Sintiendo sus pies temblorosos, miró la dirección en su celular y confirmó que estaba en el lugar correcto.
Tomó aire un par de veces y entró a aquel establecimiento de banquetes que acababa de abrir.
Inmediatamente su ser sintió calidez, fue guiado por mero instinto a la cocina donde solo había una persona.
Y sabía bien quién era.
Aunque estaba de espaldas, podía reconocer perfectamente a su esposo.
-Ya llegaste, el pedido de Sakura-san está listo, ve a dejarlo, Yamabe.
-Massy...-Susurró inconscientemente el pelinegro logrando que el rubio parará su hacer y lo encarará.
Ojos verdes y grises se conectaron.
Fue como un despertar para Kousuke, sentía cómo si estuviera completo.
Por su parte, Masahiro rio algo sonrojado tratando de ocultar su vergüenza.
-¿Quién es usted? ¿Cómo me llamo?
-Perdón, soy Oshiba Kousuke.
-Un placer, me iba a presentar, pero creo que ya me conoce mucho por el apodo que me puso.
-Lo lamento... Yo... Hable sin pensar-Tartamudeo con vergüenza el ojigris dándose cuenta que había sido un abusivo.
-Vale, dejemos eso de lado, ¿en que le puedo ayudar?
-Yo... Necesito de sus servicios.
-¿De qué requiere?
-Quiero a un chef para un evento masivo de 3000 personas.
-Suena a un gran reto. ¿Para cuando es?
-Hoy.
Masahiro abrió aún más los ojos y se puso algo nervioso por la presión, pero rápidamente el contrario entendió y empezó a explicar.
-Quiero decir, no es exactamente hoy, solo que necesito, por ahora, la degustación y una prueba de un posible acomodo de platillos.
-¿Va a requerir meseros?
-No, esos están cubiertos, solo lo necesito a usted.
Masahiro se sonrojo por aquellas palabras pero recuperó la compostura y negó.
-Lo siento, es algo precipitado y...
-Si el costo es un problema, le pago el triple o más.
-Son fecha navideñas, tengo mucho trabajo.
-Lo sé, pero solo tu comida es digna del evento.
-¿La has probado?-Cuestionó el ojiverde sorprendido causando una sonrisa nostálgica en el contrario.
-Siempr... Digo, si, alguna vez en un evento.
-Pero hay mejores, no entiendo porque insistes tanto.
-Porque eres tú quien las prepara.
Masahiro se sonrojo mucho y tartamudeo causando risa en el mayor quien pudo sentirse vivo.
Sin embargo, suspiro derrotado y se encogió de hombros, era claro que su esposo no iba a ceder por más que insistiera.
-Creo que me pase, entiendo, solo... Piénsalo, ¿si?
Kousuke extendió una tarjeta hacia el rubio quien, algo dubitativo, la tomó y asintió.
Le dirigió una cálida sonrisa que desarmó al ojiverde, camino un poco y, estaba por salir, cuando noto el platillo que preparaba su esposo a sus espaldas y sonrió.
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Christmas Wish
Short StoryEspecial Corto Navideño El brillante profesor Kousuke Oshiba ha sido victima de un hechizo gracias a un deseo por las fiestas decembrinas. "Ten cuidado con lo que deseas" Fueron las palabras del inicio de aquella locura que lo llevo a tener una vid...