedes tomar todo el bambú que necesites, no es necesario que me pagues - le dijo la mujer con tranquilidad, pero Giyu simplemente negó con su cabeza para posteriormente mirar a la mujer

- voy a pagar - le dijo con determinación y una sonrisa, la mujer se rio levemente al ver lo obstinado que era el joven por lo que aceptó el dinero que él pelinegro le entregaba

Rápidamente Giyu tomó la cesta y el bambú que la mujer le había entregado para posteriormente marcharse con rapidez de regreso a donde había dejado a su hermana oculta, con rapidez la busco y tras unos segundos pudo ver como su oscura cabellera aparecía

- Nee-san, necesito avanzar por el día también, así que voy a usar esta cesta para poder cargarte, esta bien?? - la chica no respondió, simplemente lo miraba con sus ojos azules que parecían indicarle que lo comprendía

Giyu simplemente sonrio y durante las siguientes 2 horas mejoró y reparo la cesta con el bambú que había comprado, con lianas cercanas al lugar la ato con firmeza y finalmente la cesta estuvo lista

- Tsutako-Nee-san, podrías tratar entrar en la cesta por favor - su hermana asintió en silencio mientras que se intentaba meter en la cesta, pero justo como el habia calculado, su cuerpo era más grande que la cesta que había fabricado

Tanto hemos crecido desde la última vez que papá nos metió en una cesta no pudo evitar sonreír al ver como su hermana mayor había crecido tanto, el era un poco más alto que ella pero por poco

Giyu mantuvo su silencio por un rato mientras que observaba la espalda de Tsutako cuando un recuerdo volvió a su mente

- Nee-san cuando retaste a Tanjiro-san recuerdo que tu cuerpo había crecido, podrías intentarlo nuevamente pero esta vez haciendo que tu cuerpo sea más pequeño? - su hermana no respondio, pero sorpresivamente su tamaño comenzó a enconjerse hasta que pudo caber perfectamente en el interior de la cesta

- muy bien hecho Nee-san!! - el Tomioka le felicito mientras que le daba unas suaves y gentiles palmaditas en la cabeza, luego cubrió la cesta y a su hermana con su haori rojo

Evitando que cualquier rastro de luz solar pudiera hacer contacto con su cuerpo, para posteriormente cargar a la cesta que contenía a su hermana en su espalda y comenzar a avanzar con rapidez a su destino

Ambos hermanos siguieron su camino, tras algunas horas la noche comenzó a caer con rapidez, por lo que Giyu decidió hacer una pequeña tienda de campaña para poder dormir y recuperar sus fuerzas, a media noche unos extraños ruidos la despertaron

- hay alguien?? - pregunto a la nada, puesto que no podía ver absolutamente nada con simpleza observó los ruidos parecían sesar momentáneamente

Por lo que el Tomioka intento volver a dormir, cuando de repente sintió como algo se le hecha a encima, en primera instancia pensó que se trataba de algún animal como un coyote o un lobo, pero al ver que se trataba de una persona intentó alejarlo sin éxito, la fuerza de aquel hombre era muy superior a la de ella

- eres muy valiente al tratar de quedarte en mi territorio, te daré eso mocoso!! Pero hace mucho tiempo que no tengo una comida!! - ahora estaba completamente seguro de que lo que estaba encima de él era un demonio

- hmmm!!! - y justo en ese momento su hermana llegó al rescate, sabía que Tsutako tenía mucha fuerza en sus piernas. Pero arrancarle la cabeza a ese demonio de un solo golpe era aterradoramente sorprendente

Nee-san es aterradora... Pensó el Tomioka que rápidamente se quito el cuerpo del demonio de encima hasta que se dio cuenta de que este aún estaba con vida

- pero que demonios te ocurre!! Tu y yo somos demonios porque defiendes a un humano!! - eso lo molesto, puesto que ese demonio hablaba con su hermana como si lo conociera de toda la vida, rápidamente tomó su cuchillo y se dispuso a asesinar al demonio, pero una mano lo detuvo

- con eso no le podrás hacer nada - era un hombre con una extraña mascara de color rojo, el hombre ato con impresionante facilidad al demonio a un árbol, Tsutako rápidamente regresó a su cesta mientras que el sol dejaba que el demonio se volviera cenizas

- disculpe, usted es Urokodaki-san?? - pregunto el Tomioka con curiosidad y el hombre simplemente asintió en silencio, para posteriormente mirarla a la cara

- tu eres Giyu Tomioka, el chico que me recomendó Tanjiro Kamado?? - el hombre le preguntó en un tono serio y tranquilo, el simplemente asintió, él hombre dirigió su mirada a la cesta donde Tsutako ya muy posiblemente estuviera dormida

- Giyu, que harías si tu hermana devora a alguien inocente - esa pregunta lo sorprendió, giro su cabeza para mirar a su hermana y luego volvió a mirar a Urokodaki que esperaba una respuesta

- matarla y después matarme a mi mismo - dijo de manera seria al hombre que le respondió con un simple asentimiento antes de poner una mano en su mano en su hombro

- se que es algo complicado, pero es lo que una demonio hace, debe alimentarse por lo que debes estar al pendiente en cualquier momento, ahora sígueme - el hombre se dio la vuelta para comenzar a caminar, el tomó la cesta y lo siguió pero rápidamente la caminata se volvió una carrera, que Giyu estaba perdiendo rápidamente

- oiga espere!! - el lo seguía lo más rápido que sus piernas le permitían, era rápido ciertamente pero ese hombre lo era aún más para su sorpresa, finalmente lograron llegar a su lugar de destino y vio como el hombre volvía a caminar con tranquilidad y naturalidad

- entonces... Ya pase la prueba?? - pregunto con cansancio mientras que miraba como el hombre, que lo volteaba a ver y luego señalaba a la montaña detrás de el

- hay inica tu prueba, descansa, lo vas a necesitar - dijo mientras que entraba a la casa que estaba a los pies de la montaña, el Tomioka entró cuando Urokodaki le dio el permiso, lo primero que hizo fue recostar a Tsutako en una cama y luego el hizo lo mismo a su lado para posteriormente caer presa del cansancio

Mañana hiba a comenzar su nueva vida como un cazador de demonios

Kimetsu no Invertd Donde viven las historias. Descúbrelo ahora