-Hola, Kim.
-Hola. -Respondí en cuanto la vi.- ¿Entramos? -Asentí.
Nos sentamos en la única mesa que había vacía y enseguida nos atendieron.-Un café con leche, por favor.
-Yo otro. -Dijo Gigi. -A ver Kim, no sé por donde empezar. Dakota y sus amigas me dijeron que habías pasado una tarde con ellas, les creí, hacía mucho que no quedabas conmigo y el hecho de que ellas me dijeran eso me hizo pensar que igual comenzabas a cansarte de mí; además coincidió cuando yo comenzaba a salir con Alex.
>Sabía que te gustaba, pero preferí que te enfadaras conmigo a no salir con él, cosa que ya hice mal. Volviendo a lo de Dakota... me dijeron de ir con ellas a tomar algo y me lo explicarían todo, acepté y me contaron que tú habías hablado mal de mí por lo de Alex.
-Gigi, lo de Alex me molestó, pero jamás hablaría mal de ti por eso; él te quería a ti, no a mi, me pareció mal que salieras con él aún sabiendo lo que había, pero os respetaría igualmente. Eras mi mejor amiga, o más bien, mi única amiga, no te perdería por un chico.
-En aquel momento no me di cuenta, por eso te dejé de lado, Kim. Alex me dejó cuando supo que te había cambiado por ellas, hace unos días me lo contó, me dijo que escuchó como hablaban en el gimnasio Dakota y sus amigas, diciendo que habían logrado que te quedaras sola. Lo siento muchísimo, de verdad, no sé como he podido hacerte esto. -Dijo triste, realmente parecía arrepentida.
-El hecho de que me lo hayas explicado ya me basta, confío en ti, te perdono. -Respondí sonriendo mientras que el camarero dejaba los cafés en la mesa.
Le echamos azúcar y revolvimos con la cuchara a la vez, como hacíamos antes, nos miramos y nos echamos a reír.
-Por cierto, siento muchísimo lo de tu madre y siento más no haber estado ahí cuando me necesitabas.
-Tranquila, eso ya ha pasado, podemos empezar de cero o seguir como si nada hubiera pasado; pero no le demos más vueltas. Y gracias, tengo mucho que contarte.
Comencé a contarle lo de Mark, el día que me violó y comenzó a llorar, también le conté lo de Derek, que me llevó al hospital, que me ayudó con Olivia, que pasé las fiestas con él y su familia... todo. También le hablé de Meredith y me dijo que se alegraba de que fuera tan buena con nosotras.
-Has pasado por tanto... -Dijo secando las lágrimas. -Eres muy fuerte, Kim.
Ella me contó que sus padres se habían divorciado y, que, aunque no se comparaba a lo que yo había pasado, tampoco lo estaba pasando muy bien.
-Bueno, dejando los temas tristes de lado... ¿cómo es Derek? ¿Sales con él?
-No, no lo sé, él y yo nos vemos todos los días, dormimos juntos, a veces viene a mi casa para estar conmigo y Olivia, me regala cosas, pero no somos novios; aunque él se empeña en que le de tiempo y que nunca ha estado así con nadie, pero no sé Gigi, yo también prefiero saber qué somos. ¿Y cómo es? Bueno pues él es... es de las mejores personas que he conocido, siempre logra sacarme una sonrisa, me cuida como si fuera un bebé, me abraza por las noches cuando le digo que tengo frío. Y cuando me abraza... no te imaginas ni como me siento cuando me abraza, me olvido de todo, ¿sabes?
>Sé que se merece algo mejor, se merece una chica de su edad, a la cual quiera como si no hubiera otra chica en el mundo y con la que pueda ir a cualquier sitio sin que los miren un poco raro las señoras mayores. -Reí. -Pero también sé que jamás encontraré a alguien como él, es el amor de mi vida, Gi. Le quiero como jamás he querido a alguien, si lo pierdo me... me muero.
-Kim... estás enamorada. -Respondió emocionada. -Espero que sepa que no hay nadie mejor que tú en este mundo, si hablas así de él es obvio que no encontrará a nadie como tú.
-Antes hemos discutido. -Le conté lo ocurrido y terminé mi café.
-No es algo que no tiene solución, Kim. Llámalo y habla con él, y todo lo que me has dicho... díselo, sin importar las señoras mayores ni la edad.
- ¿Crees que es lo que debería hacer?
-No, no lo creo, es lo que deberías hacer. Se merece saber eso, y no lo que has dicho tú. -Asentí y ella comenzó a ponerme al día con su vida amorosa.
-Bueno, vamos hablando. -Dije en cuanto salimos de la cafetería después de pagar.
-Claro Kim, y hazme caso, habla con él. -Se acercó y me abrazó. -Te extrañé.
-Yo a ti también, amiga.
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Ris.🌷
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Mi salvación
RomanceKimberly es una adolescente de diecisiete años a la que le ocurren muchos imprevistos, por lo que necesita ayuda la cual se la proporcionará Derek, un policía de veintiséis años que no duda ni un instante en ayudarla.