[27] "Cuchito cuchito ven..."

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[Jaemin]

Jaemin se encontraba sentado en la mesa de la cocina mientras que un ejército de cabros pasao a poto-que se note el amor por sus amigos-Jenito lindo, y unos jóvenes-adultos se paseaban por toda la casa buscando a la bendita serpiente.

Luego de que Haechan y Mark llegaran, este último poniendo el grito en el cielo al saber que el animal había desaparecido, habían decidido dejar el incidente con la bebida tal como estaba, pues lo ocurrido con la mascota de Johnny era más importante. Mas tarde limpiarían.

El peli rosa se había negado de inmediato. Algo que no les había contado era que sentía un miedo tremendo por los animales, de cualquier tipo, desde el perrito más tierno que te pudieras encontrar hasta una polilla. Por lo que luego de rehusarse, aunque sin querer irse del lugar tomó la decisión de quedarse ahí arriba, donde no creía que la serpiente pudiera hacerle daño.

Ahora los recién llegados estaban en el patio, mientras que los otros tres cabros más jóvenes se paseaban por el interior de la casa.

No iba a mentir, aunque no fuese la ocasión, el hecho de que Jeno fuera tan valiente-a su parecer-de ir en busca de la serpiente le pareció atractivo.

Aún cuando en un principio su primer instinto fue escapar, por lo que chocó con el. Cayendo ambos al suelo de la cocina, además de quedar con un leve dolor de cabeza por el impacto.

-¿Donde mierda se puede esconder una puta serpiente?-pregunto estresado Haechan. El solo quería comer fideitos. No tener que buscar una serpiente mientras su estómago se moría por el mínimo de comida.

-Pues no se, en cualquier lugar.-contestó distraído Mark mientras miraba bajo uno de los sillones.

-Cuchito...Cuchito...-se escucho en susurros, aunque no estaba seguro de haber escuchado bien. Por lo cual levantó la cabeza de su celular, mediante el cual está contándoles todo a Chenle y Jisung, para buscar de donde venía el ruido.-Cuchito...Cuchito ven...-se escucho más fuerte, haciendo que la pareja que inspeccionaba tras el mueble de la tele también se distrajeran de la labor, buscando al responsable.

-Que chucha.-susurró el moreno.

Jaemin se encogió de hombros. Aunque empezó a sospechar que cierto cabro rubio podía ser el responsable del ridiculo llamado, pues este había desaparecido hace un rato.

-¿Jeno sabes que no puedes llamar a la serpiente como si fuera un gato no?-hablo fuertemente el dueño de casa para hacerse oír desde donde fuera que Jeno estuviese.

Esperando en silencio ante una respuesta, escucharon como unos pasos se dirigían en su dirección. Unos segundos más tarde el rubio apareció haciendo un puchero que lo hacía ver tierno, queriendo darle un besito para que lo quitara.

-¿Y si le silbo?-pregunto inocentemente.

Todos lo miraron con el ceño fruncido.

-¿Como si fuera un perro?-se dirigió hacia el Jaemin.

-Saben que, no dije nada.-camino hasta el, sentándose a su lado sobre la mesa de la cocina.

-¿Quien te dio permiso para descansar?-reclamo el castaño.

-Nadie pero ya me canse.

Luego de ello la pareja decidió que sería buena idea ir a ver al segundo piso, después de todo ahí había estado antes de desaparecer.

Encontrándose ambos cabros solos se dedicaron tímidas miradas, pues aunque habían compartido bastantes momentos como aquel siempre comenzaban igual.

Se daban un par de miradas, se sonreían, intercambiaban un par de palabras, hasta que terminaban comiéndole la boca al otro.

-Nana.-hablo bajito Jeno.

PAUSADA/¡Oh, el qliao! [Nomin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora