xxGolden Diamondxx

Treintaicinco

-estaba dispuesta a dormir, estoy cansada mental y fisicamente.

Pero...no me esperaba esto.

Mikey me destapo y se montó sobre mi dejandome boca abajo con brusquedad-

__: M-Mikey

-con sus manos aparto el cabello que tapaba mi cuello, se acerco dejando unos besos humedos y mordidas que me estremecia el cuepo. Sabia claramente para donde iba esto-

__: mikey detente! n-no quiero -hable forcejeando-

M: que no quieres? -hablo mordiendo con mas fuerza-

__: du-duele, joder, estoy cansada, ya dejame maldito idiota -dije entre un pequeño quejido-

M: cansada? De que? Que estuviste haciendo __? -hablo con voz ronca en mi oído-

__: ...yo... -murmuré-

-no dijo nada y solo me tomo de manera brusca el cuello mientras rozaba su miembro entre mis nalgas, su respiración era agitada, frunci el seño apretando mis labios, su erección crecía aun mas y mi entrepierna cosquilleaba-

M: acabo de follarme a dos perras antes de verte __ -susurró- pero no sasiaron mi apetito, te deseo a ti

__: como puedes ser tan descarado y decirme eso?!

M: acaso no quieres mi verga dentro de tu trasero? -hablo mientras con sus manos levanto mis caderas con brusquedad y abrió mis piernas- no te muevas

-estaba solo en bragas, Mikey sujeto un lado de estas y lo rompió de un solo tirón para luego ir por el otro lado y hacer lo mismo, las arrojó a un lado de la cama.

Me estremeci cuando senti la mano de Mikey darme una nalgada, solte un quejido, mi trasero ardia y mi entrepierna cosquilleaba, mi cuerpo aun estaba algo entumecido por lo que me iyecto Rindou y por lo que sea que haya hecho antes de eso-

M: te tiembla todo el cuerpo -hablo mientras deslizaba su mano por mi muslo-

-sentí la punta de su miembro en mi entrada, antes de que pudiera decir algo me embistio con brusquedad, alze la cabeza soltando un quejido tosco mientras apretaba las sabanas con mis manos, Mikey no me dejo recuperar el aliento y comenzo a embestirme con fuerza, sus estocadas cada vez eran mas profundas y en mis gemidos no habia ningún intento por retenerlos, los gemidos toscos y nada silenciosos de Mikey solo me exitaban, pero no podía mantenerne en pie o mas bien en cuatro, me temblaba todo el cuerpo y mis piernas y brazos ya no daban mas-