Capitulo 21 "Paris, Roma, Tombuctú o donde quieras"

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Amelia no sabía concentrarse en el trabajo, Luisita no contestaba llamadas y no respondía mensajes, la era de muy dispersa, pero todo fue bien al final, Sara lo vio y quiso que se relajo.

- No es la primera y no es la ultima - dijo

- ¿Que dices? - pregunto Amelia seguía mirando el teléfono sin levantar la vista

- Ella no es para ti, tu necesitas mujer como yo, yo no estoy celosa, yo se que follas la otra pero igual vas a volver conmigo - Sara se acercó con un vaso - Ella no es para ti

- Te lo vuelvo a repetir porque probablemente nunca entendiste cuando volví a ti porque tuve aventuras con otras mujeres, Luisita es diferente ella es el amor de mi vida, y con ella quiero hacerme vieja

- Vieja - rió Sara - No me digas que quieres casarte

- Sí- respondió después de un momento-Si quiero casarme con ella, claro que quiero

- No me dices en serio? Sara de repente dejo de sonreir

- Hablo en serio, nunca en mi vida estuve tan series, Sara si tu encuentras en tu vida la mujer por quien quieres cambiar toda tu vida sabras, no solo follar, ale tambien tener hijos y casarse, para mi Luisita es todo, con ella todo o recogió la maleta y caminó hacia la puerta

- Pero pero donde te vas !!

- Me vuelvo a Madrid, tú te encargas del resto, tengo algo que hacer.

-Pero Amelia..

- Pero nada, ahora mas importante es mi novia - y Amelia salio

- Joder - Sara molesta murmuro

Luisita estaba en casa con Maria y Marina mientras tomaba vino

- ¿Pueden creer que Amelia se fue con Sara por que tenian algunos asuntos?

- y que? - pregunto Marina - Amelia te ama, eres su adoración

- Yo no veo nada malo en esto - dijo Maria

- ¿De verdad chicas? Sara esta enamorada de Amelia, ¿crees que no intentará tirarse a su cama?

- lo de Sara es muy probable aunque no la conozco, pero hermana, Amelia es fiel, te adora

- Si, cuando te mira salen chispas - agregó Marina - Tienes que confiar en ella

- Eso es, tenía dudas sobre ella, pero veo que es fantastica la cuni

Luisita bebió un poco de vino

- ¿Entonces crees que estoy exagerando?

- Claro que si, nunca he visto a nadie tan enamorado como ustedes- dijo Marina - A veces hasta te envidio

- Deberias llamarla

- Tengo 10 llamadas y 12 mensajes de ella, no quise contestar

-Eres idiota hermanita

- ¡Gracias!

- De verdad, tal mujer como Amelia no pasa seguido, tienes mucha suerte, ella es ideal y no confías en ella aquí, deberías disculparte con ella por estos celos

María y Marina querían que Luisita entendiera que ma una mujer że ja adora, pero Luisita tenia miedo y muchos celos. Se bebieron tres botellas de 4 de vino, Maria y Marina se fueron unas horas despues, y Luisita se fue a la ducha, cuando se fue, estaba Amelia con ramo de flores en la sala

- y esto?? - pregunto

Amelia se acercó

- Amor, quiero que sepas que aquí eres la mujer de mi vida, y no me importa ninguna otra, eres estoy a gusto, mi todo Luisita

- A ver Amelia, yo se que..

- Déjame decirte por favor - Amelia tragó saliva - Nunca he estado enamorada, se que no soy una santa, pero eres la única verdad en mi vida, y no quiero perderte, quiero estar contigo toda mi vida, eres como ninguna, siento que te conozco de otras vidas, somos como almas viejas, yo se que nos pertencemos . Eres mi salvación, quiero tener hijos contigo

- ¿Hijos?

- Si, hijos, por lo menos 2 hija e hijo

- Bien, y como se van a llamar?

- Luna y Luis

luisita se rio

- ¿Has estado bebiendo?

- No, estoy sobria, y digo lo que siento

Amelia en ese momento se arrodilló sobre una rodilla, y Luisita escondió su rostro entre sus manos.

-Amelia..

- Luisita - saca el anillo de su bolsillo - Este anillo lo compré hace un mes, entonces no sabía por qué, hoy lo sé, quiero que seas mi esposa, casemos en Paris, Roma, Tombuctú o donde quieras, pero casate conmigo luisita

Luisita estaba en shock, Amelia le agarró la mano

- Es hablas en serio

- Si, hablo desde mi corazón, Luisita Gomez te quieres casarte conmigo?

- Amelia, yo solo se que te quiero con locura, y nunca he amado a nadie como tú - respondió ella, conteniendo las lágrimas- y quiero casarme contigo, no importa dónde, incluso puede ser en la Antártida, importante juntos, y perdoname por mis celos , perdoname

- No hay que perdonar amor- Amelia puso el anillo al dedo de Luisita, ella se arrodilló ante Amelia y se besaron - Solo contigo quiero estar solo contigo


Luisita y María caminaban hacia la habitación donde estaba Amelia.

-¿Estas segura?- preguntó María.

- Segura de que?

- Que la quieres perdonar, Amelia te hizo mucho daño

- Amelia es la madre de mi hija, me hirió pero no mató a Benigna, robó, mintió pero no puedo ahora dejarla, está en coma y me necesita

- Y necesitas paz, necesitas divorciarte, te aconsejo como una hermana mayor, creo que encontrarás a alguien más.

Luisita sonrió con tristeza

-Amelia es mi unico amor, y nunca conoces a nadie, ahora quiero estar con ella, y mañana? mañana, cuando ella venga, te diré lo que decidiré, por ahora quiero estar con ella

- Te admiro, la dejaría en tu lugar, pero tu corazón es demasiado bueno.

- La amo demasiado, despues de eso se nos une Luna y ella tambien la necesita

Luisita entro al cuarto, Amelia estaba con los ojos cerrados, Luisita se sentó a su lado y le tomó la mano.

- Que rico hueles - pensaba Amelia - Te quiero tanto

Amelia sentía que Luisita estaba cerca, podía oler su olor, pero tenía miedo de abrir los ojos, no quería volver a la cárcel, no sabía si podía confiar en Luisita..

Sono telefono de Luisita, era Marcelino su padre

- Hola papa

- ¡Luisita! se perdio Luna! gritó el hombre

- ¿Que? Como?! Cuando?!!!

- ¡Estábamos en el bar, fui a la cocina, sentí un golpe en la cabeza y alguien se la llevó! dejó una carta "La venganza es dulce"

- No puede ser!!!!! Joder!!! - gritaba y colgó, abrió la puerta - Maria!!

- Que Paso !?

- ¡Alguien secuestró a Luna! Papá recibió un golpe en la cabeza en el bar, dejó una carta alguien, ¡por favor ayudame!

- ¡Vamos! - las dos se fueron

Amelia abrió los ojos, las sábanas se apretaron en sus manos, trató de subirse a la cama.

- Necesito..necesito recuperar a mi hija, ahora Luna me necesita - dijo, desconectó el aparato, se levantó con mucha dificultad, ahora su hija era lo más importante

ELLA MI PERDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora