A Christmas Love (Larry)

Capitulo 3 (Final): Un amor de navidad

Louis bajo su mirada al escuchar aquello y trago saliva para no soltar más lágrimas.

—¿Porque me dices esto?—Murmuró sin atreverse a mirarlo. Se sorprendió cuando los dedos fríos y llenos de anillos de Harry acariciaron su mejilla y después lo tomo del mentón para que lo mirara.

—Siempre que venía a Doncaster era por una razón—sonrió cálido, mostrando uno de sus hoyuelos.—Tú eras mi razón

Louis se sorprendió al escuchar aquello y sentía que sus emociones estaban al límite. Si, Louis podía ser duro con todo mundo pero en el fondo era demasiado sentimental.

Harry era su primer amor.

—Siempre fuiste mi razón. Me alegraba demasiado cuando te encontraba en la calle o en el teatro, verte me llenaba de felicidad, con sólo verte me sentía completo y esta noche al verte tan vulnerable me rompió, y se que esté no es el momento adecuado pero...

Se detuvo un momento, tomando valor para lo que iba a decir, para sacar eso que no podía callar más. Louis se veía tranquilo por fuera y a pesar de eso no lo estaba. Sus manos hormigueaban, sus piernas se sentían débiles y seguramente en cualquier momento caería, sentía la emoción revolverle el estómago y sus ojos no podían brillar más.

Era algo mágico.

—Me gustas Louis—soltó Harry al final con toda firmeza y seguridad.—Siempre me has gustado.

Y Harry no espero esa reacción. No espero las suaves manos de Louis sobre sus mejillas, no espero que Louis fuese tan atrevido y tampoco esperaba sus labios sobre los de él. Sin embargo se dejó guiar y siguió el dulce beso de Louis dejando caer las bolsas y pasando sus manos por su cintura.

Y si Louis estuviera consciente se reiría de lo cursi que se veían al besarse porque justo en ese momento había dado la media noche, escuchaba la pirotecnia de fondo y no le importaba nada de eso.

Era un jodido beso en navidad, había tenido el valor y el impulso de besar a Harry porque también le gustaba...

Y no, no se arrepentía.

Se separaron un poco cuando terminaron de besarse, ambos con mejillas sonrojadas y demasiado tímidos.

—Feliz navidad Louis—murmuró él rizado con una pequeña sonrisa.

—Feliz navidad, Harry—el chico de ojos azules le devolvió la sonrisa.—También me gustas desde hace mucho.

Y con esas palabras ambos se unieron en un cálido abrazo. Louis no necesitaba pararse de puntitas a pesar de que Harry era alto, porque Harry se inclinaba hacia él para que encajaran a la perfección.

Harry olía no solo a perfume caro que lo hacía oler no solo más varonil, sino que también olia y se sentía como en casa. Louis supo en ese momento que no necesitaba una mesa enorme llena de un exquisito banquete, no necesitaba brillantes copas brindando con el más caro de los vinos, no necesitaba una enorme casa adornada con luces y un enorme árbol de navidad con las más caras esferas. No, no necesitaba nada de eso sí Harry no estaba ahí, sólo necesitaba ese cálido y reconfortante abrazo en el que estaban, necesitaba sus manos allí, sosteniendolo de la cintura con su barbilla recargada en su hombro.

Se separaron un momento, ambos un poco sonrojados pero manteniendo el brillo en sus ojos, ese que habían tenido durante toda la noche.

Louis miró hacia arriba cuando vio que Harry tenía copos de nieve sobre su boina, así que solo se sonrieron, Harry mostrando sus hermosos hoyuelos (Los cuales Louis agradecía verlos así de cerca) y Louis mostrando esas arruguitas en sus ojos las cuales solo salían de vez en cuando... Louis no sonreía siempre.