A Christmas Love (Larry)

Capítulo 1: Vísperas de Navidad

Doncaster, 24 de diciembre. Vísperas de navidad.

Las luces decoraban la enorme y extensa casa, si bien cualquiera podría decir que era una exageración de decoración y de luces y sin embargo no era así... No cuando provenias de una familia de dinero que tenía casas y locales por todos lados, cuando vivías en un pueblo como Doncaster y tenías una de las casas más grandes juntamente con una familia privilegiada nada era exagerado. Al final, todo se trataba de presumir.

Eso es lo que Louis veía y es lo que más le repugnaba, sabía que cuando su madre vivía y él era más pequeño no tenían nada de eso, no tenían sirvientes que hacían todo por ellos, no tenían los mejores profesores y tampoco toda esa ropa de diseñador pues su padre nunca estaba en casa, siempre estaba en sus viajes y no lo veía hasta tiempo después, así que siempre habían sido su madre y él.

Cuando Lottie y Daisy nacieron nada de eso cambio, al contrario, el dinero no alcanzaba y su madre siempre se las arreglaba para que tuvieran algo que comer y ropa para vestir, aunque a veces esa ropa necesitara de un hilo, aguja y los dedos picados por esta de su madre.

Así que Louis se sentía asqueroso viéndose por milésima vez en el espejo, viendo ese ajustado traje azul marino con una camisa blanca y cabello peinado perfectamente que el estilista de la familia había tardado horas (sin exagerar) en arreglarlo hasta que quedara perfecto. Louis no era nada de eso que estaba reflejando el espejo y sin embargo se estaba dando ánimos a si mismo diciéndose que no dejaría que nada ni nadie arruinara su día.

Así es, no sólo era vísperas de navidad sino que también era su cumpleaños. Louis nunca había querido celebrar su cumpleaños después de que su madre falleció, pero después de una intensa terapia psicológica con el mejor psicólogo que había en el país (Y poner de su parte) logró superar eso. Así que sería el primer cumpleaños que celebraría después del fallecimiento de su madre.

Había pedido a los cocineros su comida favorita y su pastel favorito de chocolate así que realmente esperaba que todo saliera bien... Realmente lo esperaba.

—Joven Louis—el chico de ojos azules se sobresaltó dejando sus pensamientos atrás y viendo a través del espejo a uno de los sirvientes quien al parecer lucia apenado al tener que entrar a su habitación.

—¿Si?—Habló con naturalidad, dándole a entender que no le había ofendido.

—Lamento molestarlo pero su padre exige que baje.

—Gracias, puedes retirarte?

Suspiró una vez más al verse al espejo y salio de su habitación para caminar por el largo pasillo alfombrado y bajar con tranquilidad las escaleras, las cuales también estaban cubiertas por una alfombra roja. Vio a su padre a lo lejos dando órdenes y a algunos sirvientes llevando de todo de un lado a otro, desde grandes vajillas, arreglos florales, ollas, acomodando mesas en el centro y forrandolas con grandes manteles blancos que eran acomodados con sumo cuidado para que no se ensuciaran y no se arrugaran. Louis se contuvo con todas sus fuerzas de rodar los ojos.

—Louis, has tardado demasiado—su padre se movía por todo el salón y Louis solo lo seguía. —Los invitados llegarán pronto

Louis frunció sus cejas.

—Creí que sería una navidad común, sólo nosotros como familia

—La palabra común no está en mi vocabulario—su padre firmó una tablilla y siguió caminando con naturalidad.

—Padre—Louis apretó los puños.—Es mi cumpleaños, quería celebrarlo con ustedes.

—Oh...—Su padre sonrio y Louis sabía que era una sonrisa arrogante.—¿Ahora si aceptas el día que naciste?