CRISTINA
Esatar en estado de sentirme totalmente drogada no es algo nuevo, y tampoco es la primera vez que me drogan y peor aun dudo qu esa la ultima, es decir estoy en un munfo sumamente peligroso en el cual no se sabe a ciencia sierta si vivire o morire, pero el simple echo de seguir medio drogado hace qeu la palabra "te amo" de Leo me tome por sorpresa
las palabras te amo pienso que son demasiado grandes es como que yo coja y regale todo mi empeño el qu eme costo trabajo crear, asi de grande es para mi
Claro que quiero decirte amo es mas lo amo y con todas mis fuerzas pero, no me siento prearada para hacerlo
-sabes- logre construir una sola palabra
-No, tranquila no te quiero forzar a nada- me senti un poco mal pot no poder corresponderle un te amo al amor d emi vida -se lo que piensas haserca de eso y se lo que sientes por mi lo cual me basta y me sobra , se que me amas y no es nesesario decir una sola palabra, tu larga lista de acciones me lo an demostrado-
-y yo si se que accion es la que encabeza esa lista-
-ya dulzura, no alardes que ambos sabenmso cual es- suele uzar ese tono cuando quiere torturarme al punto de perder el control total, Leo se inclina un poco a la altura de mis ojos y me alzo hasta que mis piernas rodeanran su sintura y llevarme a la cama mientras nos sumerguiamos en un beso lento, me coloco sobre la cama con toda la suabidad posible y sus manos lograron recorrer cada parte de mi cuerpo y baya que su piel está tocando la mía en los mejores lugares
Puedo sentir la dureza de sus músculos y piel trasiéndose bajo mis palmas, mis manos viajando por su pecho
se estrecha más contra mí y no voy a negar que lo recibo de buena gana, el contacto, la fricción y sobre todo el calor de su cuerpo contra el mío, puedo saborear la sensación que me provoca el tenerlo tan cerca de mi.
Con su respiración erizándome va dejando húmedos besos sobre mi cuello, que no hacen nada mas que tensar aquel nudo que ya lleva tiempo construyéndose en mi vientre.
Estoy tan pero tan excitada que siento que me derretiré de manera ansia, la humedad entre mis piernas cada vez es impresionante y mi cerebro, bueno pues esta tan abrumado por lujuria, que no llega a entender el por qué se está tomando tanto tiempo
Siento como mis pezones están tan endurecidos que duelen, ansiosos por recibir atención, y Leo juego con ellos entre sus dedos, suavemente tirando de el lo que causa que suelte un jadeo más fuerte de lo habitual, creando una tortuosa y lenta danza en esa sensible superficie
Arquee mi espalada al no sentir su boca sobre mi pecho, y quedarme quieta al sentirlo sobre el otro pecho y que Leo trabaja con la misma lentitud, como si disfrutara de verme rogar por mas contacto.
Quiero callarme, quiero controlarme, pero no puedo conseguirlo, las sensaciones simplemente son de otro mundo, únicas
Besa el medio de mis pechos y lo siento acomodarse sobre mí, trazando caminos con su boca; firme, caliente, húmedo y devastadora moldeándome a su antojo
Recorre mi ombligo antes de bajar un poco más, hasta mi monte de venus y yo aprieto mis piernas un poco mas para tratar de mantenerlas juntas, incapaz de contener el reflejo por recibir atención justo en aquel lugar sensible, mi cuerpo tan tenso que sintió q en cualquier momento tenga una convulsion
Empezó a recorrer mi pierna dejando tiernos besos sobre ella, hasta llegar a ala parte superior de mi muslo, mi piel hormigueando deliciosamente por cada lugar que recorre.
Separe mis piernas suavemente y se acomode entre ellas sus manos firmes en mi cintura, enviando ondas eléctricas ahí donde sus masculinos dedos me tocan
Estoy tan tensa por el ambiente que emos construido que siento como si fuera a explotar a mil pedazos, un fuerte gemido escapa de mis labios cuando siento su lengua en mi feminidad y muevo mis caderas inconscientemente buscando mas contacto, por que vaya que la sensacion de su boca en aquel lugar es exquisito
Jadeo por aire, porque sus atenciones se han robado todo el aire de mis pulmones y mi vista esta en las mismas; completamente nublada por el deseo
<<mi cerebro solo dice Lel>>
Circula mi clítoris con su lengua y vuelvo a mover mis caderas antes de poder detenerme. No quiero perderme un solo segundo de esa sensación. Lo siento trabajar nítidamente sobre mí, mis nudillos blancos de lo fuerte que tomo las sábanas y mis piernas tan tensa como una cuerda a nada de romperse. Succiona suavemente la parte más sensible y siento que perderé toda la cordura en ese momento. Recorre mi entrada abiertamente, creando mapas, lamiendo y enloqueciéndome.
En menos de lo que esperaba ay soy un mar de suplicas y gemidos << ¿y como no serlo? >> si esto es magia pura.
Me incorporo un poco sobre mis codos y sus ojos grises o de los dilatados que pueden decir negros, me miran de vuelta entre mis piernas. Leo me regala momentáneamente una de sus mortales sonrisas, un amago apenas que resulta peligrosamente excitante y que es casi suficiente para que me corra, antes de volver a sellar su boca entorno a esa parte en específico que me desarma.
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como que las escosas se pusieron fuertes
qué tal como esatan ya tomaron awuita
:)
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